INTERNACIONAL

El presidente chino promete respetar la autonomía de Hong Kong

El presidente chino Xi Jinping prometió el lunes respetar la autonomía de Hong Kong y mantener el principio aplicado a la excolonia británica de "un país, dos sistemas", tras meses de manifestaciones prodemocracia en ese territorio.

30 de septiembre de 2019
Las protestas en Hong Kong continúan, a pesar de que el presidente Xi Jinping prometió respetar la autonomía de la isla.

El presidente chino Xi Jinping prometió este lunes respetar la autonomía especial de Hong Kong en víspera de las celebraciones en Pekín de los 70 años del régimen comunista, que pueden avivar las protestas en la excolonia británica.

China festeja el martes por todo lo alto el 70º aniversario de la creación de la República Popular, proclamada por los comunistas en 1949, con una serie de actos que incluyen un gigantesco desfile militar, discursos y carnavales.

El desfile previsto para el martes reunirá a 15.000 militares, 160 aviones y decenas de misiles balísticos, en una exhibición para ilustrar la emergencia de China como superpotencia planetaria.

Al mismo tiempo, en Hong Kong, coincidiendo con ese aniversario, el movimiento prodemocracia prepara nuevas manifestaciones que según la policía del territorio pueden ser "muy peligrosas" debido a su creciente "violencia". Esta región del sur de China vive desde junio su crisis política más grave desde su retrocesión a Pekín, en 1997. En los últimos cuatro meses Hong Kong es escenario de  manifestaciones casi diarias para exigir reformas democráticas y denunciar la creciente injerencia de Pekín.

Un país, dos sistemas 

Este lunes, en una recepción en Pekín en víspera de las celebraciones del 70º aniversario de la creación de China comunista, el presidente Xi dijo que su país "seguirá aplicando íntegra y fielmente el principio de ‘un país, dos sistemas‘", así como "un alto grado de autonomía" en Hong Kong.

Bajo el principio "un país, dos sistemas" –vigente hasta 2047– Hong Kong goza en teoría de ciertas libertades de las que no disfrutan los ciudadanos del resto de China, como la libertad de expresión, el acceso sin restricciones a internet y la independencia judicial.

Xi Jinping prevé asistir el martes al desfile desde la muralla sur de la Ciudad Prohibida, el mismo lugar donde el fundador del régimen, Mao Zedong, proclamó el 1 de octubre de 1949 la República Popular China. Además, pronunciará un discurso anunciado como "importante" por la prensa oficial, un calificativo que se usa para todas las alocuciones del jefe del Estado.

Después del desfile militar, se producirá otra marcha, con 100.000 personas y 70 carros, recordando los logros de las últimas décadas. También se lanzarán al cielo 70.000 palomas y 70.000 globos, en referencia a los 70 años del régimen.

Desde hace varios días se proyectan en los rascacielos de Pekín imágenes animadas con la cifra 70, lemas patrióticos o textos que elogian al Partido Comunista y que tienen mucho éxito en las redes sociales.

En las últimas semanas los medios chinos recibieron instrucciones para no insistir en noticias negativas, como accidentes o catástrofes naturales, y para dar prioridad a la "energía positiva", como repite con frecuencia el Partido Comunista.

"Muy, muy peligroso"

Pero ese mismo martes, las manifestaciones prodemocráticas en Hong Kong serán "muy, muy peligrosas", advirtió este lunes la policía del territorio chino. "Después de nuestro análisis, esperamos que la situación mañana [martes] sea muy, muy peligrosa", dijo el superintendente John Tse a la prensa. "Los insurrectos están aumentando su violencia. La profundidad y la amplitud de su violencia y de sus planes demuestra que cada vez más están recurriendo al terrorismo", agregó.

Este lunes, las calles de Hong Kong ya amanecieron llenas de ladrillos y con las paredes cubiertas de grafitis, horas después de una de las peores noches de violencia en la excolonia británica.

Las paredes estaban llenas de grafitis como "Chinazi", "Fuck Police" o "Hong Kong revolution". Y ante las celebraciones del martes de los 70 años de la República popular, los manifestantes quieren aprovechar el evento, que llaman "Día de Cólera", para demostrar nuevamente su resentimiento respecto al régimen chino.

* Con información de AFP.