Conmoción en México por la muerte del empresario Íñigo Arenas Saiz en extrañas circunstancias

El caso judicial que conmueve esta semana a México es el fallecimiento del empresario y consultor Íñigo Arenas Saiz en el interior del bar Black Royce, en Naucalpan, un municipio cercano a la capital del país.

Una larga noche de juerga que había comenzado el sábado 5 de agosto terminó en este hecho trágico que ocupa las primeras planas de los informativos mexicanos.

Incluso, el presidente de la República, Ángel Manuel López Obrador, se refirió a ello en su acostumbrada conferencia mañanera del pasado lunes.

En principio, las pesquisas se enfocaron en el bar República, en el exclusivo sector de Polanco, donde Arenas Saiz había sido visto por última vez antes de que fuera reportado como desaparecido.

Uno de los dueños del establecimiento dio a conocer unas imágenes de la madrugada del domingo, en las que se veía al empresario en la puerta del lugar, tambaleándose, al parecer por los efectos del alcohol.

Según representantes del mismo establecimiento, le habían pedido que se retirara debido a su alto grado de embriaguez, casi a las 3:00 a. m.

Arenas Saiz luego fue visto en un puesto de tacos, en el mismo sector de Polanco, y siguió buscando un bar donde seguir divirtiéndose, pero parece que le negaron la entrada por estar muy borracho.

Con el paso de las horas, su familia denunció su desaparición, en medio de sospechas de que hubiera podido ser víctima de un secuestro express, una modalidad de crimen que ha azotado últimamente la zona.

Hasta el momento, las autoridades han podido establecer que, ante la imposibilidad de quedarse en alguno de los sitios de la zona, Arenas siguió buscando y lo encontró seis kilómetros más allá de su ubicación inicial, más exactamente en el bar Black Royce, ubicado en el municipio Naucalpan, aledaño a la ciudad de México.

Según el representante legal del establecimiento, Marco Pinzón, el consultor llegó allí hacia las 3:00 a. m. y estuvo casi dos horas disfrutando.

Pero, continuó, alrededor de las 5:00 a. m. les dijo a los meseros que quería estar solo en una sala VIP, donde, en efecto, lo instalaron para que descansara.

Cerca de las 7:00 a. m., dijo también Pinzón, los empleados notaron que Arenas estaba inconsciente en el espacio VIP.

“El personal se percata de que no se mueve, entonces trata de reanimarlo. Uno de nuestros capitanes (de meseros) le da los primeros auxilios y no reacciona el señor”, declaró Pinzón en entrevista para el noticiero En Punto.

Hacia las 7:40 a. m. el personal del bar dio aviso a las autoridades de lo sucedido y los policías que atendieron el caso dicen que cuando llegaron Arenas Saiz ya no presentaba signos vitales.

En principio, se dijo que el empresario había sido hallado muerto fuera del Black Royce, pero ahora la versión es que habría muerto en la zona VIP del mismo.

Tanto la fiscalía de la capital como la del estado de México están conduciendo investigaciones para saber qué pasó realmente con Arenas y qué lo llevó a la muerte.

Algunos medios dicen que, de acuerdo con información filtrada de las fiscalías, es posible que haya muerto por broncoaspiración.

No obstante, los agentes aún no han descartado ninguna hipótesis y fueron detenidos seis empleados del bar, es decir, cinco meseros y su capitán, para aclarar cómo fueron los últimos momentos del fallecido.

Al respecto, los representantes del establecimiento sentaron su voz de protesta, y calificaron las detenciones como una “injusticia” y reiteraron que su personal hizo todo lo posible por salvarle la vida al malogrado cliente.

Así mismo, recordaron que él fue hallado sin señales de violencia y sostienen la tesis de que murió por causas naturales asociadas con el consumo del alcohol.

De acuerdo también con la prensa local, Arenas Saiz tenía una hoja de vida llena de éxitos en sectores como el turismo, la finca raíz, la importación, bares y restaurantes. Desde 2021, era director general de Feher Consulting, firma especializada en negocios y franquicias, de acuerdo con Linkedin.