Duro llamado al presidente de Perú por interferir, presuntamente, en proceso en su contra

El presidente del Congreso de Perú, José Williams, conversó este viernes con el presidente del país, Pedro Castillo, y aprovechó para pedirle que evitar injerencias de las autoridades en las investigaciones que la Fiscalía ha abierto en su contra.

“Hablamos de la independencia de poderes. Le dijimos que es muy importante que los poderes sean independientes, que no haya injerencia”, indicó tras reunirse con el mandatario en la sede del Legislativo.

Además de este tema, sobre la mesa han estado otros asuntos como “el respeto a la institucionalidad”, la importancia de la Policía y las Fuerzas Armadas y la necesidad de que la clase política “cumpla sus funciones”.

“Cuanto menos se pongan las manos sorbe las fuerzas del orden, va a ser mejor para la nación”, señaló el presidente del Parlamento peruano, según recoge la emisora RPP.

Asimismo, Williams dijo que analizó con Castillo los proyectos legislativos aprobados en la Cámara y que, dice, el Ejecutivo tiene bloqueados.

Por otro lado, dialogaron sobre la reciente destitución de Geiner Alvarado como ministro de Transportes y Comunicaciones, un acontecimiento que el presidente del Congreso considera ha sido causado por las designaciones del propio mandatario.

“Hablamos de las fricciones que hay y que buena parte de ellos (destituciones de ministros) se dan por los nombramientos que hacen en los niveles más altos”, indicó Williams.

La reunión entre Castillo y el Presidente del Congreso, es solo un acto protocolar. No puede haber una agenda en común con un presidente a quien la Fiscalía sindica como el líder de una banda criminal y que carga con 6 investigaciones fiscales por corrupción”, escribió en su cuenta en Twitter la congresista Patricia Chirinos.

Aprobada moción de censura

El Congreso de Perú aprobó en la víspera (jueves) una moción de censura contra el ministro de Transportes y Comunicaciones, Geiner Alvarado, por los presuntos actos de corrupción que se le imputan durante su desempeño como encargado de la cartera de Vivienda.

La decisión fue adoptada por 94 votos a favor, 14 en contra y ocho abstenciones, con la que se destituye al funcionario por “incapacidad moral y falta de idoneidad para el cargo”.

Alvarado está siendo investigado por la Fiscalía como presunto integrante de una organización criminal que habría ordenado las licitaciones de diversas obras públicas en los departamentos de Lima y Cajamarca.

Según la tesis defendida por el fiscal Hans Aguirre, esta presunta red delictiva tendría como líder al presidente de Perú, Pedro Castillo.

Con la salida de Alvarado, el gobierno del presidente Castillo suma una nueva destitución. De hecho, en los próximos días se designará al que será el séptimo encargado del Ministerio de Transportes y Comunicaciones en los apenas trece meses de mandato.

Este hecho se produce dos días después de que el jefe de Estado posesionó al constitucionalista César Landa como nuevo ministro de Relaciones Exteriores.

Landa, quien ejerció el cargo entre febrero y agosto, regresa al Ministerio luego de la salida de Miguel Rodríguez, quien asumió el cargo a inicios de agosto.

Castillo también juramentó a la ingeniera agrónoma Jenny Ocampo como la nueva ministra de Desarrollo Agrario y Riego.

La cancillería peruana parece un campo minado, con alta rotación de sus titulares. Rodríguez fue el cuarto ministro de Relaciones Exteriores en 14 meses de gobierno de Castillo. El primer canciller fue el exguerrillero Héctor Béjar, que duró 19 días en el puesto.

Las razones que motivaron la dimisión de Rodríguez no se conocen, pero en los últimos días hubo, según la prensa varios desacuerdos entre el presidente y el canciller en temas ambientales, como el Acuerdo de Escazú, y sobre la Convención del Mar, de la cual Perú no es parte.

El caso más notorio fue un tuit de Castillo el jueves pasado saludando el primer aniversario del restablecimiento de relaciones diplomáticas “con la República Árabe Saharaui”: una importante decisión de política exterior del presidente izquierdista.

“A un año de establecer relaciones diplomáticas con la República Árabe Saharaui Democrática, nos reafirmamos en persistir la defensa de su autodeterminación soberana”, escribió en su momento.

Sin embargo, una de las primeras decisiones del canciller Rodríguez había consistido en revertir esa decisión, lo que Castillo aceptó en su momento.

Con información de Europa Press y AFP