MUNDO
“Intuyo que Maduro tiene un profundo temor de lo que puede ocurrir mañana”
Mientras el gobierno intenta minimizar el impacto de la gran marcha convocada por la oposición para mañana, la gran pregunta es qué postura tomarán las Fuerzas Armadas. SEMANA habló con Rocío San Miguel, abogada y directora de la ONG Control Ciudadano, enfocada en temas de seguridad y defensa.
Más que de costumbre, el ambiente político y social está enrarecido en Venezuela a un día de la marcha convocada por la oposición. Para Rocío San Miguel, tres hechos ocurridos ayer reflejan la inestabilidad y el nerviosismo que está viviendo el régimen de Nicolás Maduro. El primero fue la sublevación (supuesta, según ella) de un pequeño grupo de 27 militares que después de sustraer armas oficiales se atrincheró en el cuartel caraqueño de Cotiza, en donde le pidió a la población salir a la calle. El segundo, fue la declaración del Tribunal Supremo (alineado con el gobierno) de que no reconoce la autoridad de la Asamblea Nacional, el órgano legislativo encabezado por Juan Guaidó. Por último, está el llamado a una marcha alterna con las fuerzas chavistas. “Los actores están jugando y lo están haciendo muy duro”, dice San Miguel. Lo que ocurra mañana podrá servir de termómetro para medir quién está ganando la partida.
SEMANA: Para usted, ¿qué explica que un grupo de militares tan pequeño se haya aventurado a una acción como la del lunes?
ROCÍO SAN MIGUEL: Hay muchos datos que es importante tener presente. Por ejemplo, me llaman mucho la atención los videos que transmitió el líder, en los cuales no se ve acompañado operativamente por otros efectivos militares. Prácticamente parece dar una declaración personal con el único propósito de pedirle a la gente que salga a la calle y decir que ellos están cansados. Eso es muy particular, pues rompe el formato tradicional de tener militares que lo acompañen en el pronunciamiento. Eso abre muchas conjeturas. Luego está la detención en la tarde en la que Diosdado Cabello anunció que eran 27 detenidos, y solo dio el nombre del que habló, un sargento, y me llama la atención que no haya dado el listado de los detenidos, o por lo menos de algunos de ellos. Eso alimenta las teorías conspirativas, pues el gobierno ha mostrado tener capacidad de ponerlas en marcha desde la ascensión de Maduro en 2014.
Le puede interesar: Capturan a un grupo de militares venezolanos que llamó a desconocer gobierno de Maduro
SEMANA: Para ser claros, ¿usted cree que lo del cuartel de Cotiza fue un montaje?
R. S. M.: No me atrevo a llamarlo montaje, porque lo que hemos venido observando desde 2014 es que escogen personas que pueden estar pensando en llevar algunas actividades de insurrección, pero son infiltradas por gente que sirve al gobierno. Es decir, empujan un malestar enorme que hay en la Fuerza Armada Nacional en los sectores más débiles, que son tropa profesional y algunas unidades. Pero no se pliegan oficiales de comando que tienen un nivel mayor de compromiso y mucho más que perder.
SEMANA: ¿Ha ocurrido antes?
R. S. M.: No podemos olvidar el formato que se utilizó en el Golpe Azul (febrero de 2015), en el que meten preso a un grupo de militares, luego lo separan y unos se convierten en delatores de otros y quedan en libertad. Ese formato ha sido frecuentemente utilizado por el oficialismo en un país donde no hay Estado de derecho, sin garantías al debido proceso, presunción de inocencia o control fiscal de los actos judiciales. En ese contexto, cualquier cosa puede pasar. Incluso que les digan: “Móntate en esto y acusa a esta persona”. Es la misma línea que vimos también en el alzamiento de la brigada blindada (agosto de 2017).
SEMANA: ¿Qué significa que esos hecho se dieran a dos días de la gran marcha convocada por la oposición?
R. S. M.: Es muy conveniente. Para mí el objetivo estratégico central en el marco de esta profunda crisis política del gobierno, que ha entrado en una inestabilidad del sistema, es evitar a toda costa las convocatorias que ha hecho la oposición. Persiguiendo ese objetivo, ha puesto en escena tres elementos importantes. Uno, convocar desde primeras horas de ayer las marchas de lo que llaman el ‘chavismo en la calle’. Dos, realizar las detenciones militares en esta puesta en escena de una rebelión que para mí no califica como tal. Y tres, la decisión del Tribunal Supremo de Justicia. Todo esto debe ser concatenado y visto en conjunto.
Le sugerimos: Protestas contra Maduro se extienden hasta la madrugada en varias zonas de Caracas
SEMANA: Pero, ¿hay fisuras en el Ejército con respecto al apoyo al régimen?
R. S. M.: Hay fisuras. Hasta ahora hemos visto la lealtad y el apoyo del alto mando militar que se ha expresado constantemente. La gran interrogante son los mandos medios, los comandantes de batallones y comandantes con tropa bajo su mando. Eso sigue siendo un acertijo.
SEMANA: ¿Qué podría provocar que estos militares le retiren el apoyo al régimen?
R. S. M.: Acá hay un detonante que es la profunda crisis social que afecta a la sociedad venezolana y a la Fuerza Armada Nacional. Incluso los grados de mayor jerarquía no tienen con qué mantener a su familia por un día. Esto está haciendo mella en el soporte de la institución. Yo intuyo que Maduro en su inestabilidad tiene un profundo temor de lo que puede ocurrir mañana.
SEMANA: ¿Qué cree que puede pasar?
R. S. M.: A mi modo de ver, lo que puede ocurrir es simplemente que la Fuerza Armada Nacional decida no reprimir, no levantarse en armas contra el pueblo. A lo mejor esa es la manera de manifestarse. Y creo que es un poco hacia donde apunta Juan Guaidó, que claramente se está apartando de pedir una insurrección militar, y simplemente está pidiendo un comportamiento de lealtad a la Constitución y permitir al pueblo expresarse. Ahora, es difícil prever los acontecimientos de las próximas horas, no sabemos si puede existir alguna manifestación de resquebrajamiento del apoyo militar a Maduro.
Le recomendamos: ¿Revive la oposición?
SEMANA: Maduro le ha dado mucho poder a la cúpula militar. ¿Eso no le asegura que el apoyo continúe?
R. S. M.: Sí, bueno, controlan las mayores fuentes de poder en Venezuela: el negocio de la alimentación, el negocio del petróleo, el negocio de la explotación minera, el negocio de la frontera. Un dato muy interesante es que desde el 2017 a los militares no les interesa tener ministerios; se redujo su participación ministerial del 47 por ciento al 25 por ciento. Los ministerios están vacíos de dinero, por eso ya no les interesan. Y se han concentrado en las áreas que siguen produciendo dinero. El petróleo, que sigue produciendo, la minería y el control de las importaciones de alimentos. Eso lo controlan directamente.
SEMANA: Pero los beneficios de eso no les llegan a todos…
R. S. M.: Yo diría que eso le llega a menos del 1 por ciento. Es muy reducido el círculo de la cúpula militar que percibe los mayores beneficios.
SEMANA: Por lo cual no es descabellado pensar que el grueso de las Fuerzas Armadas le retiren el apoyo a Maduro…
R. S. M.: Las circunstancias serían más por razones socioeconómicas que políticas.
SEMANA: ¿Cree que ha hecho mella el llamado que se ha hecho desde diversos sectores a las Fuerzas Armadas para que apoyen una transición?
R. S. M.: Guaidó introdujo un nuevo paradigma de diálogo con la Fuerza Armada que no es confrontacional. Les habla de futuro, de oportunidad, les tiende un puente para una solución pacífica, constitucional, electoral incluso, y eso rompe de manera notable con otros diálogos de otros líderes en el pasado. Es muy interesante lo que está haciendo Guaidó en términos de comunicación con la fuerza armada. Y Luego lo que él mismo representa: tiene un elemento de identidad generacional mucho más cercano a la mayoría de los integrantes de la Fuerza Armada Nacional.
SEMANA: ¿Tiene esperanzas en Guaidó?
R. S. M.: Está por verse el desarrollo de los acontecimientos. Acá vamos a una velocidad que hay que analizar día a día, hora a hora. Guaidó puede ser detenido mañana; acá puede haber autos de detención mañana firmados por el fiscal general de la república. El poder viene funcionando erráticamente, y cabe esperar más decisiones erráticas y apresuradas de Miraflores, en donde parecen no estar entendiendo los cambios de escenario que se están produciendo aceleradamente.
SEMANA: ¿Qué papel cumple Diosdado Cabello en todo esto?
R. S. M.: Creo que aspira a seguir tutelando la Fuerza Armada Nacional, a tener mayor influencia. Sin duda, Diosdado tiene mayor influencia que Maduro sobre la Fuerza Armada Nacional, pero no creo que sea capaz de tener una cohesión total como para alinearla con sus propios objetivos.
SEMANA: Hay quienes piensan que Diosdado podría impulsar una transición sin Maduro, pero con el chavismo en frente, por ejemplo…
R. S. M.: Yo veo a todos los actores trabajando en la dirección de sus propios objetivos. Es decir, no hay que hacerse muchas ilusiones, ver el escenario desapasionadamente, porque los actores están jugando y lo están haciendo muy duro. El poder tiene todavía muchos recursos bajo la manga, entre ellos las órdenes de detención y la actuación de órganos de inteligencia que, como en el caso de la DGCIM, sigue las órdenes de Maduro.