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El expresidente Alberto Fujimori fue trasladado a un hospital por una insuficiencia cardiaca
El año pasado, el exmandatario tuvo serios problemas de salud que le obligaron a estar internado en diferentes ocasiones.
El expresidente peruano Alberto Fujimori ha sufrido una recaída en su estado de salud. El exmandatario tuvo que ser trasladado a altas horas de la noche de ayer –lunes 7 de febrero– a un centro hospitalario en Lima, por un episodio de insuficiencia cardíaca.
El Seguro Social de Salud (EsSalud) aseguró que el estado de salud de Fujimori es estable y que “el personal médico de turno logró estabilizar al paciente y se encuentra en sala de observación. También se han indicado exámenes auxiliares”, informó la entidad médica a través de sus redes sociales.
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— EsSalud Perú (@EsSaludPeru) February 7, 2023
Fujimori ha sido trasladado al Hospital II Vitarte desde el penal de Barbadillo en el que se encuentra desde 2009 cumpliendo una pena de 25 años por delitos de lesa humanidad por las masacres de Barrios Altos y La Cantuta, en las que fueron asesinadas una veintena de personas.
Las salidas de prisión del expresidente peruano para ser ingresado por sus problemas de salud suelen ser frecuentes en los últimos años, al igual que los intentos por librarse de la condena de 2009, presentados recursos de habeas corpus hasta ahora desestimados, el último hace apenas unos días.
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Fujimori, quien se halla en prisión desde 2007, registró una “fibrilación auricular paroxística” por lo que se mantiene en terapia de estabilización, explicó Alejandro Aguinaga, congresista y médico de Fujimori, a la emisora local RPP. Una situación similar provocó que se le internara de urgencia en abril del año pasado.
La Justicia de Perú también aprobó a mediados de diciembre la apertura de un proceso penal contra el expresidente, así como varios de sus ministros de Salud, por el caso de esterilizaciones forzosas a casi 350.000 mujeres y 25.000 hombres de diferentes comunidades indígenas durante su gobierno entre los años 1990 y 2000.
El año pasado, la Corte Interamericana de Derechos Humanos emitió una resolución en la que pidió a Perú “abstenerse de implementar” una sentencia de su más alto tribunal que permite la liberación del expresidente Alberto Fujimori.
Según la Corte, la decisión del Tribunal Constitucional de Perú “no efectuó una ponderación que tomará en cuenta la afectación que tiene el indulto por graves violaciones a los derechos humanos en el derecho de acceso a la justicia de las víctimas y sus familiares”.
“Más aún, el Tribunal Constitucional efectuó un pronunciamiento que restituye los efectos de un indulto ‘por razones humanitarias’ otorgado cuatro años atrás, sin valorar información actualizada sobre la situación de salud del condenado”, agregó la Corte.
En abril del año pasado, la defensa del expresidente peruano Alberto Fujimori presentó un nuevo recurso de ‘habeas corpus’ para su puesta en libertad, después de que tuvo que ser hospitalizado tras sufrir una taquicardia.
Gregorio Parco, el abogado de Fujimori –quien cumple una condena de 25 años de cárcel por delitos de lesa humanidad tras ser hallado culpable de la autoría intelectual de las masacres de Barrios Altos y La Cantuta– solicitó su liberación para que, tras ser operado, pueda ser atendido en su domicilio.
Parco aseguró en su demanda que las autoridades peruanas habrían infringido varios artículos del Código Procesal Constitucional, que establece la posibilidad de otorgar el habeas corpus cuando el detenido no reciba el tratamiento médico adecuado, informó La República.
Además del director del Instituto Nacional Penitenciario del Perú (Inpe), Ómar Méndez, y la presidenta del Poder Judicial, Elvira Barrios, la demanda acusaba al exjefe del Estado, Pedro Castillo, así como a la del Congreso, María del Carmen Alva, por avalar la decisión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de no permitir la excarcelación de Fujimori decretada por el Tribunal Constitucional.
“Esta es una demanda de hábeas corpus correctivo”, explicó Parco, quien ha criticado el apoyo de Castillo y Alva a la decisión de una “corte de Costa Rica”, tal y como se ha referido a la CIDH de no aplicar el fallo del Constitucional. “Todo preso, cuando está enfermo, debe estar en la clínica o en su casa. Es una demanda muy simple”, insistió.
*Con información de Europa Press y la AFP.