Emboscada a la fuerza pública en Perú deja siete policías muertos

Luto ocupa hoy a la Policía Nacional de Perú, luego de que -este sábado- se confirmara la muerte de siete de sus uniformados, quienes fallecieron en medio de una emboscada, en momentos en que se movilizaban al interior de una región cocalera en Cusco.

Según detallan autoridades policiales de Perú, el ataque en contra de sus uniformados se presentó en inmediaciones del sector conocido como La Convención, más precisamente en el valle de Vraem, una región donde las fuerzas policiales libran de larga data una guerra contra grupos narcotraficantes y otras agrupaciones derivadas de sectores no desmovilizados de guerrillas como Sendero Luminoso.

La noticia de la muerte de estos siete héroes peruanos fue dada a conocer a través de las redes sociales de la institución, confirmando el deceso de 7 de sus uniformados, así como la sobrevivencia de uno más en hechos ocurridos en el poblado de Natividad, destacando que su muerte se cumplió “en cumplimiento del deber”.

Sobre los hechos, la Policía también denunció que los uniformados murieron como producto de ataque por parte de delincuentes que los interceptaron portando “armas de fuego de largo alcance”.

En ese mismo sentido, las autoridades confirmaron que, tras el levantamiento de los cadáveres a cargo de la Fiscalía general de Perú, las víctimas mortales fueron identificados como Alfredo Loayza Carbajal; Luis Cerron Palacios; Wilder Eliseo Conozco; Iván Muñoz Fasabi; Williams Quispe Anchay; Sandro Villegas Corahua; y Juvenal Collahuacho Flores.

A su turno, el uniformado herido fue identificado como el capitán Edwin Mego Villogas.

Sobre los grupos que operan en la zona, medios internacionales han referido que, si bien la mayoría de líderes de la otrora guerrilla de Sendero Luminoso, poderosa en los años 90, actualmente se encuentran presos o ya murieron; como el caso de Abimael Guzmán, aún existen algunos “remanentes”, que se encuentran liderados por un guerrillero conocido como el ‘camarada José', quien se estima cuenta con un ejército de 350 integrantes.

Si bien no se ha reconocido como tal, para algunos, esta acción en contra del grupo de policías puede verse como una represalia por acciones policiales recientes que permitieron herir al referido líder guerrillero en agosto de 2022. La identidad de referido guerrillero es Víctor Quispe Palomino.

En el mismo sentido, en 2021, la Policía de Perú logró ‘dar de baja’ al segundo al mando de la organización, un delincuente conocido en su momento con el alias de camarada Raúl, quien a su vez era hermano del máximo cabecilla de la organización.

Estos nuevos hechos violentos despiertan temor en las comunidades de las regiones próximas, pues rechazan que la violencia pueda escalar a niveles vistos hace décadas, cuando la guerra contra la insurgencia de la guerrilla, de origen maoista, dejó 69.000 muertos.

Este tipo de acciones se presentan en Perú en medio de un difícil momento en que, al margen de este tipo de confrontaciones contra la ilegalidad, las autoridades también riñen contra parte de la población peruana en el marco del estallido de la protesta social, que rechaza la presidencia de Dina Boluarte tras la destitución de Pedro Castillo.

Actualmente, en medio de ese difícil contexto social, que ha estado marcado por las sucesivas marchas que no cesan desde inicios del mes de diciembre, las autoridades policiales han sido señaladas de la muerte de cerca de 50 ciudadanos que tomaban parte en las manifestaciones que reclaman la salida de Boluarte, y el llamado inmediato a elecciones; medida que depende de la correspondiente aprobación por parte del Congreso.