Ucrania
Ascienden a 1.180 los civiles muertos en la invasión rusa de Ucrania, según la ONU
Cerca de 2.000 han resultado heridos, unas cifras que la propia ONU cree que son “considerablemente mayores”.
Las víctimas civiles por la invasión rusa de Ucrania son, hasta el momento, 3.039, según cifras de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh), que indicó que 1.179 personas han muerto y 1.860 han resultado heridas.
La mayoría de las víctimas han resultado heridas o han muerto debido al uso de explosivos, incluyendo bombardeos con artillería pesada y sistemas de lanzamiento de misiles. También por ataques aéreos, según la oficina de la ONU.
La Acnudh cree que el balance es “considerablemente mayor”, ya que las áreas en las que se registran hostilidades intensas demoran la entrega de datos y muchas informaciones están aún pendientes de ser corroboradas, por ejemplo en Mariúpol o Volnovaja, en la región de Donetsk.
Hasta ahora, más de 3,9 millones de personas han abandonado Ucrania desde que Rusia lanzó su ofensiva militar el pasado 24 de febrero, según el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur), que estima que más de diez millones de ucranianos han tenido que abandonar sus hogares en un mes.
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Esta cifra se conoce luego de que las autoridades de Mikolaiv, en el sur de Ucrania, informaran este martes que al menos siete personas murieron y 22 resultaron heridas tras un ataque realizado por las fuerzas rusas contra la ciudad.
En un comunicado difundido a través de Facebook, los servicios de Emergencias de Ucrania informaron que, de los 22 heridos, 18 han sido rescatados de entre los escombros y trasladados a varios centros médicos.
Poco antes, el gobernador de la región homónima, Vitali Kim, alertó en su canal de Telegram que las tropas rusas han bombardeado el principal edificio administrativo de la ciudad y señaló que el inmueble ha quedado gravemente dañado.
Especificó que en el momento del ataque había entre 50 y 100 personas en el interior del edificio, que habría recibido el impacto de un misil de las Fuerzas Armadas rusas. Además, poco después se registró un incendio en la zona.
Kim explicó que varios civiles y militares siguen atrapados bajo los escombros, por lo que los trabajos de búsqueda y rescate continúan.
La ciudad portuaria de Mikolaiv registró ataques por parte de las fuerzas rusas durante semanas. El pasado 19 de marzo, un bombardeo lanzado desde la región de Jersón dejó decenas de víctimas mortales, la gran mayoría militares.
Este mismo martes, Valentin Reznichenko, que se encuentra al frente de la administración militar regional de Dnepropetrovsk, señaló que las tropas rusas han llevado a cabo una serie de ataques en la zona.
En el distrito de Novomoskovski, un misil golpeó una granja y al menos una persona resultó herida, según informó la agencia de noticias Unian. Otro misil habría caído en la región de Nikopol.
Putin exige que los “nacionalistas” ucranianos de Mariúpol depongan las armas
Entre tanto, el presidente ruso, Vladimir Putin, condicionó este martes la “solución” de la situación humanitaria en la asediada ciudad de Mariúpol al desarme de los grupos “nacionalistas” ucranianos, informó el Kremlin.
En una conversación telefónica con su par francés, Emmanuel Macron, Putin “recalcó que para resolver la situación humanitaria en esa ciudad [Mariúpol], los milicianos nacionalistas deberán poner fin a su resistencia y deponer las armas”, precisó el Kremlin en un comunicado.
Según esa misma fuente, el mandatario informó a su homólogo francés acerca de las “medidas tomadas por el ejército ruso para entregar ayuda humanitaria de urgencia y garantizar la evacuación segura de los civiles” en Ucrania.
El Kremlin agregó que ambos dirigentes hablaron también de las negociaciones entre Rusia y Ucrania, que tuvieron lugar este martes en Estambul, así como de la decisión de Moscú de exigir que el gas ruso se pague en rublos.
“Acordaron seguir en contacto”, añadió el Kremlin.
Llamado a Occidente a no bajar la guardia contra Rusia
Por su parte, los gobiernos del Reino Unido, Estados Unidos, Francia, Alemania e Italia urgieron el martes a los países occidentales a no bajar la guardia frente a Rusia, que anunció su intención de reducir la intensidad de su ofensiva en torno a dos ciudades ucranianas.
En una conversación telefónica, Boris Johnson, Joe Biden, Emmanuel Macron, Olaf Scholz y Mario Draghi “concordaron en que no puede relejarse la determinación occidental hasta que haya terminado el horror infligido a Ucrania”, afirmó un portavoz del primer ministro británico en un comunicado.
El anuncio de Rusia se produjo tras conversaciones con Ucrania, después de más de un mes de conflicto que ha dejado miles de muertos y millones de desplazados.
La reducción de la actividad militar tendría lugar en torno a la capital, Kiev, y la ciudad de Chernígov, según el Kremlin.
Sin embargo, Johnson se hizo eco del escepticismo del secretario de Estado estadounidense Antony Blinken.
“El primer ministro subrayó que debemos juzgar al régimen de Putin por sus actos, no por sus palabras”, indicó su portavoz.
*Con información de Europa Press y AFP
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