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Mujeres protestan contra procedimientos quirúrgicos irregulares en pacientes inmigrantes
Mujeres protestan contra procedimientos quirúrgicos irregulares en pacientes inmigrantes en Georgia, Estados Unidos. | Foto: AP

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Denuncias por histerectomías irregulares a mujeres migrantes en cárcel de EE. UU.

En respuesta al informe presentando por la organización Project South, el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas anunció que no llevaría a más detenidas al hospital donde denuncian que realizaron los procesos irregulares.

23 de septiembre de 2020

Las autoridades de inmigración estadounidenses no volverán a enviar a ninguna inmigrante del Centro de Detención Irwin, en Georgia, a atención médica con un ginecólogo que es señalado de llevar a cabo histerectomías no autorizadas, según anunció a la agencia AP el portavoz del Servicio de Control e Inmigración de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés).

El anuncio se da una semana después de que la organización de derechos humanos Project South presentó una denuncia a la Oficina del Inspector General del Departamento de Seguridad Nacional. El informe de 28 páginas recopila testimonios de detenidas y de una enfermera que trabajó en el centro de detención Irwin, en los que señalan que se han realizado histerectomías a inmigrantes sin su aprobación o sin su completa comprensión del procedimiento.

La histerectomía consiste en la extirpación de parte o la totalidad de los órganos reproductores femeninos, sea el útero, las trompas de Falopio o los ovarios, y puede tener como consecuencia la esterilidad de las pacientes.

La denuncia también fue firmada por otras organizaciones defensoras de derechos de inmigrantes como Georgia Detention Watch, Georgia Latino Alliance for Human Rights y South Georgia Immigrant Support Network.

La enfermera Dawn Wooten, protagonista del informe, señala que en el centro de detención llamaban al ginecólogo Mahendra Amin el “coleccionista de úteros” por la cantidad de histerectomías que había realizado a inmigrantes.

Al respecto, Wooten afirmó que algunas no entendían del todo a qué procedimiento serían sometidas ni sus implicaciones, debido a que muchas no hablaban inglés. Señala que algunas recurrían al traductor de Google en dichas citas médicas.

Incluso, un artículo de CNN reseña que en el informe también denunció que el médico Amin extirpó un ovario sano de una detenida por equivocación y luego la sometieron a otro procedimiento para retirarle el enfermo, con lo cual la dejaron estéril. Según Wooten, la detenida dijo no haber estado completamente anestesiada, por lo cual escuchó cuando el médico afirmó que había extirpado el ovario incorrecto.

Con el paso de los días se han conocido otros testimonios de mujeres. Un artículo de AP narra la historia de la cubana Mileidy Cardente Fernández, también del centro de detención Irwin. La mujer, de 39 años, afirma que antes de la operación solo le informaron que sería tratada por quistes en los ovarios y que un mes después aún no está segura de cuál fue el procedimiento que le hicieron. También señala que pidió acceso a su historial médico y que no hay nada sobre la cirugía.

Otro de los casos a los que tuvo acceso AP fue el de la camerunés Pauline Binam, de 30 años. Ella cuenta que la llevaron a ver al doctor Amin por un periodo menstrual irregular y que le dijo debía hacerse una intervención quirúrgica para retirar tejido del útero. Asegura que después de despertarse de la operación le informaron que también habían retirado una de las trompas de Falopio por una inflamación. Binam denuncia que nunca autorizó al médico para llevar a cabo este procedimiento.

A estos testimonios se suman una lista de otras denuncias de detenidas y sospechas de organizaciones defensoras de inmigrantes en Georgia que afirman haber escuchado sobre estos procedimientos irregulares. Por su parte, el médico Mahendra Amin niega las acusaciones y el hospital en el que trabaja afirma que solo ha hecho un par de histerectomías en los últimos años.

Después de la publicación del informe, círculos políticos en Estados Unidos reaccionaron alarmados. El representante Bennie Thompson, de Mississipi, afirmó que “las acusaciones presentadas en esta denuncia de una informante apuntan a un patrón alarmante de condiciones inseguras y una falta de supervisión en las instalaciones de ICE de gestión privada”. También afirmó que eran denuncias “increíblemente preocupantes”. Otros congresistas demócratas han pedido que la situación sea investigada.

Por su parte, las autoridades mexicanas también reaccionaron al informe, pues algunas de las detenidas denunciantes provienen de este país. El pasado martes el canciller de México, Marcelo Ebrand, informó que han contactado a dichas mujeres y que adelantan una investigación.