MUNDO
Dura crítica del papa Francisco a quienes se van de vacaciones para evitar las cuarentenas
El sumo pontífice sostuvo que este tipo de personas “son buenas, pero no pensaban en los que se quedaron en casa”.
En medio de la segunda ola de contagio de coronavirus que se vive en varios países del mundo, donde los gobernantes han tenido que tomar drásticas medidas como volver al confinamiento o restricciones como los toques de queda y cierres de escuelas y comercio, el papa Francisco aprovechó para hacer una fuerte crítica a quienes quieren evitar esas medidas.
El sumo pontífice rechazó que algunas personas se han ido de vacaciones sin respetar las restricciones impuestas por los gobiernos para contener la pandemia del coronavirus y señaló que deben ser más conscientes del sufrimiento de los demás.
El domingo, al final de la oración del Ángelus, el papa Francisco señaló que estas personas que deciden irse de vacaciones “son buenas, pero no pensaban en los que se quedaban en casa, en los problemas económicos de muchas personas que han sido duramente golpeadas por el encierro, en los enfermos”.
En ese sentido, señaló que estas personas deberían estar buscando el bien de todos y no solo el propio. Así mismo, el pontífice argentino indicó que las personas deben intentar preocuparse más por los demás y no solo atender sus propios intereses. “(Ellos pensaban) solo en irse de vacaciones y divertirse. Esto me dolió mucho”, aseguró.
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El papa dijo que recientemente había leído una información periodística que explicaba que había gente que estaba incumpliendo las medidas impuestas por el gobierno de su país para disfrutar de sus vacaciones en otros lugares.
“No han pensado en las personas que se han quedado en casa, en los problemas económicos que está sufriendo la gente como consecuencia de la pandemia, en los enfermos... Solo han pensado en sus vacaciones y en su propio placer”, consideró.
2021 comenzó con nuevas restricciones
El primer fin de semana de 2021 comenzó el sábado con nuevas medidas de restricción en Francia, España, Tailandia y Grecia para intentar frenar la pandemia de coronavirus, cuyas sucesivas oleadas ya han provocado más de 84 millones de casos y más de 1,82 millones de muertos en todo el mundo.
En Francia, el nuevo año se inició con más restricciones ante unas preocupantes cifras epidemiológicas. Para evitar un nuevo brote de la epidemia, el toque de queda se reforzó a partir del sábado en 15 departamentos franceses.
Alrededor de seis millones de personas no podrán salir de sus hogares después de las 18H00 hora local, salvo excepciones.
En el resto del país, el toque de queda empezará como hasta ahora a las 20H00.
“Agregamos dos horas de toque de queda y seguramente tendremos un impacto en la dirección correcta en 15 días (o tres semanas), pero probablemente muy modesto”, estimó el sábado Frédéric Adnet, jefe de urgencias del hospital Avicennes de Bobigny (región de París).
Pero con casi 20.000 casos diarios registrados en los dos últimos días, muy lejos del objetivo del Gobierno de bajar a 5.000 infecciones diarias, es posible que el endurecimiento de las restricciones no termine ahí.
Más confinamientos
En el resto de Europa, la región más golpeada del mundo por la pandemia con más de 579.000 fallecidos y 26,8 millones de contagios, la vuelta a la normalidad parece estar todavía lejos.
Dinamarca registró 86 casos de la nueva variante del virus detectada por primera vez en el Reino Unido, lo que lo convierte en el país que más casos ha reportado hasta el momento de esta cepa, que se estima que es más contagiosa.
Su propagación “puede conducir a una curva epidémica más pronunciada (...) lo que significará que tendremos que intensificar nuestras medidas de prevención”, advirtió Tyra Grove Krause, responsable de la agencia danesa de control de enfermedades infecciosas.
Grecia, con 4.881 muertes por coronavirus, anunció el sábado que retomará hasta el 10 de enero su estricto confinamiento adoptado hace dos meses y aliviado por las fiestas de fin de año.
En Tailandia, que parecía haber pasado lo peor de la pandemia, la capital Bangkok quedó el sábado bajo un confinamiento parcial con el cierre de bares, discotecas y lugares donde se vende alcohol para frenar un alza de casos; 7.300 en la jornada.
Líbano registra una nueva oleada de contagios y los expertos locales ya hablan de una situación “catastrófica”.
En Latinoamérica, Venezuela retomará el lunes su plan de confinamiento parcial, desde el 4 hasta el 10 de enero, tras haber relajado los controles en diciembre.
Hasta la fecha, Venezuela acumula oficialmente 113.558 contagios y 1.028 fallecidos, cifras oficiales que son cuestionadas por la oposición y organizaciones como Human Rights Watch.
Y en Bolivia, las cifras de contagios en La Paz y Santa Cruz (este) están en constante ascenso a tal punto que las autoridades de ambos departamentos decretaron cuarentenas parciales durante el feriado de año nuevo.
En la ciudad de Santa Cruz, las unidades de terapia intensiva están casi al límite de su ocupación ante el rebrote de la pandemia que podría alcanzar su pico en las próximas semanas. El país cerró 2020 con más de 160.000 casos y 9.000 fallecidos.
América Latina y el Caribe han registrado unos 509.300 muertos y más de 15,6 millones de casos desde el inicio de la pandemia.
*Con información de la AFP.