Cancillería incluye el género ‘X’ en el pasaporte: ¿qué significa y en qué otros países ocurre?

Desde el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia se anunció este jueves que la categoría de género ‘X’ se incorporará al pasaporte de la nación para las personas que no se sientan identificadas con los géneros femenino o masculino. Asimismo, la cancillería ha declarado que desde el mismo día del anuncio, el 24 de agosto, las oficinas de pasaportes estarán prestando este servicio.

“Siguiendo la estrategia de actualización tecnológica y mejora de los servicios y trámites para la ciudadanía, la Cancillería incluyó la categoría “X” en el pasaporte, reconociendo la diversidad sexual y de género”, declaró en un comunicado la institución, la cual recalcó la importancia de darle espacios de identidad a la comunidad no binaria en los documentos de identificación.

Esta medida se da en el marco de la política exterior de feminista del gobierno nacional, según lo declara la página web de la cancillería, en donde se da cumplimiento a la sentencia T-033 de 2022 encaminada con los estándares reglamentados por la Organización Internacional de Aviación Civil (OACI), por medio del Sistema Integral de Trámites al Ciudadano (SITAC) y el mecanismo de impresión de los pasaportes.

¿Por qué la X?

Esta letra, la cual ha sido característica para encerrar lo que carece de definición o de certeza, podrá ser utilizada en el pasaporte por las personas no binarias las cuales no se sienten identificadas bajo las letras F (femenino) o M (masculino). La letra X les ayudará a reflejar su identidad de género de manera oficial.

Además de las personas no binarias, también resultan beneficiados con esta medida los individuos agénero, género queer y demás identidades que no se sienten a gusto con los conceptos tradicionales de hombre o mujer.

No solo es en Colombia

“La cancillería reconoce la diversidad de género con la posibilidad de registrar en su pasaporte el sexo no binario, este se identificará en los pasaportes con una X” aseveró una vocera de la cancillería, añadiendo que “con este cambio, Cancillería sigue trabajando en concordancia con la política exterior feminista del gobierno del cambio”.

Colombia se une a la lista de países que han incluido la categoría de género ‘X’ en sus documentos de identificación, junto con México, Argentina, Canadá y Estados Unidos quienes ya han comenzado a expedir sus respectivos pasaportes con la letra X en la casilla de género.

Por fuera del continente americano, las naciones de Pakistán, Nepal, Alemania, Nueva Zelanda, Países Bajos y Australia también contemplan la categoría ‘X’ en la expedición del pasaporte.

Según el portal Página 12, solo algunos estados reconocen la identidad de género no binaria o neutral en su marco legal, como lo son:

• En América: Brasil, Canadá, Estados Unidos, México, Paraguay, Uruguay, Venezuela, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú y Surinam.
• En Europa: Malta, Bélgica, Luxemburgo, Dinamarca, Irlanda, Países Bajos y Portugal.
• En Asia: Bangladesh, India, Pakistán y Nepal.
• En África: Kenia.
• En Oceanía: Australia y Nueva Zelanda.

Identidad de género vs. preferencia sexual

La comunidad LGBTIQ+ abandera a varios individuos y colectivos que han sido marginados por su identidad de género y por su preferencia sexual, los cuales se pueden confundir fácilmente, sin embargo, son muy distintos.

La preferencia sexual tiene que ver con el gusto físico o emocional que tiene una persona hacia otra, en este grupo se encierran los homosexuales, las lesbianas, los bisexuales, demisexuales, entre otros.

Por otro lado, la identidad de género se relaciona con la manifestación de una persona al declarar si se siente a gusto o no con su sexo biológico (hombre o mujer). En esta categoría están los no binarios, transgénero, transexuales, agénero, género queer y demás identidades.

Desde los estudios de género se han categorizado bastantes identidades y preferencias sexuales dada la disminución del tabú en tocar estos temas en el aula de clase y en las universidades. Asimismo, las sociedades occidentales son las que han demostrado un mayor progresismo frente a este tema, el cual es uno de los más debatidos a nivel mundial y de los más controvertidos para comunidades religiosas y conservadoras.