China estaría enviando equipos militares para apoyar a Rusia en la guerra contra Ucrania

La tensión geopolítica entre Estados Unidos y China ha marcado un punto alto durante las últimas horas debido a que un globo de origen chino fue descubierto sobrevolando el espacio aéreo estadounidense. Pero a la polémica también se está sumando un hallazgo periodístico que podría elevar los ánimos aún más.

Se trata de un reportaje periodístico publicado en las últimas horas por el medio estadounidense The Wall Street Journal que da cuenta del supuesto apoyo militar que China le estaría brindando a Rusia para seguir adelante con la invasión a Ucrania. Las noticias se conoció a pocos días de que se cumpla el primer año de la invasión rusa a territorio ucraniano.

Según la investigación que adelantó The Wall Street Journal, pese a que Rusia está cercada por sanciones internacionales y barreras para comerciar con otros países, ha logrado recibir lotes de tecnología militar procedentes de suelo chino.

“Los registros aduaneros muestran que las empresas de defensa estatales chinas envían equipos de navegación, tecnología de interferencia y piezas de aviones de combate a empresas de defensa estatales rusas sancionadas”, indicó el reportaje elaborado por el medio estadounidense.

La información la consiguieron a través de C4ADS, una organización sin ánimo de lucro que está dedicada a monitorear amenazas para la seguridad nacional de Estados Unidos. The Wall Street Journal señaló que se trata de numerosos envíos de bienes de doble uso que pueden ser usados tanto para fines comerciales como militares.

En total, indicaron que analizaron cerca de 84.000 envíos cuyos registros reposaban en las oficinas de las aduanas rusas. Los reportes fueron de las fechas posteriores a la imposición de sanciones por parte de Estados Unidos y la Unión Europea, que aumentó la presión económica para el gobierno ruso.

Así mismo, citaron fuentes del gobierno estadounidense que les dijeron que sus hallazgos eran una muestra de que Rusia tenía capacidades suficientes como para seguir recibiendo envíos, pese al cerco internacional de sanciones.

“A pesar del escrutinio internacional y los protocolos de sanciones, los datos comerciales globales confiables muestran que las empresas de defensa estatales chinas continúan enviando piezas militares aplicables a las empresas de defensa rusas sancionadas”, le dijo a The Wall Street Journal Naomi García, una analista de la organización C4ADS.

“Estas empresas rusas han sido registradas utilizando estos mismos tipos de piezas directamente en la guerra de Rusia en Ucrania”, concluyó.

Pese a que las entidades rusas contactadas por los periodistas se abstuvieron de hacer declaraciones y responder a las preguntas que les hicieron los periodistas del medio estadounidense, citaron a un representante del gobierno ruso.

“Rusia tiene suficiente potencial tecnológico para garantizar su seguridad y llevar a cabo la operación militar especial. Este potencial se mejora constantemente”, advirtió Dmitry Peskov, un vocero del Kremllin.

Estados Unidos derribó el globo chino

El incidente con el globo chino en espacio aéreo estadounidense puso al mundo con los pelos de punta, pese a que fue derribado y a que el gobierno chino señaló que se trataba de un instrumento para medir el clima.

Más allá de las incomodidades de las últimas horas, Washington se ha esforzado por mantener el diálogo con su gran rival, abogando por una “gestión responsable” de las relaciones con Pekín.

Los temas de litigio entre ambas potencias son numerosos. Abarcan desde Taiwán hasta los derechos humanos, pasando por el dominio chino en el campo de los semiconductores. Para los estadounidenses es importante encontrar puntos en común con los chinos y asegurarse de que la competencia bilateral “no se convierta en un conflicto”.

Pero el incidente del globo “espía” obligó a Blinken a posponer su viaje, demostrando cuán plagado de dificultades es el camino para el acercamiento a Pekín, bajo la presión de la oposición republicana, que ha denunciado la “debilidad” del gobierno demócrata.

Si bien consideró “inaceptable” el incidente del globo, Blinken trató de calmar las cosas asegurando que su visita se reprogramará tan pronto como “las condiciones lo permitan”, e insistió en la necesidad de mantener “abiertas las líneas de comunicación” con Pekín.

Según Jacob Stokes, del Centro para una Nueva Seguridad Estadounidense, “la pregunta era si el cambio de tono visto en China significaría que Pekín se comportaría de manera diferente en todo el mundo”. “Hasta ahora la respuesta ha sido no”.

La pregunta actualmente es si el incidente del globo no corre el riesgo de “aplazar el proceso” iniciado en Bali en noviembre pasado, cuando Biden se reunió con su homólogo chino Xi Jinping, o incluso podría acabarlo.

*Con información de AFP.