China
China despliega estrategia de disuasión militar para responder a reunión entre delegados de EE.UU. y Taiwán
Se tiene previsto que las acciones desplegadas este domingo tengan una nueva jornada el próximo lunes, en medio de un despliegue de poderío militar para buscar disuadir a Taiwán, y tras advertir medias ‘firmes y contundentes’ en retaliación por el acercamiento diplomático.
China simuló el domingo ataques contra “objetivos clave” en Taiwán, en el segundo día de unas maniobras militares previstas hasta el lunes, en respuesta a la reunión de la presidenta taiwanesa con el líder de la Cámara de Representantes estadounidense.
El ejército chino simuló “ataques de precisión” contra “objetivos clave en la isla de Taiwán y en las aguas circundantes”, en los que participaron decenas de aviones y tropas terrestres, indicó la televisión estatal del país asiático.
Pekín dijo que en las maniobras, que durarán hasta el lunes, se están movilizando destructores, lanchas rápidas y aviones de combate, entre otros.
Los ejercicios militares empezaron después de que la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, se reuniera el miércoles en California con el presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy.
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China prometió responder al encuentro con medidas “firmes y contundentes”.
“No hay ningún motivo por el que Pekín convierta esta reunión en algo que no es en realidad y que la utilice como pretexto para reaccionar de manera excesiva”, dijo el domingo un portavoz del Departamento de Estado norteamericano.
El ministerio de Defensa de Taiwán detectó el domingo 11 buques de guerra y 70 aviones chinos alrededor de la isla, tras haber avistado otros tantos el día anterior.
El ministerio aseguró que estaba respondiendo a las maniobras “con calma y serenidad” y explicó que los aviones de guerra detectados hasta las 4:00 p.m. incluían cazas y bombarderos.
Las maniobras tienen el objetivo de establecer la capacidad de China para “tomar el control del mar, el espacio aéreo y la información (...) para crear una disuasión y un cerco total” de Taiwán, precisó el sábado la televisión estatal china.
Taiwán y Estados Unidos denunciaron la operación, llamada “Espada Conjunta”, y pidieron “moderación” a Pekín al tiempo que aseguraron mantener abiertos sus canales de comunicación con China.
“Seria advertencia”
China considera la isla de Taiwán, de 23 millones de habitantes, como una de sus provincias que aún no ha logrado reunificar con el resto de su territorio desde el final de la guerra civil en 1949.
Las maniobras “sirven de seria advertencia contra la connivencia entre las fuerzas separatistas que buscan la ‘independencia de Taiwán’ y las fuerzas exteriores”, advirtió un portavoz del ejército chino, Shi Yi.
Washington reiteró el sábado su llamamiento a “no cambiar el statu quo”.
“Confiamos en que tenemos suficientes recursos y capacidades en la región para garantizar la paz y la estabilidad”, dijo el Departamento de Estado.
El gobierno chino anunció que el lunes realizará ejercicios con fuego real en el estrecho de Taiwán, cerca de la costa de Fujian, una provincia situada frente a la isla, según las autoridades marítimas locales.
Los ejercicios, que tienen una dimensión “operativa”, pretenden demostrar que el ejército chino estará preparado, “si se intensifican las provocaciones”, para “resolver la cuestión de Taiwán de una vez por todas”, declaró a la AFP el experto militar Song Zhongping.
“Estoy un poco preocupado, mentiría si dijera lo contrario”, declaró el domingo a la AFP Donald Ho, de 73 años, en un parque de Taipéi. “Si hay guerra, ambas partes sufrirán mucho”, agregó.
“Expansionismo autoritario”
La AFP no constató el domingo un aumento de las actividades militares en la costa norte de la isla de Pingtan, en la provincia de Fujian, cerca de donde se deben efectuar los ejercicios con fuego real.
Junto a una carretera cerca de la costa, Lin Ren puso el himno chino mientras vendía café detrás de un coche. “Creo que los ejercicios muestran claramente que tenemos los medios (...) de unificar” el territorio, contó a AFP este hombre de 29 años.
La presidenta Tsai denunció el sábado el “expansionismo autoritario” de China y aseguró que Taiwán “seguirá trabajando con Estados Unidos y otros países (...) para defender los valores de libertad y democracia”.
China está descontenta con el acercamiento de los últimos años entre las autoridades taiwanesas y Estados Unidos, que, a pesar de la ausencia de relaciones oficiales, proporciona a la isla un importante apoyo militar.
En agosto, China realizó maniobras militares sin precedentes en torno a Taiwán y disparó misiles en respuesta a una visita a la isla de la demócrata Nancy Pelosi, predecesora de McCarthy en el cargo en la Cámara de Representantes.
Estados Unidos reconoció a la República Popular China en 1979 y, en teoría, no debería tener ningún contacto oficial con la República de China (Taiwán) en virtud del “principio de una sola China” que defiende Pekín.