| Foto: Fotomontaje Semana. Fondo: San Diego Country Club, tomada de wikimapia.org

MUNDO

Chicho Serna y familiares de Pablo Escobar podrían ir a juicio por lavado de activos en Argentina

A través de un auto, el juez Néstor Pablo Barral decretó el procesamiento y se abstuvo de privarlos de la libertad. Ordenó embargos por 30 millones de pesos argentinos (unos 3.500 millones de pesos colombianos).

5 de junio de 2018

La investigación comenzó por los reveladores documentos encontrados en la casa de Mateo Corvo Dolcet. Él es el abogado de José Byron Piedrahíta, el ganadero colombiano capturado en Caucasia por cargos de corrupción a un agente de Estados Unidos y solicitado en extradición por ese país. Hasta antes del allanamiento, la investigación avanzaba en contra de Piedrahíta, quien es acusado en Argentina por lavar 15 millones de dólares producto del narcotráfico. 

Sin embargo, la información recogida en la casa del abogado y las declaraciones rendidas ante las autoridades -que permitieron que recuperara su libertad bajo fianza- dejaron al descubierto lo que hoy se califica como la segunda fase de la investigación. El juez federal de Morón Néstor Barral decidió decretar el procesamiento (etapa investigativa que da cuatro meses de plazo para decidir si eleva el caso a juicio o no) de María Isabel Santos Caballero y a Juan Sebastián Marroquín Santos, viuda e hijo del capo Pablo Escobar. Al igual que a Mauricio Serna, el exfutbolista colombiano, ídolo en Boca Juniors y Atlético Nacional. Todos están señalados como presuntos responsables del delito de lavado de activos agravado. 

En contexto: Chicho Serna estaría involucrado en escándalo de lavado de activos en Argentina

La documentación, bautizada por la prensa argentina como ‘la caja de Mateo‘, contiene una constancia firmada por el abogado y la familia de Escobar en la que queda consignado un supuesto pacto para el pago de una comisión del 4,5 por ciento (unos 100.000 dólares) por presentar al abogado Corvet con José Byron Piedrahíta en el 2008. “La señora Maria Isabel Santos y Sebastián Marroquín, por una parte, y por otra Mateo Corvo Dolcet extienden el presente documento a efecto de dar por cumplidas promesas recíprocas resultantes de la presentación del señor José Piedrahita como inversor en el proyecto inmobiliario que Corvo Dolcet lleva adelante”, dice el documento incautado.

Entre los proyectos de inversión, según se ha desprendido de la investigación, está el Hotel Faena y el tradicional Café de los Angelitos, un histórico lugar de tango a pocos metros del Parlamento del Congreso, en Buenos Aires. Sin embargo, la verdadera joya de la corona era un proyecto de inversión para la construcción de un barrio de lujo de 200.000 metros cuadrados, con servicio de tren VIP.

Piedrahíta como inversionista era el llamado a volver este lujoso megacondominio en una realidad. Sin embargo, antes de que pudiera lograrlo, el ganadero colombiano fue capturado en Caucasia con fines de extradición, como el supuesto responsable de un soborno a un agente federal en Estados Unidos, cometido en el año 2010. En la investigación que adelanta Argentina, Piedrahíta es considerado el jefe de esta operación de lavado de activos a gran escala, en la que también aparece mencionado el nombre del exfutbolista Chicho Serna.

En específico, se relaciona a Serna con una operación de propiedades que Piedrahíta le propuso hacer; lo que los colombianos llaman un ‘cambalache‘. Esto significaba que al irse para Argentina intercambiaba propiedades suyas en Colombia, con propiedades en Argentina que tenía  Chicho Serna. "Por lo cual Piedrahíta recibió de parte de Chicho en camabaleche, una Land Cruise último modelo, un Bora (automóvil), una casa amoblada en el Country San Diego por un valor superior a 1 millón de dólares, un departamento amoblado sobre la Av. Libertador, zona de Olivos o Vicente López nuevo y dos terrenos en un Country de Zona Oeste de nombre Terra Vista, más dinero en efectivo", dice la declaración del abogado.

El juez asegura que su aporte fue esencial para que Piedrahita lograra el ensombrecimiento de su capital a través del intercambio de los bienes; también recibió un importante porcentaje de acciones de la Sociedad Anexo Chile S.A. en una transacción en la que fueron vendidas por casi el doble del original.

"Las distintas acciones que se llevaron a cabo a lo largo del tiempo, formaron parte de un plan previamente concebido y que tenía un único designio: legitimar los ingresos de Piedrahita Ceballos", indicó el juzgado en el auto. Dice además que estos hechos deben ser considerados como parte de la materialización de una sola maniobra de lavado. 

Según el juez argentino, se da por acreditado el conocimiento y voluntad que tuvieron sobre sus actos los tres procesados. Por no encontrar riesgo procesal, la justicia argentina decidió continuar el juicio con los implicados en libertad. Sin embargo, como medida cautelar les impuso un embargo de 30 millones de pesos argentinos a cada uno (un equivalente a 3.500 millones de pesos colombianos).