INTERNACIONAL
Controversia en Japón por decisión de verter al mar agua contaminada de Fukushima
El primer ministro japonés, Yoshihide Suga, anunciaría la implementación de esta medida el próximo martes.
Hay polémica en Japón por la intención del Gobierno de verter al mar el agua contaminada con elementos radiactivos que se almacenan en Fukushima.
Según medios internacionales, el primer ministro japonés, Yoshihide Suga, anunciaría esta decisión el próximo martes 13 de abril.
El agua que sería liberada al mar ha sido filtrada en varias ocasiones con el fin de eliminar la mayoría de las sustancias radiactivas que pudiera tener, aunque la preocupación es que el tritio, un componente sumamente radiactivo, no puede ser eliminado con los procesos que hay disponibles en la actualidad.
El agua radiactiva está almacenada en varios tanques de la central nuclear de Fukushima, epicentro del tsunami de 2011, uno de los desastres naturales más fuertes que ha vivido Japón en los últimos años.
La decisión de verter al mar el agua radiactiva acabaría con siete años de debate sobre qué hacer con el agua, la cual se usó para enfriar los reactores nucleares que se fundieron luego del tsunami de 2011.
Según medios internacionales, el Gobierno japonés presentó un informe hace dos años diciendo que la liberación al mar del agua radiactiva es el proceso “más realista” para lidiar con esta problemática.
Es de mencionar que el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) también aboga por la opción de dilución en el mar el agua radiactiva, proceso que puede tardar varios años.
Pese a los informes presentados por el gobierno japonés, algunos científicos y expertos desconocen el impacto a largo plazo que pueda tener el agua radiactiva en la vida marina.
Los principales opositores a esta iniciativa son los pescadores japoneses, pues consideran que la radiactividad podría afectar a los animales, lo cual pondría en riesgo a toda la industria pesquera.
“La eliminación del agua tratada con ALPS es inevitable y los expertos han recomendado que la liberación al mar es el método más realista que se puede implementar”, dijo Hiroshi Kishi, dirigente de la Federación de Cooperativas Pesqueras del Japón.
Agregó que los pescadores de todo el país se oponen firmemente al plan, y dijo que si finalmente el gobierno toma la decisión de enviar el agua tratada al océano, se deben tomar medidas para “abordar el daño a la reputación de la industria”.
Alertas recientes
Semanas atrás, la Agencia Meteorológica de Japón (JMA) levantó una alerta de tsunami que había emitido, tras un fuerte sismo –de magnitud 7,2– registrado en las costas del noreste del país.
Según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), el sismo registrado tuvo una magnitud de 7,0.
El sismo y la alerta de tsunami se produjeron días después de que Japón conmemorara el décimo aniversario de un catastrófico terremoto de magnitud 9,0 ocurrido el 11 de marzo de 2011, que generó un devastador tsunami y un accidente nuclear en la central de Fukushima.
Esta catástrofe afectó al noreste de Japón, incluyendo Miyagi. Algunos residentes de las comunidades costeras dijeron que habían huido a zonas más altas después del aviso de este sábado por la noche.
“Debido a la experiencia de ese día (marzo de 2011), me moví rápidamente. Mi corazón late con fuerza”, dijo un hombre de la ciudad de Ishinomaki, a la cadena NHK mientras huía a un parque en una colina.
La Autoridad de Radiación Nuclear dijo que no había informes de anormalidad en las instalaciones nucleares de la zona.
Japón está situado en el Cinturón de Fuego del Pacífico, una de las zonas con mayor actividad sísmica del planeta, pero sus estándares de construcción son estrictos para que los edificios puedan soportar fuertes temblores.