Mundo
Durante la pandemia, un número importante de estudiantes ha desaparecido de las aulas virtuales
Las escuelas en Estados Unidos cerraron a mediados de marzo por la pandemia de coronavirus. Sin embargo, durante la transición al aprendizaje remoto, las escuelas perdieron el rastro de los estudiantes.
La pandemia de covid-19 sacudió al mundo. Las personas alrededor del globo tuvieron que adaptarse a una realidad en la que la virtualidad, las videollamadas y el distanciamiento sociales eran los grandes protagonistas. Quizás, uno de los sectores más afectados ha sido el de la educación, pues requiere un esfuerzo mayor para los docentes y estudiantes inmiscuirse en el aprendizaje, sin distraerse, detrás de una pantalla. Sin embargo, en Estados Unidos la situación se torna preocupante. Desde que las escuelas del distrito de todo el país cerraron en marzo del año pasado por la pandemia, varios estudiantes dejaron de asistir a las aulas virtuales y de muchos de ellos no se tiene rastro.
Este tema no es nuevo, antes de la pandemia los distritos tenían que rastrear a los niños que dejaban de asistir frecuentemente a la escuela o que simplemente no se presentaban para iniciar un nuevo año escolar. Lo que ocurría con mayor frecuencia era que el estudiante se mudaba y se registraba en otra escuela de otro distrito.
No obstante, en esta nueva virtualidad en la que se sumergió el mundo, los estudiantes han desaparecido de las clases en un número jamás visto, lo que obligó a los distritos a reconsiderar su enfoque hacia aquellos que dejaron de asistir.
Unos por su parte han decidido realizar grandes esfuerzos para localizar a los estudiantes y asegurarse de que estén seguros, además de que cuenten con los dispositivos necesarios para conectarse a las clases y aprender; pues reconocen el daño que les puede causar la pérdida del año escolar. Otros distritos, principalmente en Detroit y Miami, optaron por mantener a los estudiantes en sus listas aunque no se presentaran durante un mes. En Dakota del Norte optaron por rastrear la asistencia a diario y utilizaron enlaces familiares para encontrar a los estudiantes desaparecidos.
Lo más leído
Esta situación ha representado una caída importante en la matrícula de las escuelas públicas y un aumento significativo en el número de estudiantes que ingresaron a escuelas privadas. Por su parte, muchos padres decidieron dejar en sus casas a los niños que iban a comenzar preescolar y jardín. No obstante, este tema ha afectado a estudiantes de todos los grados.
En Carolina del Norte, un funcionario de educación estatal le dijo a los legisladores de ese estado que en diciembre no se habían contabilizado más de 10.000 estudiantes, situación que se ha repetido en la mayoría de estados de EE.UU..
A esta problemática se le suma el desorden que existe en los registros, pues un niño puede ser catalogado como desaparecido, aunque se haya mudado y registrado en otro distrito, por lo que en muchas ocasiones las cifras pueden estar infladas.
La labor de los maestros se ha intensificado, tanto por tratar de dictar una clase sin interrupciones mediante dispositivos electrónicos, como por tratar de identificar las actitudes de alerta en los alumnos, ya sean casos de abuso o descuido.
Los niños que provienen de hogares de bajos ingresos, estudiantes sin hogar y estudiantes migrantes, son los que más preocupan a las escuelas, pues sus familias se pudieron haber visto muy afectadas por la recesión económica que representó la pandemia.
Muchos de ellos no cuentan con la tecnología necesaria para conectarse a sus clases. Es por eso que varios distritos escolares de Detroit se esforzaron para conseguir un computador con internet integrado para cada uno de los 50.000 estudiantes. Lograron recaudar más de 23 millones de dólares en tres semanas junto a empresas locales para financiar el esfuerzo. Sin embargo, esto tampoco funcionó, pues muchos estudiantes nunca se presentaron para recoger el dispositivo. Lo que preocupó aún más a las escuelas.
No todos los casos son graves. Algunas familias presentan problemas fáciles de solucionar por lo que la escuela ayuda a las familias para que el estudiante regrese pronto a la escuela. Otros casos son un poco más complicados, pues sus hogares se quedaron sin suministro eléctrico y los estudiantes decidieron irse. La pandemia evidenció los grandes problemas que existen en el registro de estudiantes en las escuelas de Estados Unidos. Las ausencias podrían traerle consecuencias a tal punto de dejar la escuela por completo, lo que podría afectar su futuro profesional.
Con información de The Washington Post.