Conmovedor: mujer de más de dos metros de estatura asegura haber encontrado el amor de su vida

Alrededor del mundo se han presentado varios episodios en donde algunas personas presentan condiciones distintas a las demás. Desde individuos que miden medio metro hasta algunos que sobrepasan los dos metros, sus características físicas los convierten en centro de atención por un determinado tiempo. Aun así, la condición de estas personas es vitalicia, por lo que deben aprender a vivir con ella a pesar de las críticas y señalamientos de la sociedad.

Sin embargo, los problemas físicos y psicológicos que demanda tener una gran estatura los ha podido superar Lizzy Jade Groombridge, una mujer de Reino Unido que mide 2,05 metros y la cual ha compartido por medio de sus redes sociales que ha encontrado el amor de su vida, sin importar que mida 18 centímetros menos que ella.

Groombridge, para Caters News, describió que encontrar un hombre que la quisiera como lo hace su actual pareja no fue fácil y que durante toda su vida ha sido muy complejo el tema de relaciones para ella, ya que se tiene por establecido que en una relación el hombre debe ser más alto que la mujer. No obstante, la joven de 29 y su pareja James, un electricista de 30 años, destruyeron esta regla social.

“James y yo a menudo recibimos miradas de otras personas en la calle y muchas preguntas sobre nuestra diferencia de altura”, expresó la mujer al medio, aseverando que cuando era una niña se sentía insegura sobre su estatura pero que con el paso del tiempo ha aumentado su confianza al publicar videos de su vida en redes sociales.

Una condición para toda la vida

“La gente ha hecho algún que otro comentario negativo sobre mi altura haciéndolo parecer dominado, lo que se ha convertido en una tendencia en las aplicaciones de las redes sociales para que los hombres fantaseen y sexualicen a las mujeres más altas”, explicó Groombridge a Caters News, en donde enfatizó sobre la ‘extraatención’ que reciben ella y su novio cuando los internautas opinan sobre la posible intimidad de la pareja.

Sin embargo, Groombridge dice no prestarle atención a los comentarios malintencionados y más bien dedica su tiempo para lograr un empoderamiento femenino a través de las plataformas digitales.

La joven relató que su adolescencia estuvo marcada por envidias por parte de algunos de sus compañeros, ya que era la alumna más alta de su colegio, además de no sentirse lo suficientemente ‘femenina’ por su estatura. “La sociedad asume que los hombres siempre deben ser más grandes que sus parejas femeninas, lo que afectó mi vida amorosa por un tiempo, ya que me avergonzaba mi estatura”, agregó.

Empoderar a la mujer, el propósito de Groombridge

La mujer ha enfocado toda su atención para dar a entender que una esposa, novia o amiga puede ser más alta que su contraparte masculina, sin que esto afecte la manera en que se ve la unión entre hombres y mujeres, ya que lo que importa es la emotividad y la manera en que se relacionan.

“Los hombres reaccionarían, sintiéndose bastante castrados e inseguros a veces. Incluso me hicieron sentir que no debería usar tacones”, precisó Groombridge, quien por un tiempo dejó de usar este calzado; sin embargo, ahora lo utiliza como una muestra de empoderamiento.

La británica ha compartido su experiencia a través de sus cuentas oficiales. No obstante, los comentarios pasados de tono y los que pretenden destruir la autoestima y la relación de Lizzy y James son ignorados por sus seguidores, porque no tienen la intención de construir, sino de destruir.

Aunque los casos de gigantismo son extraños en el mundo, suelen causar revuelo por la magnitud en que se dan, siendo el estadounidense Robert Wadlow el hombre más alto del mundo, llegando a medir 2 metros y 72 centímetros y pesar 222 kilos, quien falleció a la edad de 22 años, y Rumeysa Gelgi, considerada la mujer más alta del mundo con 2 metros y 17 centímetros, de nacionalidad turca.