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Así es el primer burdel de inteligencia artificial del mundo: utiliza muñecas sexuales de realidad virtual
Los clientes comparten compañía con muñecas sexuales de tamaño natural.
Para nadie es un secreto que la Inteligencia Artificial ha acaparado la atención de científicos, especialistas en nuevas tecnologías y el ciudadano de a pie que está cada vez más cerca de interactuar con esta herramienta.
A propósito de esta nueva realidad, salió a la luz el primer burdel con Inteligencia Artificial del mundo ubicado en Alemania, pionero en el futuro del sexo de realidad virtual, un lugar que a primera vista se ve como una empresa de acompañantes tradicional.
Su nombre es Cybrothel y se ubica en Berlín, las habitaciones privadas se pueden reservar por horas o durante toda la noche, como cliente, puede elegir a su acompañante entre una lista de nombres seductores como Bimbo o Schmidt, según el diario News Australia, citado por NY Post.
En Cybrothel, los clientes comparten compañía con muñecas sexuales de tamaño natural en lugar de trabajadoras sexuales humanas. Pese a que no pueden moverse, los clientes pueden interactuar con ellas virtualmente con cascos de realidad virtual para ver porno inmersivo en 4D con su robot sexual favorito.
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También tienen la opción de “enviar mensajes de texto” con la personalidad de IA de la muñeca, gracias a un modelo de lenguaje de IA obsceno y especialmente diseñado.
Cybrothel es el primero en el mundo en llenar su burdel con IA inmersiva y el copropietario Matthias Smetana dijo a news.com.au que su negocio buscaba desarrollar muñecos robóticos de próxima generación que respondieran al tacto y al habla en tiempo real.
El especialista en sexo en inteligencia artificial dijo que Cybrothel atraía a veteranos de la industria del sexo que buscaban una experiencia más innovadora y que quienes visitaban por primera vez se sentían atraídos por el entorno libre de presiones.
“Si estás aquí, la única persona que puede juzgarte eres tú mismo”, dijo Smetana.
“Tenemos muchas personas que nunca han estado en contacto con el trabajo sexual, que están realmente dispuestas a intentarlo, pero buscan un espacio seguro. Si te enfrentas a ansiedad por el desempeño, esto no ocurre en Cybrothel, ya que se trata de juguetes sexuales, no de humanos”.
Smetana dijo que Cybrothel era un modelo de un mercado sexual en evolución. El comercio sexual en Alemania ha ido disminuyendo en los últimos años, y el número de trabajadoras sexuales registradas ha disminuido un 30 por ciento en comparación con las cifras anteriores a la pandemia.
Según ella, los clientes tradicionales van a desaparecer en los próximos 10 a 15 años, es por eso que ahora la industria del sexo avanzara hacia la realidad virtual. Tener sexo en el mundo digital y en el mundo físico al mismo tiempo”.