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España: las ‘filas del hambre’ son producto del aumento en el costo de los alimentos

Esta práctica se hizo común por la pandemia, pero ahora regresó por cuenta de la inflación.

11 de octubre de 2022
Elecciones en Madrid.
La gente hace cola para recibir beneficencia. Foto: AP / Manu Fernández. | Foto: AP

La subida de los precios en la energía y los alimentos en España, ha obligado a muchos hogares a ‘apretarse el cinturón’ y reducir radicalmente sus gastos. Sin embargo, hay otras personas que han vivido más allá de sus posibilidades y ahora se ven obligados a la “beneficencia del estado” para sobrevivir. Una situación dramática que las organizaciones sociales intentan afrontar con la esperanza de recuperar la autonomía económica de cada ciudadano.

Estas llamadas ‘filas o colas del hambre’ habían tomado relevancia dentro de la cultura española a mitad de la crisis sanitaria del Covid-19, sin embargo, ahora vuelven con más fuerza tomando gran importancia; la causa: inflación.

Fuentes del Ministerio de Economía de España consideran que la inflación “es un fenómeno global y una de las principales consecuencias de las tensiones geopolíticas”, que está provocando un aumento prolongado de los precios de la energía, especialmente del gas y los alimentos.

“Muchas familias nos dicen que necesitan ‘recurrir otra vez a las colas del hambre’ porque no pueden pagar el aumento del precio en los alimentos, ya que ha subido todo”, aseguró Conrado Giménez, fundador de Fundación Madrina.

Según el instituto nacional de estadística de España, la inflación anual se situó en el 9 %, solo en el mes de septiembre, algunos productos básicos como la leche, los huevos y el aceite se han encarecido por más de un 20 %, si se comparan los precios de este año, frente a los del 2021. Un aumento que muchos hogares ya no pueden resistir.

“Nosotros citamos a un número limitado de personas, 200 cada día, pero, van aumentando por divisiones de servicios sociales y otras entidades, que llega de 150 a 200 familias al mes”, afirmó Giménez.

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España atraviesa una grave crisis alimentaria Foto: Getty | Foto: Getty Images

El auge en la demanda de estos programas de beneficencia también los ha detectado el banco de alimentos de Madrid, y otras fundaciones que reparten comestibles a más de 560 entidades benéficas de la capital española.

A diciembre de 2019, cerramos con una cifra de beneficiarios de 130 mil, ahora mismo, estamos en 182 mil, han crecido con un nuevo perfil de beneficiario, es decir, están solicitando ayuda alimentaria, personas de clase media, parejas jóvenes, inmigrantes que nunca habían solicitado alimentos y que ahora necesitan”, según afirmó Mila Benito, de Fundación Banco de Alimentos de Madrid.

Además, a estos perfiles se han unido gran parte de los ucranianos que huyen de la guerra que viven en ese país, por cuenta de la invasión rusa. “Nosotros tenemos un servicio de atención para los ucranianos y hemos recibido una 1600 llamadas de servicios de emergencia nuestros, de familias que no pueden más, las familias “acogedoras” incluso, no tienen dinero para apoyarlas”, agregó Conrado Giménez.

Inflación de España cierra más alta que la de Colombia

La cifra récord, que no se registraba desde 1992, superó significativamente la medición nacional. España no representa un panorama desconocido para el resto del mundo.

Su tasa de inflación ha aumentado considerablemente y finalizó diciembre de 2021 en 6,5 %. Aunque esta cifra fue inferior a la estimada inicialmente (6,7 %), el coste de vida de los españoles ha subido con fuerza, el mayor incremento desde mayo de 1992, según ha informado este viernes el Instituto Nacional de Estadística (INE) de España.

La situación es alarmante, ya que el IPC del país cayó un 0,5 % en 2020 y un 0,0 % en febrero de 2021; sin embargo, mostró una tendencia ascendente continua antes de estabilizarse en 6,5 %.

El aumento de los precios de la energía y la gasolina fueron los principales impulsores de la inflación récord. Los ciudadanos y empresarios españoles son los más afectados por el aumento de la cesta familiar y del coste de la vida. Según el INE, la situación ha afectado incluso la cadena productiva de bienes y servicios en el país.