MUNDO
EE. UU. alerta que Al Qaeda “está ganando fuerza”
Las autoridades de Afganistán han acusado en varias ocasiones a los talibanes de mantener sus lazos con Al Qaeda.
El Gobierno de Estados Unidos ha alertado que la organización terrorista Al Qaeda “está ganando fuerza” en Afganistán mientras “sigue operando bajo la protección de los talibanes”, a pesar de que el histórico acuerdo de paz de febrero de 2020 entre Washington y los insurgentes obligaba al grupo a cortar sus lazos con Al Qaeda.
El Departamento del Tesoro ha destacado en un informe que Al Qaeda “sigue operando con los talibanes bajo su protección” y ha indicado que la organización terrorista “se aprovecha de su relación con los talibanes a través de una red de mentores y asesores empotrados con los talibanes que dan asesoría, guía y apoyo financiero”.
Asimismo, ha manifestado que altos cargos de la Red Haqqani, aliada de los talibanes e integrada en el grupo, “han discutido crear una nueva unidad conjunta de combatientes armados en cooperación y financiada con Al Qaeda”.
Por otra parte, el Departamento del Tesoro ha resaltado que “elementos de Al Qaeda, incluida la filial de Al Qaeda en el Subcontinente Indio (AQSI) y grupos terroristas que atacan Pakistán, como Tehrik-i-Talibán Pakistán (TTP), siguen usando la frontera entre Afganistán y Pakistán como una zona segura”.
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Las autoridades de Afganistán han acusado en varias ocasiones a los talibanes de mantener sus lazos con Al Qaeda pese al acuerdo de paz con Estados Unidos, lo que ha sido rechazado por el grupo insurgente, que ha defendido que la organización terrorista “no tiene presencia” en el país.
Sin embargo, Kabul ha anunciado la muerte de varios miembros del grupo en los últimos meses, incluido el jefe de medios de la organización terrorista Al Qaeda y, según varios expertos en terrorismo, segundo al mando del grupo, el egipcio Abú Muhsin al Masri.
Por su parte, el coordinador del Equipo de Seguimiento de los talibanes, Al Qaeda y Estado Islámico de Naciones Unidas, Edmund Fitton-Brown, afirmó en octubre que esta organización terrorista continúa estando “fuertemente integrada” con los talibanes.
“Los talibanes estuvieron hablando de manera periódica y a un muy alto nivel con Al Qaeda y le reafirmaron que seguirían manteniendo sus vínculos históricos”, dijo Fitton-Brown, quien agregó que sus relaciones “no han cambiado de manera sustancial” desde la firma del acuerdo de paz.
Al Qaeda ha perdido fuerza y capacidad para atentar en Occidente en la última década, pero se cree que su líder, el egipcio Ayman al Zawahiri, continúa escondido en territorio afgano junto con otros dirigentes del grupo terrorista, entre los que se encontraba Al Masri.
Visita de los talibanes a Irán
Por otro lado, el ‘número dos’ de los talibanes, el mulá Abdulghani Baradar, se encuentra en Irán al frente de una delegación del grupo para abordar la situación en Afganistán, según ha confirmado el portavoz del grupo, Mohamad Naim.
Naim ha resaltado a través de su cuenta en la red social Twitter que la delegación ha llegado a Irán tras una “invitación oficial” por parte de Teherán y ha agregado que ambas partes “abordarán las relaciones entre los dos países, la situación de los refugiados y la situación política y de seguridad en Afganistán y la región”.
Afganistán ha experimentado un repunte de la violencia durante los últimos meses a pesar del acuerdo entre los talibanes y Estados Unidos en febrero de 2020 y de las conversaciones de paz entre el grupo y el Gobierno afgano, cuyas delegaciones pactaron en diciembre la ‘hoja de ruta’ para el proceso.
En este contexto, al menos una persona ha muerto a causa de la explosión de una bomba en la capital, Kabul, según ha confirmado la Policía local, mientras que el ‘número dos’ del consejo de la provincia de Kunduz (norte), Safiulá Amiri, ha resultado herido en otro atentado, tal y como ha recogido la cadena de televisión afgana Tolo TV.
A pesar del reinicio de las conversaciones en la capital de Qatar, Doha, el Gobierno de Kabul ha descartado nuevas liberaciones de presos talibán ante el incremento de los ataques, después de que los insurgentes hayan reclamado la excarcelación de otros 7.000 miembros del grupo.
De hecho, el vicepresidente primero de Afganistán, Amuralá Salé, sugirió la semana pasada la posibilidad de ejecutar a algunos talibán que se encuentran encarcelados ante el incremento de los asesinatos y los ataques por parte de los insurgentes a pesar de las conversaciones de paz.
Por su parte, el secretario de Defensa en funciones estadounidense, Christopher Miller, confirmó el 15 de enero que Washington había reducido a 2.500 el número de militares desplegados en el país, tal y como contempla el citado acuerdo y de cara a la retirada total de tropas del país norteamericano de Afganistán.
*Con información de Europa Press