INDIA

El Reino Unido enviará 1.000 respiradores a la India para que combata la pandemia

India ya había recibido 200 respiradores y 495 contenedores de oxígeno por parte del Reino Unido.

2 de mayo de 2021
Fotos de la semana 30 abril
Múltiples piras funerarias de los que murieron de COVID-19 se queman en un terreno que se ha convertido en un crematorio para la cremación masiva de víctimas del coronavirus, en Nueva Delhi, India, el sábado 24 de abril de 2021. Delhi ha estado cremando tantos cuerpos de las víctimas del coronavirus que las autoridades están recibiendo solicitudes para comenzar a talar árboles en los parques de la ciudad, ya que un segundo aumento récord ha puesto de rodillas al destrozado sistema de salud de la India. (Foto AP / Altaf Qadri) | Foto: AP

El Reino Unido anunció que enviará 1.000 respiradores adicionales a India para que pueda combatir la pandemia del coronavirus que ya ha causado más de 215.000 muertes en el país asiático.

El ministro británico de Relaciones Exteriores, Domici Raab, dijo que seguirá sosteniendo conversaciones con el Gobierno indio para planificar políticas que ayuden a la India a salir de la crisis sanitaria causada por la pandemia.

La semana pasada, el Reino Unido envió un cargamento a la India con 495 concentradores de oxígeno y 200 respiradores.

“Y vamos a enviar otro cargamento de mil respiradores”, declaró Raab, que conversó recientemente con su homólogo indio, Subrahmanyam Jaishankar, quien acudirá el lunes a una reunión con los cancilleres de las potencias del G7 en Londres.

India registró casi 400.000 nuevos casos de contagio y 3.689 decesos en las últimas 24 horas, lo que eleva el balance a más de 215.000 muertos en este país de 1.300 millones de habitantes.

Más medidas restrictivas en India

El ministro encargado de la capital de India, Arvind Kejriwal, dijo que la cuarentena en Nueva Delhi se extenderá por una semana más con el fin de intentar reducir los contagios y muertes por coronavirus en el país.

“El confinamiento en Delhi se extiende una semana más”, escribió Arvind Kejriwal, en su cuenta de Twitter.

Las restricciones actuales expiraban el próximo lunes, pero el número de casos en esta ciudad de 20 millones de habitantes aumenta a un ritmo vertiginoso.

El número de nuevos contagios en India está conmocionando al mundo: actualmente, el país registra más de 360.000 nuevas infecciones diarias, la cifra más alta del mundo. Hasta ahora, casi 18 millones de personas se han contagiado con el SARS-CoV-2 en el subcontinente, y más de 200.000 han muerto. Pero el número de casos no registrados es probablemente mucho mayor.

La situación se ha visto agravada por la nueva “doble mutación” B.1.617, que combina dos variantes en la denominada proteína S (espícula). Desde principios de abril, las cifras se han disparado y la curva aumenta exponencialmente. A mediano plazo, este crecimiento exponencial podría convertirse en un problema, no solo para India y sus países vecinos, sino también para el resto del mundo.

En febrero, un mes después de que las jornadas de vacunación iniciaran en India y cuando la curva de contagios y muertes parecía haber sido controlada, las autoridades y las personas se llenaron de argumentos para creer que lo peor de la pandemia ya había pasado

La necesidad de volver a la normalidad los empujó a flexibilizar medidas y bajaron la guardia, un error que están pagando muy caro. Los líderes políticos y religiosos le restaron importancia a la pandemia y convocaron encuentros masivos.

El Gobierno permitió que millones de creyentes se reunieran para celebrar el Kumbh Mela, el evento religioso más grande del país. Pero los contagios aumentaron y las alarmas se activaron cuando los casos positivos superaron los 93.000 diarios, la cifra más alta registrada durante la primera ola.

Las alarmas se encendieron y se implementaron de nuevo confinamientos para mitigar el contagio. Sin embargo, el virus ya había tomado mucha ventaja. Los casos confirmados en un solo día superaron los 350.000 y 2.236 personas murieron diariamente, el doble de lo registrado en la primera ola. Al cierre de esta edición, India reportó 17.313.163 casos y superó los 200.000 muertos.

La infraestructura del sistema de salud está derrumbada, lo que expuso décadas de subinversión y la falta de un plan para frenar la propagación del virus. Así se creó un efecto dominó: los laboratorios se saturaron y los resultados de las pruebas demoran hasta tres días en entregarse, por lo que se estima que las cifras están por debajo de la realidad.

Además, apareció una nueva variante originada en la India, que ya se ha expandido a 19 países y que la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió que podría ser más contagiosa.

Con información de AFP.