Ecuador
CIDH pide investigación y no repetición de hechos violentos en cárceles de Ecuador
Mediante un comunicado, el órgano lamentó la muerte de al menos 20 personas en motines registrados en la cárcel de Turi el pasado 3 de abril.
En un comunicado expedido por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el organismo multilateral adscrito a la OEA prendió las alarmas frente a la difícil situación que se vive en las cárceles de Ecuador y que nuevamente ha estado marcada por hechos violentos, luego de que el pasado fin de semana 20 internos resultaran muertos en medio de un motín al interior de la cárcel de Turi, en la provincia de Cuenca.
En su comunicado, la CIDH condenó los hechos de violencia y puntualizó en el deber que le asiste al Estado para garantizar la vida y la seguridad de las personas que se encuentran bajo su custodia, privados de la libertad.
En ese sentido, la CIDH abogó porque desde el Gobierno y las diferentes entidades estatales correspondientes se desarrollen las investigaciones respectivas, manifestando la importancia de que estas puedan hacerse de una “forma rápida”, pero recordando que deben estar marcadas por condiciones que garanticen su imparcialidad.
Así, la CIDH abogó porque desde el Estado también se implementen acciones que propendan por evitar que hechos similares se sigan presentando al interior de las cárceles del Ecuador, afirmando que en los últimos años, varios han sido los escenarios que, de forma similar, han desencadenado hechos lamentables.
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El llamado de la CIDH llega en momentos en los que el informe de las autoridades admite que, además de la muerte de 20 personas al interior de la cárcel de Turi, el hecho violento en el plantel carcelario también estuvo marcado porque, de las dos decenas de víctimas, cinco de las víctimas fueron halladas con signos de tortura y desmembramiento.
Según detallan medios internacionales, este nuevo llamado de la CIDH aboga ante el Estado ecuatoriano porque se tomen las medidas necesarias para la garantía de los Derechos Humanos, y va en la misma senda de una serie de recomendaciones que el organismo multilateral ya había elevado en meses pasados, como resultado de la evidencia de algunas fisuras en el sistema carcelario, al igual que algunas alertas tempranas sobre escenarios de riesgo.
En aquel entonces, la CIDH había notado con preocupación cómo el debilitamiento de las instituciones y autoridades carcelarias estaba dando lugar a la presentación de actos de corrupción al interior de los penales, acciones que iban en detrimento del debido trato con los internos, así como el otorgamiento de beneficios a ciertos sectores.
De igual modo, la CIDH también había notado con preocupación que el Código Penal de Ecuador establece principalmente penas carcelarias, razón que tampoco ayuda a aliviar los altos niveles de hacinamiento, ni hace efectivo el fin de resocialización de los reclusos.
#Ecuador 🇪🇨 #CIDH condena los hechos de violencia en el Centro de Privación de Libertad Azuay N1 en Turi, el #3ABR. Según @FiscaliaEcuador, al menos 20 personas fallecieron. Se recuerda el deber del Estado de garantizar la vida y seguridad de las #PersonasPrivadasDeLibertad. pic.twitter.com/kdUWzkYwao
— CIDH - IACHR (@CIDH) April 5, 2022
En ese mismo sentido, la CIDH también advirtió sobre el uso de los mecanismos de prisión preventiva, advirtiendo similares efectos sobre la capacidad carcelaria, lo cual a su vez deriva en las “deplorables condiciones” en que permanecen los internos, notando la falta de garantías para estos, así como la ausencia de oportuna atención médica, acceso a servicios básicos, infraestructura deficiente, e incluso alimentación precaria, entre otros.
Sobre el origen de la confrontación violenta acaecida el fin de semana en el penal de Turi, desde el Ministerio del Interior, se advirtió que la revuelta comenzó por cuenta de una confrontación de internos que buscan tener el control de la institución carcelaria.
Cifras de precaria situación carcelaria en Ecuador
Según las cifras recogidas por la agencia AFP, durante 2021, Ecuador vivió uno de sus peores momentos en materia carcelaria, pues se registraron decenas de situaciones violentas al interior de las cárceles, con un saldo mortal de 320 internos.
El hacinamiento, una de las principales problemáticas identificadas en las cárceles, da cuenta de una sobreocupación cercana al 30 %, referida a la presencia de 39.000 presos, en una infraestructura que tiene capacidad máxima para alojar a 30.000 reclusos.
En ese sentido, también es importante anotar que de los 39.000 presos que tiene Ecuador, un poco menos de la mitad, 19.000, son personas que no han sido aún sentenciadas.
Incremento de violencia carcelaria
Según datos de las autoridades, la del pasado fin de semana es la quinta masacre carcelaria que ocurre en Ecuador en lo corrido de un año, en medio de una ola de lo que los responsables del sistema penal señalan como pugnas por el poder interno, que se ven agudizadas por el aumento de presos relacionados con grupos narcotraficantes.
Las cifras también han revelado que, pese a los esfuerzos tomados desde las autoridades y el Gobierno nacional, que ha incluído la creación de la comisión civil para pacificar las prisiones, estos han sido al parecer insuficientes.
En ese sentido, ONG defensoras de derechos de los privados de la libertad, también han denunciado que las autoridades han hecho “oídos sordos” a alertas tempranas y denuncias por parte de los mismos familiares de los reclusos, calificando como deficiente o nula la reacción por parte de los entes correspondientes.