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Asesores de Biden intentaron que no retirara todas las tropas de Afganistán
Los secretarios de Estado y Defensa trataron en vano de que el presidente Joe Biden no hiciera una retirada abrupta de Afganistán.
Los principales miembros del gabinete del presidente Joe Biden intentaron sin éxito disuadirlo de retirar totalmente las tropas estadounidenses presentes en Afganistán, con la esperanza de que aprovechara la retirada para buscar un acuerdo político, dice un nuevo libro que será lanzado el martes próximo.
El secretario de Estado, Antony Blinken, y el secretario de Defensa, Lloyd Austin, presionaron por una reducción más lenta del contingente estadounidense para alentar las negociaciones entre los talibanes y el gobierno afgano, según “Peligro”, un libro escrito por el famoso periodista de investigación Bob Woodward, coautor con su colega del The Washington Post, Robert Costa, de acuerdo con algunos extractos divulgados por la cadena CNN.
Blinken, un antiguo asesor de Biden que anteriormente había respaldado firmemente su plan para poner fin a esa guerra extendida por 20 años -la más larga librada por Estados Unidos-, llamó al presidente desde Bruselas después de escuchar las preocupaciones de los ministros de los países miembros de la OTAN en una reunión realizada en marzo, según el libro.
“Su nueva recomendación fue extender la misión de las tropas estadounidenses por un tiempo para ver si podía producirse un acuerdo político. Ganar tiempo para las negociaciones”, dice uno de los pasajes divulgados por CNN.
Biden, quien abogó por poner fin a la guerra una década antes cuando fungía como vicepresidente, no se dejó intimidar y explicó en un lenguaje colorido que sentía que los generales habían obligado al expresidente demócrata Barack Obama a quedarse en Afganistán.
Finalmente el hoy presidente dijo que retiraría las tropas restantes para el 31 de agosto, y comentó que establecer condiciones solo perpetuaría una “guerra interminable” en la que Estados Unidos ya había logrado sus objetivos.
La decisión de Biden fue bien recibida al inicio entre la población estadounidense, pero posteriormente se convirtió en objeto de críticas desde que los talibanes, derrocados por la invasión estadounidense 20 años antes, regresaron al poder repentinamente en cuestión de días cuando el gobierno y el ejército respaldados por Washington se replegaron.
La administración anterior del republicano Donald Trump había fijado una fecha de retirada el 1° de mayo en un acuerdo con los talibanes.
Lluvia de críticas
Senadores del oficialista Partido Demócrata criticaron el martes al gobierno de Joe Biden por la retirada de Afganistán, la que un alto legislador calificó de “fatalmente defectuosa”.
El secretario de Estado, Antony Blinken, escuchó las críticas durante su testimonio ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, tras ser objeto el lunes ante esa misma comisión de la Cámara de Representantes de la ira de los republicanos.
El demócrata Bob Menendez, presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado y normalmente un aliado de Biden, dio cuenta de la golpiza recibida por un periodista por parte de los victoriosos talibanes y dijo: “La represión del pueblo afgano está ocurriendo en tiempo real”. “Señor secretario, la ejecución de la retirada de Estados Unidos fue clara y fatalmente defectuosa”, dijo Menendez.
Menéndez, un feroz crítico de Mike Pompeo, el predecesor de Blinken al frente de la Secretaría de Estado, se mostró mordaz con la firma de un acuerdo entre el anterior gobierno de Donald Trump y los talibanes para el retiro de las tropas estadounidenses y poner fin a la guerra más larga de Estados Unidos.