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El Financial Times asegura que Venezuela está replicando el modelo ruso y chino de perseguir disidentes y cuestiona las acciones de EE. UU.
La afirmación se deriva de lo ocurrido recientemente con el militar retirado venezolano que fue secuestrado en su casa en Santiago de Chile, por personas que simularon ser policías, y posteriormente fue encontrado muerto.
Hace unos días, la Fiscalía chilena confirmó el hallazgo del cuerpo del militar retirado venezolano Ronald Ojeda, disidente del Gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela y quien había sido secuestrado hace una semana en Santiago.
“Podemos confirmar que los restos corresponden a Ronald Ojeda, que había sido víctima de un secuestro”, informó Héctor Barros, fiscal a cargo de la investigación.
Barros también confirmó la detención de un menor de 17 años, de nacionalidad venezolana, que estaría involucrado en el caso y que será pasado a control de detención el sábado.
El fiscal no entregó detalles sobre las motivaciones del crimen, en una investigación que fue decretada como secreta desde que se confirmó el secuestro el 21 de febrero, cuando Ojeda fue sacado de madrugada de su casa en Santiago, en ropa interior, por personas que simularon ser policías.
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Barros, sin embargo, afirmó que se trata de “una investigación compleja, vinculada al crimen organizado” y que hay otras dos órdenes de detención pendientes.
El fiscal chileno confirmó la noticia, asegurando que Ojeda fue encontrado dentro de una maleta bajo una estructura de cemento.
Sobre el tema, el diario Financial Times aseguró que las acciones del régimen de Nicolás Maduro representan un desafío para los Estados Unidos, país que tiene que decidir en los próximos días si impone nuevamente las sanciones y “arriesga efectos como una menor disponibilidad de petróleo y mayores flujos migratorios en un momento en que Washington también se prepara para elecciones”.
Y es que el 24 de enero, el exmilitar fue incluido en un listado de 33 soldados activos y retirados acusados de tramar actividades “criminales y terroristas” contra Maduro y acusados de traición.
Antes de haber sido encontrado su cuerpo sin vida, desde Chile le pidieron al embajador en Caracas reunirse con el gobierno venezolano, pero Venezuela se negó.
Diosdado Cabello, uno de los altos mandos al interior del partido gobernante Socialistas Unidos de Venezuela, dijo en su programa de televisión regular que “Venezuela no tiene nada que ver con el secuestro, nada”.
El diario británico señala que el asesinato de un disidente en suelo extranjero se asemejaría al comportamiento de Vladimir Putin de Rusia o Xi Jinping de China, ambos aliados de Maduro, según observadores que consultaron como Richard Kouyoumdjian, vicepresidente de la consultoría de seguridad chilena AthenaLab. Recordaron además que en 2024, Venezuela arrestó a Rocío San Miguel, una destacada analista militar de la oposición y abogada, al tiempo que se reportó la desaparición de sus familiares.
El gobierno Maduro también expulsó a la Comisión de Derechos Humanos de la ONU en Caracas e impuso una prohibición para que la líder de la oposición, María Corina Machado, se presente en las elecciones presidenciales.
Encuestas locales muestran que, si las elecciones se llevan a cabo de manera justa, Machado vencería a Maduro con el 70 % de los votos.
“El régimen de Maduro está claramente jugando su propio juego y enviando el mensaje de que continuar con su poder es más importante que cualquier incentivo económico o legitimidad internacional que pueda obtener de una elección más libre y más justa”, le dijo al Financial Times Ryan Berg, director del programa de las Américas en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales.
Esta represión se mantiene al mismo tiempo que Maduro ignora el acuerdo que alcanzó con los Estados Unidos, donde hubo un compromiso respecto a unas reformas políticas y liberaciones de prisioneros políticos, antes de una elección esperada este año.