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Autoridades en México rescataron a seis extranjeros secuestrados. Otras seis personas fueron capturadas por complicidad
El hecho se dio por medio de una operación por parte de miembros de seguridad ciudadana.
En una precisa operación que contó con el personal de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), desarrollado en la colonia Aviación Civil, de la alcaldía de Venustiano Carranza, en Ciudad de México, recobraron la libertad cuatro ciudadanos iraníes y dos ecuatorianos. De acuerdo con El Universal, el grupo se componía de tres mujeres y un hombre de Irán, y un hombre y un menor de edad de Ecuador.
Según el medio citado, los agentes del orden arrestaron a tres mujeres y un hombre de nacionalidad venezolana, los cuales estaban al cuidado de las víctimas, dándoles de comer y evitando que escaparan. Asimismo, se detuvieron a dos mujeres mexicanas, quienes serían las propietarias del inmueble en donde tenían secuestrados a los iraníes y ecuatorianos.
A través de un comunicado, la SSC expresó que la operación de rescate realizada se dio gracias a una solicitud por parte de la República Islámica de Irán en México, la cual señaló que al menos tres personas, ciudadanas de su nación, se encontraban secuestradas. Asimismo, la entidad extranjera ofreció una suma de dinero a cambio de sus compatriotas, pero no fueron liberados.
Más detalles del caso
La SSC declaró que tras adelantar la investigación pertinente, se localizó el lugar donde tenían a los secuestrados, aseverando que los agentes intervinieron “en estricto apego a los protocolos de actuación policial, uso de fuerza y respeto a los derechos humanos”. Los rescatados fueron puestos a salvo y presentados ante las autoridades para recibir apoyo psicológico y legal, además de poder tomar sus testimonios.
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Por su parte, los seis detenidos se encuentran a disposición del Ministerio Público, el cual seguirá adelantando la investigación, además de dictar sentencia contra los extranjeros y nacionales implicados.
Inseguridad en México al alza
A mediados de agosto, mientras la nación azteca se encontraba en vilo por la desaparición de Roberto Olmeda, de 20 años; Diego Lara, de 20 años; Uriel Galván, de 19 años; Dante Cedillo, de 22 años, y Jaime Martínez, de 21 años, la policía mexicana halló sus cadáveres con cinta adhesiva en su boca y con sus manos atadas en una casa abandonada en Lagos de Moreno.
Al confirmarse las identidades de los jóvenes, las autoridades también declararon que habían encontrado otros cuatro cráneos humanos quemados en medio de la sangre perteneciente a los jóvenes víctimas de un cartel mexicano.
Según las investigaciones, los 5 jóvenes sostuvieron un encuentro durante la noche de 11 de agosto para asistir a unas fiestas locales y luego dirigirse a sus casas, sin embargo, ninguno regresó a su hogar. De acuerdo con el Daily Mail, los hombres fueron vistos por última vez en un mirador cerca a una carretera en la localidad de San Miguel.
El hecho causó tanta conmoción en el estado de Jalisco que el fiscal general de ese estado, Luis Méndez, expresó a medios locales que los investigadores han estado buscando testigos y videos para esclarecer los hechos. Asimismo, el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, señaló a través de sus cuentas oficiales que “lo que estamos viendo aquí es un acto claramente vinculado al crimen organizado”, añadiendo que “estos son ataques irracionales, violentos y directos contra la estabilidad del estado de Jalisco, y exigen una reacción del gobierno (federal)”.
No obstante, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, quedó mal parado ante la prensa cuando le preguntaron por el hecho, ya que, de una forma algo criticada por la opinión pública, no dio pistas de que el gobierno fuese a intervenir en la investigación. Sin embargo, en un acto de defensa, el mandatario aseveró: “Soy un hombre de sentimientos, no puedo burlarme del dolor”, puesto que cuando se le preguntó por el caso, AMLO fingió no haber escuchado la pregunta.
