MUNDO
Bachelet advierte sobre “crímenes de guerra” en Ucrania
La Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos instó a Rusia a “actuar de inmediato para retirar sus tropas del territorio ucraniano”.
Los bombardeos y los ataques indiscriminados de Rusia contra zonas pobladas de Ucrania generan una “inmensa preocupación” y podrían configurar “crímenes de guerra”, afirmó este miércoles la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet.
“Los ataques indiscriminados están prohibidos por la ley humanitaria internacional y podrían constituir crímenes de guerra”, dijo la exmandataria chilena ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, recurriendo al condicional por convención, dado que las acusaciones deben ser por principio decididas por un tribunal.
“Las vidas de millones de personas se han visto trastornadas al verse forzadas a huir de sus hogares o a vivir en sótanos y en refugios antiaéreos mientras sus ciudades son hostigadas y destruidas”, agregó.
Bachelet se mostró también preocupada por el uso de armas sumamente potentes y con amplio radio de acción en zonas pobladas, que provocan “daños masivos” entre los civiles.
Indicó que sus servicios recogieron “testimonios creíbles de que las fuerzas armadas rusas usaron bombas racimo en zonas pobladas al menos 24 veces” desde el inicio de la invasión, el 24 de febrero.
Bachelet también elaboró un cuadro detallado de los ataques contra las estructuras de salud de Ucrania, que suma 77 centros de atención médica dañados, incluidos 50 hospitales y una decena de estructuras totalmente destruidos. Pero cree que el número real “probablemente sea considerablemente mayor”.
Ese es también el caso del número de civiles asesinados, de los cuales la oficina del Alto Comisionado lleva un recuento desde el 24 de febrero.
Según estas cifras, hasta el martes 29 de marzo murieron 1.189 civiles, incluidos 98 niños. Un balance que, reconoce, está muy por debajo de la realidad, al no tener sus equipos acceso directo a los lugares más expuestos como Mariúpol (sureste), donde se ha detectado la presencia de fosas comunes.
Las autoridades ucranianas evocan entre 5.000 y 10.000 muertos solo en este puerto.
Los bombardeos rusos desvanecen la esperanza de desescalada en Ucrania
Rusia afirmó el miércoles que no ve nada “prometedor” en las negociaciones de paz con Ucrania, que la acusó de bombardear la ciudad de Chernígov y un centro de la Cruz Roja en Mariúpol.
“Los ocupantes bombardearon deliberadamente un edificio del CICR (Comité Internacional de la Cruz Roja) en Mariúpol”, afirmó Liudmila Denisova, responsable de derechos humanos en el Parlamento ucraniano, sin disponer aún de informes sobre eventuales víctimas.
En el norte, Chernígov fue “bombardeada durante toda la noche”, declaró el gobernador regional, Viacheslav Chaus.
Luego del estratégico puerto de Mariúpol (sur), Chernígov, con 280.000 habitantes antes de la guerra, es la ciudad más duramente afectada por los bombardeos desde el inicio de la invasión rusa el 24 de febrero.
El portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, echó un jarro de agua fría a las expectativas creadas por las negociaciones del martes en Estambul.
“Por el momento, no podemos informar de nada muy prometedor o de un avance. Hay mucho trabajo por hacer”, declaró Peskov.
Sin embargo, el viceministro de Defensa ruso, Alexander Fomin, había afirmado el martes que tras esas discusiones Rusia decidió “reducir radicalmente” su actividad militar en torno a Kiev y Chernígov.
Estas discrepancias generan más interrogantes sobre la relación entre el Kremlin y su ministerio de Defensa.
Según informes de inteligencia de la Casa Blanca, existe “tensión” entre el Estado Mayor y Putin, que “es engañado por sus asesores sobre el mal desempeño de las fuerzas armadas rusas”.
Desde Ucrania, las promesas fueron recibidas con escepticismo.
“No nos creemos a nadie”, lanzó en un video el presidente ucraniano Volodímir Zelenski, alertando que probablemente las tropas rusas se estaban reagrupando para lanzar un ataque contra la región oriental del Donbás.
Previamente, el dirigente ucraniano había hablado por teléfono con su homólogo estadounidense, Joe Biden, sobre capacidades militares “adicionales” necesarias para ayudar al ejército de Ucrania, informó la Casa Blanca.
En su video, Zelenski insistió en la necesidad de disponer de tanques, aviones y sistemas de artillería para contener a Rusia. “La libertad debe estar tan armada como la tiranía”, dijo.
Las potencias occidentales también recelan de la desescalada rusa, aunque un oficial de Defensa de Estados Unidos apuntó a que las tropas de Moscú se estaban retirando de la central de Chernóbil, al norte de Kiev, tomada a principios de la invasión.
El primer ministro británico, Boris Johnson, instó a “seguir intensificando las sanciones” contra Rusia hasta que el último de los soldados rusos se haya retirado de Ucrania.
Eslovaquia anunció la expulsión de 35 diplomáticos rusos, que se suman a las decenas expulsados la víspera por Bélgica, Países Bajos, Irlanda y República Checa.
*Con información de la AFP.