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Colombia y Venezuela empatan en el ‘ranking’ de los países menos seguros del mundo, ¿en qué posición se encuentran?
Colombia tiene los niveles más bajos de paz de la región.
La 17ª edición del Índice de Paz Global (GPI) anual, la principal medida de paz del mundo, revela que el nivel promedio de paz global se deterioró por noveno año consecutivo, con 84 países registrando una mejora y 79 un deterioro.
El estudio, llamado Índice de Paz Global y elaborado por el Instituto para la Economía y la Paz, cubre al 99,7 % de la población y mide “la seguridad social, los conflictos nacionales e internacionales y el grado de militarización”.
América Central, el Caribe y América del Sur han registrado deterioros sustanciales, recayendo principalmente en medidas de represión, violencia y conflicto. Europa sigue siendo la región más pacífica del mundo, a pesar del deterioro del gasto militar y de las relaciones con los países vecinos debido a la guerra de Ucrania.
En la región todavía se encuentran siete de los diez países más pacíficos, y el nivel de manifestaciones violentas, protestas y disturbios sigue siendo elevado. Los otros tres países más pacíficos se encuentran en la región de Asia y el Pacífico.
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Colombia tiene los niveles más bajos de paz de la región, aunque registró una pequeña mejora en su puntuación general durante el año pasado. Los seis del dominio de militarización. Los indicadores mejoraron en 2022, con la mayor mejora en el indicador de financiación de las operaciones de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas.
Sin embargo, a pesar del aumento general de la paz, Colombia ha experimentado un deterioro de la estabilidad política a lo largo de 2022. Las muertes por conflictos globales aumentaron un 96 % a 238.000, el impacto económico mundial de la violencia aumentó un 17 %, o un billón de dólares hasta 17,5 billones de dólares en 2022, lo que equivale al 13 % del PIB mundial.
Los conflictos se están internacionalizando cada vez más: 91 países están ahora involucrados en algún tipo de conflicto externo, frente a 58 en 2008. Pese al conflicto en Ucrania, 92 países mejoraron su gasto militar y 110 redujeron su personal militar.
Islandia sigue siendo el país más pacífico, posición que ocupa desde 2008, seguida de Dinamarca, Irlanda, Nueva Zelanda y Austria. Por sexto año consecutivo, Afganistán es el país menos pacífico, seguido de Yemen, Siria, Sudán del Sur y la República Democrática del Congo.
Diez de los 23 indicadores del IPG mejoraron, 11 empeoraron y dos no tuvieron cambios. Los mayores deterioros se produjeron en los conflictos externos librados y en las muertes por conflictos internos. Otros deterioros notables incluyeron las relaciones con los países vecinos y la inestabilidad política, donde 59 países se deterioraron.
Una de las razones de la baja clasificación de Estados Unidos es la tasa de homicidios, y el informe afirma: “Estados Unidos registró el cuarto mayor aumento general en su tasa de homicidios, que ahora supera seis por cada 100.000 personas y más de seis veces más que la mayoría de los países de Europa occidental”, según el informe.
Steve Killelea, fundador y presidente ejecutivo de IEP, dijo: “El Índice de Paz Global 2023 destaca las dinámicas contrastantes de la militarización y el conflicto. Por un lado, la mayoría de los países están disminuyendo su dependencia del ejército, mientras que, por otro, un número cada vez mayor de conflictos se están internacionalizando”.
Grupos armados se han expandido un 20 % en el Gobierno Petro
En medio de un debate de control político a Danilo Rueda, alto comisionado para la Paz, la representante Catherine Juvinao expuso preocupantes datos sobre la ‘paz total’ del gobierno del presidente Gustavo Petro. De acuerdo con lo expuesto por la congresista en la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Representantes, los grupos armados se han expandido un 20 % en lo que va de su administración.
Para su intervención, Juvinao tuvo en cuenta cerca de 50 informes publicados por diferentes organizaciones, como Indepaz, Fundación Ideas para la Paz (FIP), Fundación Paz y Reconciliación (Pares), Misión de Observación Electoral (MOE), la misión de Verificación de las Naciones Unidas y la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (Ocha). Además, analizó informes oficiales de la Defensoría del Pueblo y Ministerio de Defensa, tal como varias notas de prensa.
La conclusión de Juvinao es que, tras ocho ceses al fuego con cinco grupos armados en diez meses, hubo “recrudecimiento de la violencia, ceses al fuego fallidos y expansión territorial y fortalecimiento de grupos ilegales”.
La violencia política aumentó un 39,5 % y contra liderazgos políticos presentó un incremento del 92 %. Por otro lado, la violencia en las Circunscripciones Transitorias Especiales de Paz (Citrep) subió un 6,5 % y la violencia política contra la mujer presentó la misma tendencia, en un 20,9 %.
