"Mucha gente está de acuerdo conmigo. Nuestro país no está diseñado para cerrar", Trump | Foto: AP

Covid-19

Coronavirus: ¿Llevará Trump a Estados Unidos a una tragedia?

El magnate se ha convertido en el malo del paseo. Es uno de los pocos presidentes que se niega a decretar la cuarentena, a pesar de que los casos en ese país crecen en forma dramática. Es la economía...

24 de marzo de 2020

Mientras el mundo entero se guarda en sus casas, en Estados Unidos esa medida no parece estar cerca de tomarse. Los casos crecen de manera acelerada en la primera potencia del mundo y, al mismo tiempo, el presidente Donald Trump se convierte en el villano más temible de esta crisis mundial. El magnate se niega a decretar el confinamiento nacional en Estados Unidos, a pesar de que cada vez más voces se suman a ese clamor.

 

Este martes, el magnate anunció que quiere flexibilizar el aislamiento provocado por el coronavirus en Estados Unidos y reactivar la economía en tres semanas. Esta idea, después de que el mundo ha visto la factura que le pasa a un país el virus, parece salida de los cabellos. Por demoras similares, Italia y España se encuentran en una fase crítica con más de 500 muertos al día. 

"Mucha gente está de acuerdo conmigo. Nuestro país no está diseñado para cerrar", dijo Trump a la cadena Fox News. "Puedes destruir un país de esta manera, cerrándolo", aseguró el mandatario. "Me encantaría tener el país abierto y con muchas ganas de que sea para Pascua", dijo Trump refiriendose a esa semana que comienza el 12 de abril, dentro de 19 días.

Numerosas voces se han unido contra esa resistencia a tomar medidas. "Lo peor de la pandemia está por venir. Hay que escuchar a los expertos médicos. Es hora de un cierre nacional", escribió en su editorial de este martes el The New York Times. El prestigioso diario norteamericano asegura que con la cuarentena "habrá más tiempo para desarrollar tratamientos paliativos y más tiempo para que el Gobierno federal ordene los kits de prueba y los ventiladores necesarios en todo el país. Habrá más tiempo para recopilar datos sobre qué regiones y qué personas están en mayor riesgo... Estados Unidos ha superado el punto en que los esfuerzos agresivos y focalizados de rastreo y contención, como los perseguidos por Corea del Sur, tienen una posibilidad realista de éxito".

El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, ha salido aterrado a hablar en favor del confinamiento. No es para menos. La llamada capital del mundo es la ciudad más afectada hasta el momento. Al lunes, se contabilizaban 12.300 casos y 99 muertes. La Gran Manzana ya ha dicho que no cuenta con suficientes respiradores o personal médico para poder salvar la vida de todas las personas que resultarán infectadas. "Esta semana será mala, y la semana que viene será peor (...) Este es solo el comienzo de algo que empeorará en abril y mayo, y tenemos que prepararnos, tenemos que cambiar la manera en que vivimos, y necesitamos absolutamente ayuda de Washington", dijo De Blasio al canal CNN al reclamar un aislamiento general.

Las medidas de aislamiento han sido exitosas en China. El país ha celebrado estar saliendo de la crisis. Foto: AP

Gran parte de los estados y alcaldes del país han decretado medidas de distanciamiento social o impuesto una cuarentena que afecta a más de un tercio de la población y casi ha paralizado la economía. Médicos y expertos en salud aseguran que las medidas que restringen los movimientos de la población son esenciales para impedir que el contagioso virus se expanda en forma incontrolable. Pero Trump nada que quiere extenderla a todo el país. 

Washington también está en alerta máxima. Los médicos de ese país han salido a pedirle a la gente que se quede en casa. Foto: AP

El magnate llamó a un periodo de 15 días de observación que termina a inicios de la semana próxima. Este martes aseguró, además, que las medidas habían sido exageradas. "Perdemos miles y miles de personas al año por la gripe. No cerramos el país" por eso, dijo. "Perdemos mucho más que eso en accidentes de automóvil. No llamamos a los fabricantes de coches para decirles ‘dejen de fabricar‘ ", afirmó. 

Horas después, Trump pareció dar marcha atrás sobre su objetivo de abrir el país para la Pascua, en una rueda de prensa conjunta con Anthony Fauci, el reconocido experto en enfermedades infecciosas que asesora al Gobierno.  "Solo lo haremos si es positivo", declaró Trump, aclarando que la reapertura podría limitarse a una ‘parte‘ del país; por ejemplo, a algunas áreas rurales o a zonas de Texas y del oeste de Estados Unidos, donde la densidad de población es a menudo baja.

Las cifras, el problema detrás

No hay que ser un experto para saber que el miedo del presidente es el desplome de una de las economías más fuertes del mundo. El derrumbe de la actividad y las alertas de una recesión, o incluso una depresión, son un revés brutal para un frente que hasta la crisis gozaba de buena salud, con la tasa de desempleo más baja registrada jamás.

España llegó a un punto tan crítico que ya no sabe dónde enterrar a sus muertos. Están usando una pista de hielo como morgue. Foto: AP

Líderes legislativos dijeron el martes que se acercan a la aprobación de un paquete de estímulo económico de casi dos billones de dólares para comercios, hospitales y estadounidenses de a pie afectados por el aislamiento. Republicanos y demócratas negocian el texto desde hace días, pero la noticia de que un acuerdo está cerca disparó al alza las acciones en Wall Street, que cerró en 11,37 %, su mayor alza desde 1933.

Esta sería la mayor inyección de dinero en la economía de la historia, superando de lejos el rescate de 2008, cuando la crisis financiera mundial golpeó la economía estadounidense. 

"Tren bala" 

Más de 700 personas han muerto por el coronavirus en Estados Unidos, que registró cerca de 54.000 casos confirmados, según un mapa mundial actualizado por la Universidad Johns Hopkins. Estados Unidos es el país con más casos a nivel mundial, por detrás de China e Italia.

En contraste con el optimismo de Trump, el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, advirtió el martes que en su estado los nuevos casos se están duplicando cada tres días y alcanzando "cifras astronómicas". El estado ya tiene más de 25.000 casos, incluidos casi 15.000 en la ciudad de Nueva York, epicentro de la pandemia en el país.

Los médicos en Europa no dan ya abasto con tantos enfermos. China tuvo que enviar millones de trajes, mascarillas y guantes. Foto: AP. 

Cuomo estimó que Nueva York llegará al ápice de la crisis en 14 a 21 días, por lo cual es imperativo conseguir más camas de hospital, máscaras, respiradores y personal médico lo antes posible. El estado solo tiene actualmente unos 10.000 respiradores y precisa 30.000 más, dijo un desesperado Cuomo, pidiendo ayuda al Gobierno federal. Nueva York cuenta con 53.000 camas de hospital, pero precisa 140.000.

Muchos médicos en Europa han descrito lo que viven como estar en la mitad de una guerra. No hay recursos suficientes para salvarlos a todos. El sector salud de Estados Unidos advierte que le pasará lo mismo.  Foto: AP

¿Qué es primero, economía o salud? 

Con su campaña electoral en suspenso, Trump busca una salida a la calamidad del coronavirus que le permita ser reelegido en noviembre. Uno de sus mayores orgullos, antes del brote del virus, era la fortaleza de la economía.

Diez formas de ayudar a quienes más lo necesitan en la crisis del coronavirus

"No podemos perder a Boeing. No podemos perder a algunas de estas empresas", dijo Trump en el programa de Fox, desde la Casa Blanca. "Si perdemos estas compañías, estamos hablando de cientos de miles de empleos, millones de empleos". Sin embargo, su insistencia de una rápida reactivación de la economía conlleva el riesgo de que algunos crean que prioriza la riqueza sobre la supervivencia de los enfermos, sobre todo de aquellos más ancianos, los más vulnerables.

El vicegobernador de Texas, Dan Patrick, concuerda con Trump. Según él, que cumplirá 70 años en una semana, los adultos de esa edad o más podrán cuidarse por sí mismos. "No sacrifiquen el país", pidió. "Mi madre no es sacrificable", sostuvo Cuomo, a quien sus conferencias de prensa diarias lo han convertido en un líder nacional en tiempos de crisis. 

California es uno de los estados que está en mayor alerta por el virus. Barcos hospitales han llegado para preparar al lugar si el sistema sanitario colapsa. Foto: AP

A pesar de las críticas sobre su gestión de la pandemia, Trump sigue teniendo cifras sólidas en las encuestas. En la última del instituto de sondeos Monmouth, el 50 % de las personas consultadas aprobó su manejo de la crisis, contra el 45 % que no la aprueba.

Pero como dice The New York Times, Estados Unidos está en un punto crítico. Si el país se convierte en una nueva Italia, los esfuerzos que hizo el magnate por resguardar sus cifras habrán sido en vano, y el remedio le habrá salido, ahora sí, mucho peor que la enfermedad. 

*Con información de la AFP