El expresidente peruano Alejandro Toledo fue atendido de urgencias por una “crisis hipertensiva”

Este martes 6 de junio, el expresidente peruano, Alejandro Toledo, fue atendido de urgencia por “crisis hipertensiva”, según informaron las autoridades locales. Toledo, quien recientemente se entregó a las autoridades tras ser acusado de corrupción y lavado de dinero, actualmente está privado de la libertad como medida preventiva en la cárcel de Barbadillo.

Según informó EsSalud, institución de seguridad social en Perú, el expresidente ya fue dado de alta y fue atendido en el Hospital II de Vitarte. Al parecer, su salud se vio afectada en el mismo momento en el que estaba en una cita médica de rutina, por lo que tras la crisis, fue rápidamente atendido y logró ser recuperado en un corto tiempo.

“El expresidente Alejandro Toledo fue dado de alta, luego de recibir atención de emergencia en el Hospital II de Vitarte por una crisis hipertensiva, que se presentó durante cita médica programada”, resaltó la institución a través de sus redes sociales.

Ante la preocupación por la salud de Toledo, el Instituto Nacional Penitenciario de Perú (Inpe) emitió un comunicado informando que luego de ser dado de alta, el expresidente fue regresado con éxito al penal, conocida como “la cárcel de los expresidentes”.

“El Instituto Nacional Penitenciario informa que el interno Alejandro Toledo Manrique fue trasladado al hospital de EsSalud de Ate, en atención a citas programadas con antelación en los servicios de cardiología, gastroenterología y urología. Cumpliendo con los protocolos de seguridad, se realizó el retorno del referido interno al penal de Barbadillo”, indicó en la misiva.

Toledo lucha contra el cáncer

El expresidente Toledo, investigado por corrupción y lavado de dinero en el marco del megaescándalo de sobornos pagados por la constructora brasileña Odebrecht, fue recluido en abril tras ser extraditado desde Estados Unidos.

El exmandatario de 77 años fue diagnosticado con cáncer según alegaron sus abogados, insistiendo a la justicia peruana que fuera cobijado bajo detención domiciliaria; sin embargo, los jueces negaron la petición y le dieron 18 meses de prisión preventiva a la espera de juicio.

El abogado de Toledo, Roberto Su, dijo a la prensa en Lima que su defendido tiene cáncer. “Tiene muchas dolencias y un tema de cáncer”, indicó sin dar mayores precisiones, aunque los argumentos del representante legal fueron desestimados por los críticos indicando que no habían mostrado pruebas.

El vínculo con Odebrecht

La constructora brasileña Odebrecht reconoció el pago de coimas en Brasil y en otros países de la región en el marco del escándalo Lava Jato, por el que decenas de políticos y empresarios de América Latina están encarcelados. Lava Jato es el caso matriz que descubrió la corrupción del gigante brasileño en su país y la región.

En el caso de Toledo, han sido claves los testimonios de su antiguo colaborador Josef Maiman, y de Jorge Barata, exrepresentante de Odebrecht en Perú. Ambos afirman que el exmandatario recibió los sobornos. En este caso también se acusa a la esposa de Toledo, la ex primera dama Eliane Karp, quien fue pedida en extradición desde Israel para ser juzgada.

Sobre ella pesa una orden de arresto para cumplir prisión preventiva en Perú, pero no se había acordado aún ninguna extradición con Estados Unidos, algo que, según informa la cadena RPP noticias, podría ser aún más complicado si Karp –que tiene la nacionalidad israelí además de peruana– se queda en Israel, que no tiene tratado de extradición con el país latinoamericano.

Otros cuatro expresidentes peruanos enfrentan procesos judiciales por corrupción: Ollanta Humala (2011-2016), Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018), Martín Vizcarra (2018-2020) y Pedro Castillo (2021-2022).

Perú ha sido uno de los países de la región más afectados por la corrupción del escándalo Odebrecht, que salpicó a casi todos los presidentes del siglo XXI.

El expresidente Alberto Fujimori (1990-2000) fue condenado también por corrupción, además de crímenes de lesa humanidad, y Alan García (2006-2011) se suicidó en 2019 cuando la Policía estaba a punto de detenerlo bajo sospechas de vinculación con el caso Odebrecht.

*Con información de la AFP y Europa Press.