MUNDO
Boris Johnson insiste en que vacuna AstraZeneca es “segura y funciona extremadamente bien”
Pese a que la OMS y autoridades sanitarias han recomendado que prosiga la vacunación con el fármaco de AstraZeneca, varios países del viejo continente han suspendido su aplicación.
El primer ministro Boris Johnson reafirmó el martes que la vacuna del covid-19 desarrollada por los británicos AstraZeneca/Oxford es “segura” y “extremadamente” eficaz, después de que varios países suspendieran su uso, preocupados por sus posibles efectos secundarios graves.
“Esta vacuna es segura y funciona extremadamente bien”, escribió el líder conservador en el diario The Times, subrayando que también es “relativamente fácil de distribuir” y “se suministra a precio de costo”.
La vacuna desarrollada por el grupo farmacéutico AstraZeneca con científicos de la Universidad de Oxford es una de las dos, junto con la de Pfizer/BioNTech, que se están administrando actualmente en la masiva campaña de vacunación británica, que ya administró una primera dosis a casi 24,5 millones de personas y dos a 1,6 millones.
Expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) están examinando la seguridad de la vacuna, que una docena de países, entre ellos España, Francia y Alemania, han suspendido como medida de precaución a raíz de los informes sobre “posibles” efectos secundarios, hasta ahora no demostrados, como problemas sanguíneos graves que incluyen formación de trombos.
La OMS y las autoridades sanitarias europeas han recomendado que prosiga la vacunación con el fármaco de AstraZeneca. El laboratorio señaló por su parte que es mayor el riesgo de no vacunar contra la covid-19 que el de aparición de trombos, cuya proporción, afirma, no es superior en las personas vacunadas que entre la población general.
Más países europeos suspenden la vacuna
Siete países europeos suspendieron este lunes la aplicación de la vacuna de AstraZeneca, extendiendo la lista de los que toman medidas por temor a efectos secundarios pese al respaldo de la OMS, y asestando un golpe a la campaña global de inmunización.
Además, en Latinoamérica, el gobierno venezolano anunció que no permitirá el uso del inmunizante del laboratorio sueco-británico. Una tercera ola de la pandemia obligó a Italia a reconfinarse el lunes y generó nuevas medidas en países como Alemania, Francia y Chile.
Pese a ello, Alemania, Francia, Italia, España, Portugal, Eslovenia y Letonia suspendieron este lunes la administración de la vacuna de AstraZeneca, y esperan el dictamen de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA).
En Brasil, convertido en una amenaza ante la proliferación de cepas de covid-19, el gobierno espera acelerar la campaña que avanza lentamente con una compra de 100 millones de dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech, entregadas hasta septiembre.
Eso se suma a la compra de 38 millones de unidades de Johnson & Johnson, lo que eleva el total de órdenes a 562,9 millones de dosis hasta fin de año.
En tanto, las polémicas continúan en el gobierno de Jair Bolsonaro, quien anunció un nuevo cambio de ministro de Salud -el cuarto funcionario en el cargo durante esta crisis sanitaria-, mientras el sistema se acerca al colapso y las muertes, a 280.000.
Antes de que los siete europeos decidieran suspender el fármaco de AstraZeneca, otros lo habían hecho: Holanda e Irlanda marcaron la pausa el domingo ante temores de coágulos sanguíneos, tras informes de Noruega y aunque no se haya demostrado que sea efecto directo de la vacuna.
El país nórdico había suspendido el uso la semana pasada, al igual que Dinamarca, Islandia y Bulgaria. También Austria interrumpió el uso por una muerte, sobre la cual la EMA descartó preliminarmente una relación.
A eso se sumó la decisión de Venezuela, que, según la vicepresidenta Delcy Rodríguez, “no dará permiso a la vacuna AstraZeneca (...) en razón de las situaciones, las complicaciones, que se han presentado”.
Esas vacunas se esperaban a través del sistema Covax, apoyado por la OMS para garantizar el acceso, pero su envío está trabado por deudas con la organización. Mientras, Venezuela aplica la vacuna rusa Sputnik V y la china de Sinopharm.
En el mundo se administraron más de 373 millones de dosis de vacunas anticovid. La de AstraZeneca, una de las más baratas, es crucial para las naciones más pobres, ya que son mayoría en el programa Covax.
Con información de AFP.