Crisis de salud en la Corona inglesa: a otro miembro de la familia real también le diagnosticaron cáncer

La princesa de Gales, Kate Middleton, anunció este viernes, 22 de marzo, que fue diagnosticada con cáncer y que ya comenzó el respectivo tratamiento, el cual incluye algunas sesiones de quimioterapia. Esta noticia la confirmó tras dos meses de conjeturas sobre su salud.

A través de un sentido video, grabado en Windsor el pasado miércoles, la integrante de la familia real aseguró que la noticia la dejó en shock y que todavía la están tratando de procesar, puesto que puntualizó no es un tema fácil de manejar.

“Las pruebas, después de la operación, confirmaron que había cáncer. Por lo tanto, mi equipo médico me recomendó someterme a un tratamiento de quimioterapia preventiva y ahora estoy en las primeras etapas de ese tratamiento”, expresó la princesa.

El informe sobre la enfermedad de Kate, del que no se dieron mayores detalles, se produce luego de que su suegro, el rey Carlos III, también confirmara que tiene cáncer. En un plazo de dos meses, la familia real británica se ha encontrado con que dos de sus miembros de mayor peso afectados por esta enfermedad.

A ello se une que Sarah Ferguson, exesposa del príncipe Andrés, hermano del monarca, anunció en enero que le diagnosticaron el tipo más grave de cáncer de piel, tan solo seis meses después de ser tratada de un cáncer de mama.

El pasado diciembre la madre de las princesas Beatriz y Eugenia de York se sometió a una mastectomía y a una reconstrucción mamaria y en dicha intervención se le extrajeron varios lunares para ser analizados. Uno de ellos, como confirmó un portavoz de la duquesa de York, se trata de un melanoma maligno.

Actualmente, de acuerdo con el Daily Mail, a la exesposa del príncipe Andrés le han comunicado que el cáncer de piel no se ha extendido, tras someterse a un procedimiento quirúrgico. Asimismo, el rotativo indicó que los doctores han asegurado que esa área está libre de células cancerosas.

Príncipe William rompió el silencio

Sobrepasado, triste e impotente, esas son tres de las palabras que podrían definir el estado anímico actual del heredero al trono, el cual se sinceró recientemente en un acto oficial con varios periodistas.

“Como ha contado una reportera de The Sun, el hijo del rey Carlos III ‘está enfadado, frustrado y, profundamente, decepcionado por lo que ha ocurrido en las últimas semanas’. Y, buena prueba de ello es que en un momento dado no dudó en preguntarles a los presentes: ‘¿cuándo terminará todo esto?’”, precisó Europa Press.

Luego, añadió: “El principal motivo de preocupación de Guillermo es la presión mediática que rodea a su mujer desde que fue sometida a una intervención abdominal el pasado 16 de enero. Y es incapaz de ocultar, incluso ante la prensa, su impotencia al ver la cantidad de rumores y especulaciones que se han publicado sobre Kate en los últimos dos meses”.

Tras confirmar la dura noticia sobre la salud de la princesa de Gales, la pareja, según la prensa europea, decidió desplazarse este fin de semana a su residencia campestre, ubicada en la localidad de Sandringham, para pasar unos días de descanso con sus tres hijos –George, Charlotte y Louis–, coincidiendo con el inicio de la Semana Santa, la cual irá hasta el próximo 31 de marzo.