España
En medio de la crisis por desabastecimiento de leche, España tuvo que recurrir a la importación
España fue el segundo mayor productor de leche en la UE durante el año 2021, no obstante, la reducción en la oferta ha significado serios problemas de abastecimiento que se han visto reflejados en el alza de los precios; un duro golpe para el bolsillo de los consumidores.
En medio de la ingente crisis de abastecimiento de leche que vive España durante lo corrido de los últimos meses, las autoridades de ese país, han tenido que recurrir a la importación de este alimento, siendo Francia uno de los proveedores a los que ha tenido que echar mano ante la difícil situación.
Así lo ha confirmado uno de los principales medios de ese país; El Mundo, en un artículo en el que da cuenta de la difícil situación que atraviesa en lo corrido de la segunda mitad del año 2022 el sector lácteo de ese país.
Pese a que a finales de 2021, España se había consolidado como uno de los productores de leche más importantes de la Unión Europea, ocupando el segundo lugar, en los últimos meses, los informes del Ministerio de Agricultura han dado cuenta del decrecimiento que ha presentado el sector durante 2022, un hecho que no solo se ve en las cifras de las entidades, sino también en las estanterías de los supermercados.
Así, según el referido informe de las autoridades españolas, en el pasado mes de octubre, y debido a la notable reducción en la oferta del lácteo, el precio medio del litro de leche en España se situó en aproximadamente en 0,556 euros, lo que traduce en poco más de 2.800 pesos colombianos, lo que representó un aumento de cerca de 61 céntimos de euros en comparación con el precio registrado un mes atrás.
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El informe de las autoridades agrícolas de España explicaron el fenómeno que afecta el bolsillo de los consumidores, en una ‘tendencia a la baja’ en la producción de la leche, refiriendo que en ese mes, la contracción de esta se cifró en el 4%.
Según medios españoles, si bien el aumento del precio de la leche en los últimos meses es de céntimos de euro, la dimensión real del aumento del precio se puede evidenciar haciendo el comparativo con la media registrada apenas 12 meses atrás, a finales de 2021, lo que significa un aumento del 57,5% del precio.
En cuanto a los territorios más afectados con este desabastecimiento, el análisis de los expertos españoles advierte que la totalidad del territorio ibérico se ha visto seriamente golpeado por la reducción de la producción y el correspondiente aumento de precio al público que ello representa, encontrando especiales afectaciones en los mercados de provincias como Castilla y León y Andalucía.
En cuanto a las regiones productoras que mayor impacto han presentado en cuanto a la reducción del alimento, medios locales han referido a Asturias y Cantabria, territorios lecheros donde la producción local se contrajo hasta en un 8,6%.
De acuerdo con las proyecciones y cálculos de las autoridades, se estima que el consumo per cápita de leche anual en España es de 70 litros, no obstante, los altos precios derivados del desabastecimiento han llevado a que las estanterías destinadas a estos productos en los supermercados, comienzan a evidenciar el desabastecimiento, haciendo notoria la escasez.
En ese mismo sentido, el desabastecimiento lácteo también ha impactado la industria de los derivados de la leche como yogurt, queso, y cremas, las cuales también han visto mermada su producción, y han referido aumento de precios debido a la contracción de la oferta, planteando a su vez una encrucijada para la industria que se ha visto ‘asfixiada’ por los sobrecostos que la crisis ha referido.
Las causas de la contracción de la producción
De acuerdo con las autoridades agrícolas de España, la grave crisis que golpea a su sector lácteo se derivó de las difíciles condiciones que viven los productores, que incluso han impulsado a que pequeñas granjas lecheras se hubiesen retirado del negocio, optando por suspender la cría de vacas.
En lo corrido del año 2022, se estima que al menos 2 pequeños productores decidieron diariamente retirarse del negocio, debido a las dificultades propias derivadas del mantenimiento de sus animales; situaciones derivadas del incremento de los costos de los insumos, la sequía, y los bajos precios que les ofrecían por su producción.
De acuerdo con algunos productores citados por medios locales, en algunos meses los réditos obtenidos por la producción lechera apenas les alcanzó para suplir el ‘costo’, lo que representó que gran parte del sector marcara números rojos en sus balances.
En ese sentido, también muchos ganaderos han optado por la cría de ganado para producción cárnica, dejando de lado la producción lechera, significando importantes reducciones en la oferta del producto.
Frente al particular, los ganaderos han pedido una mano por parte de las autoridades ante la crisis del sector, pero si bien el precio al consumidor ha incrementado, el precio que se le paga a los productores no se ha elevado por parte de las grandes empresas, lo que ha desincentivado aún más la producción.
Pocos son los casos, en los que las empresas han optado por, en medio de la crisis, reconocer precios justos a los productores, según advierten medios locales.
Si bien medios locales han advertido que recurrir a las importaciones puede ser una respuesta para solventar el déficit en la oferta, el hecho de tener que comprar la leche a otros países, que también están presentando crisis debido a la reciente ola de calor, puede significar mayores precios para los consumidores finales.