Perú
¡Democracia! Candidato único en elecciones locales en Perú fue derrotado por el voto en blanco y los tarjetones nulos
El aspirante al cargo público en la provincia de Arequipa responsabilizó de su derrota a la existencia de intereses envidiosos por parte de otras colectividades políticas. El eslogan de su campaña también genera curiosidad, en tanto es igual al usado años atrás por un expresidente de Colombia.
En medio de las elecciones regionales que se efectuaron el pasado fin de semana en todo el territorio peruano, medios de comunicación en ese país, han destacado el curioso caso ocurrido en las votaciones para la elección del alcalde del distrito de Lari, en la provincia de Caylloma, Arequipa, donde la famosa y errónea frase de “el voto en blanco no sirve para nada”, quedó desvirtuada.
Lo allí sucedido, se traduce en que esta opción resultó ser la vencedora en los comicios locales, al superar en sufragios al único candidato que se había presentado para la elección, en una certera muestra de que dicho instrumento democrático sí sirve, pues, el desacuerdo de la comunidad frente al aspirante logró hacerse evidente, obligando a que las votaciones en ese municipio sean declaradas nulas, y deban volver a convocarse ahora con otros postulantes, según lo dicta el artículo 364 de la Ley Orgánica de Elecciones de Perú.
La situación quedó evidenciada en días pasados luego de que la ONPE, Oficina Nacional de Procesos Electorales del Perú, confirmara el fin de los escrutinios, revelando que el candidato único en esa localidad, identificado como Rómulo Teodoro Suyco Panta, aspirante por el movimiento Somos Perú, fue superado el pasado 2 de octubre por la opción del voto en blanco, e incluso también por los denominados votos nulos.
En ese sentido, el reporte de las autoridades electorales de Perú, revelaron que del total de 716 votos que representó la jornada en el distrito de Lari, solamente 109 respaldaron la aspiración de Suyco, mientras que los votos nulos registrados llegaron a 129, y los votos en blanco alcanzaron la arrasadora mayoría con un total de 478 sufragios.
Tras lo ocurrido, las autoridades locales tiene un plazo de 60 días para que sean convocados los ciudadanos nuevamente a las urnas para la elección de su nuevo dirigente.
¿Qué fue lo que pasó?
Tras la derrota, medios locales de Perú se acercaron al candidato único, derrotado por los votos en blanco, quien lamentó lo sucedido, pero se manifestó respetuoso de la decisión de la comunidad, reiterando a su vez su agradecimiento con el grupo de ciudadanos que sí confiaron en su aspiración, y depositaron la confianza en un voto positivo para él.
Frente a lo ocurrido, Romulo Suyco Panta, afirmó que su derrota podría haberse debido a la existencia de planes por parte de sectores políticos tradicionales en la región, que, al no comulgar con su propuesta, decidieron emprender, mancomunadamente, una campaña en su contra, llamando a la ciudadanía a votar en blanco, situación que finalmente se reflejó en las urnas.
En declaraciones recogidas por el medio local La República, y expresadas a través de sus redes sociales, el candidato derrotado manifestó su frustración, advirtiendo que su derrota se derivó de aspectos como “traición, egoísmo y envidia de políticos tradicionales”, advirtiendo que, contrario a lo reflejado en las urnas, él y su equipo de trabajo se sienten “ganadores”.
En ese mismo sentido, el candidato derrotado por el voto en blanco y los votos nulos también advirtió que no contó con suerte, debido a que también existían particularidades en la tarjeta electoral, que habían impulsado que muchas personas erraran su voto debido a la ubicación en el tarjetón, advirtiendo que por esa razón, quizá, muchas de las personas que habían deseado respaldado su candidatura, habían dejado su tarjetón como ‘no marcado’.
Otra de las particularidades que llama la atención sobre la candidatura de Suyco, era uno de los eslogan que usó durante su campaña, este, casualmente, se asemeja con el empleado por el expresidente de Colombia, Álvaro Uribe, en su llegada a la Presidencia en 2002: “Mano firme, corazón grande”.