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"Vete mijito del país": la dura carta de una venezolana a Maduro

Pilin León, quien fue Miss Mundo 1981 y ha sido líder de los venezolanos en Colombia, le escribió al presidente de su país: “Puede que hoy ostentes el cargo de presidente, pero señor no eres”.

28 de julio de 2017
| Foto: Fotomontaje SEMANA / Twitter Pillin León

SEMANA le pidió a un grupo de venezolanos que contaran cómo han vivido la crisis y cuáles son preocupaciones. Esta es la carta que Pilin León le escribió a Nicolás Maduro.

“¿Cómo me dirijo a una persona que usurpa el cargo de presidente de mi país natal? ¿Cómo le digo que desprecio sus acciones, su terrorismo, sus métodos, sus acólitos?

Aquí voy, haciendo un esfuerzo por no enfermarme solo con la idea de escribirle:

¿Cómo te digo Nicolás, que eres la consecuencia de la peor catástrofe política que le ha pasado a Venezuela?

Tú Nicolás, has terminado de destruir un país hermoso, lleno de gente alegre, emprendedora, educada, a veces un poco despreocupada, porque teníamos un país que nos daba todo, y creo que no supimos anticiparnos a la vorágine chavista que nos quitó todo, hasta el miedo.

No te quiero decir presidente porque sería otorgarte un estatus que requiere de respeto de los ciudadanos a quienes gobiernas. Decirte Nicolás, como te he mencionado ya, es parecer que somo amigos, y eso muyyyyy lejos de mi deseo. Decirte señor Maduro es otorgarte un calificativo que tampoco mereces, porque puede que hoy ostentes el cargo de presidente de Venezuela, pero señor no eres.

Tú, consecuencia de Chávez, has sido tan mediocre y tan ineficiente, que ni tus propios copartidarios te quieren, hasta tal punto de decirse chavista y no maduristas, ¿qué tal? Para tu ego debe ser algo muy duro, porque eso de llegar de chofer de bus a presidente te lo infló tanto que aumentaste como 30 kilos de peso junto con ello. Y eso que yo creo fervientemente que hay mucha gente autodidacta digna de ocupar cargos importantes, pero tú chico, ni siquiera te preparaste para nada, solo basta ver dos minutos tus cadenas, para verte cometer los errores que nadie medianamente educado para el cargo hubiese cometido. No te los voy a enumerar, porque ya es de todos conocido y has sido la burla de propios y extraños.

Tú tuviste la oportunidad de arreglar el rumbo del país, de enderezar el destino que tu “padre”, el intergaláctico difunto Hugo Chávez, torció para favorecerte y favorecer a su camarilla, a los Castro y a su familia. Tuviste la oportunidad de pasar a la historia, como la tuvo el fallecido, de marcar un rumbo hacia el progreso y la equidad. Tuvieron la oportunidad, junto a sus cómplices internacionales de sacar el país adelante y no lo hicieron.

Por ahí leo que hasta Nicaragua ha tenido progreso en su economía y Evo, con su mínima preparación, también lo ha hecho mil veces mejor que tú y que tu intergaláctico. Ellos que eran ejemplo de rutas equivocadas, se quedan chiquitos al lado tuyo y de tus cómplices; porque cómplices son por narcotraficantes, por corruptos, por asesinos de inocentes, por torturadores, por secuestradores, no solo de personas sino de la democracia de un país que era ejemplo en América Latina.

Me desgasto cuando pienso en ti, eres un tumor maligno, con toda la metástasis que dejó Hugo.

Me duele tanto mi país, me duele lo que hicieron con él, la fractura de las familias y amistades, los bandos que crearon entre los ciudadanos, la pobreza y la ignorancia que acrecentaron, el hambre que galopa, la enfermedad sin curas. Mira el país que gobiernas, mira bien y no sigas tratando de hacernos tragar el cuento de las intervenciones del imperio, que para tu información los Estados Unidos no son imperio, no tienen rey y menos emperador, son una república federal ¡Lee un poquito, vale!

Vete mijito del país, vete a Cuba donde los Castro te aman como a un hijo, llévate a Cilia a tus hijos y los hijos de ella. Deja que metamos preso a Diosdado, a la Fosforito, a Tarek, también a otro Tarek, que la fiscal nos rinda cuentas de sus actos pasados, aunque haya querido enmendar, muy poco, los presentes, al general ese que le dicen el Pollo (que hiciste soltar en Aruba valiéndote de no sé qué cosas) y tantos otros que con sus acciones delincuenciales no solo se han enriquecido sino que han empobrecido al país y han enfermado a tanta gente en el mundo.

Nico, ¿no tienes ni un poquito de vergüenza?

Bueno y con esta me despido esperando que más temprano que tarde si no es porque tú lo decides, hayamos logrado sacarte del Gobierno y ojalá sino meterte en la cárcel que ya no esté pisando suelo venezolano.

Sin ninguna fórmula de despedida cordial para ti”

Pilin León
Madre y ciudadana venezolana
(Ah y fui Miss Mundo hace siglos, como pongo en mi Twitter)"