MUNDO
Coronavirus en el mundo: Estados Unidos superó a Italia en muertes
El país norteamericano alcanzó los 19.700 decesos por la enfermedad superando a los europeos, que habían reportado la mayor cantidad de fallecimientos durante el último mes.
La cifra de muertes por coronavirus en Estados Unidos eclipsó el sábado a la de Italia como la más alta del mundo, con más de 19.700 decesos, según el recuento de la Universidad Johns Hopkins. Mientras tanto, Chicago y otras ciudades del centro-norte del país se preparan para un posible repunte de fallecimientos y se movilizan para controlar los focos de contagio antes de que estallen.
Hacia el mediodía EE. UU. sobrepasó a Italia con más de 18.850 muertes, y poco después Italia reportó un nuevo total de casi 19.500. Posteriormente, EE. UU. reportó más 19.700 decesos.
En los últimos días la cifra diaria de muertes ha disminuido gradualmente en Italia, mientras aumenta con rapidez en Estados Unidos.
Las cifras de Johns Hopkins se basan en datos proporcionados por las autoridades de salud de todo el mundo. Se cree que los datos reales de muertes y contagios son mucho mayores debido a las deficiencias de las pruebas clínicas, las diferentes maneras de contar y, en algunos casos, los encubrimientos de algunos gobiernos.
Mientras la zona metropolitana de Nueva York se ve abrumada por la cantidad de casos, crece el temor de que el contagio se extienda al centro del país. En Indiana murieron veinticuatro residentes de un hogar de ancianos atacado por covid-19. El condado de Cook, donde se encuentra Chicago, instaló una morgue temporal con capacidad para más de 2.000 cuerpos. Adicionalmente, la alcaldesa de Chicago, Lori Lightfoot, recorre las calles a pie para disipar aglomeraciones de gente. "¡Sepárense!", les dice.
En Europa, diversos países utilizaron retenes, drones, helicópteros, policía montada y la amenaza de multas para impedir que la gente viajara durante el fin de semana de Pascua. Adicionalmente, al reducirse el contagio en Italia, España y otros países, los gobiernos dieron pasos tentativos hacia el levantamiento parcial de las restricciones sobre la vida pública, vigentes desde hace semanas.
El clima agradable en Europa puso a prueba la disciplina de la gente.
"No hagan tonterías", dijo Domenico Arcuri, comisionado especial de Italia para la emergencia del virus. "No salgan, mantengan la misma conducta responsable que han tenido hasta hoy; usen su buen juicio y su sentido la responsabilidad", agregó.
El centro de gravedad de la pandemia se desplazó hace tiempo de China a Europa y a Estados Unidos, que tiene ahora de lejos el mayor número de casos confirmados: más de medio millón.
Casi la mitad de las muertes en Estados Unidos se concentran en la zona metropolitana de Nueva York. Sin embargo, han disminuido las hospitalizaciones, indicio de que medidas como el distanciamiento social estan "aplanando la curva" de los contagios. No obstante, las autoridades advierten que la crisis dista de haber finalizado y la ciudad confirmó que su sistema escolar —con 1,1 millones de alumnos— permanecerá cerrado por el resto del año lectivo.
Algunos países están dando los primeros pasos tentativos para salir de la cuarentena, aunque las autoridades de salud pública advierten que podría haber una segunda ola más potente que la primera si la gente se descuida.
Austria permitirá la reapertura de pequeñas tiendas el martes. España, con más de 16.300 muertes, permitirá a partir del lunes el regreso al trabajo en fábricas y sitios de construcción, después de una parálisis de dos semanas.
Gran Bretaña reportó 917 muertes, algo menos que las 980 del día anterior. La cifra total de muertes es de casi 10.000, pero al mismo tiempo los datos indican que la curva de hospitalizaciones empieza a aplanarse.
El primer ministro Boris Johnson, el primer jefe de gobierno del mundo que contrajo covid-19, seguía convaleciente en un hospital de Londres y se le permitía dar breves caminatas.
En todo el mundo las infecciones confirmadas superaban 1,7 millones, con más de 100.000 muertes, según la Universidad Johns Hopkins.