MUNDO
España y Portugal baten récords en medio de una intensa ola de calor
Los dos países se han visto afectados por una masa de aire caliente y seco procedente del norte de África.
La península ibérica batió récords de temperatura en abril entre el jueves 27 y el viernes 28 de abril con los termómetros de España y Portugal encaramándose casi a los 40 °C, en una inusualmente temprana ola de calor que incrementó el riesgo de incendios.
La España peninsular registró el jueves, 27 de abril, un récord de temperatura para un mes de abril con 38,8 grados Celsius en Córdoba (sur), según los datos provisionales publicados este viernes, 28 de abril, por la agencia estatal de meteorología (Aemet).
Esta temperatura, registrada en la estación meteorológica del aeropuerto de esta ciudad andaluza, “se trataría del récord de temperatura de abril en la España peninsular”, señaló Aemet en Twitter.
El récord anterior para la España continental era de 2011, cuando se registraron 38,6 grados en Elche (este). Este dato provisional todavía debe ser “confirmado”, lo que podría tomar varios días, según precisó el organismo a la AFP.
Lo más leído
Esta cifra, sin embargo, no sería un récord absoluto para toda España, ya que “la máxima histórica se registró en Canarias en 2013″, el archipiélago situado frente a las costas del noroeste de África, especificó Aemet. Aquel récord fue de 40,2 °C.
Por su parte, el vecino Portugal alcanzó también el jueves, 27 de abril, su temperatura más alta para un día de abril en al menos 78 años, con los 36,9 °C de Mora, en el centro del país, según el instituto meteorológico nacional.
Sequía catastrófica
España y Portugal viven una ola de calor excepcionalmente temprana, provocada por una masa de aire caliente y seco procedente del norte de África.
El viernes persistía el calor y la temperatura alcanzó los 37,8 °C en Granada, en Andalucía, según datos de la Aemet.
Ello llevó al gobierno español a adelantar, de principios de junio a ahora, la campaña estatal contra los incendios forestales, anunció el Ministerio de Interior.
A consecuencia del cambio climático, los episodios de temperaturas excepcionalmente elevadas se multiplicaron los últimos años en España, país europeo en primera línea con casi el 75 % de su territorio en riesgo de desertificación, según la ONU.
El país experimentó en 2022 el año más cálido de sus registros, en el que encadenó varias olas de calor a partir de mayo, de acuerdo con Aemet.
Según un estudio de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC) publicado el martes, 25 de abril, los días al año con temperaturas estivales en España pasaron de 90 a 145, entre 1971 y 2022.
Además del calor, España, que exporta una gran parte de su producción agrícola al resto de Europa, enfrenta una sequía catastrófica que preocupa a agricultores y autoridades.
Según el Coag, el principal sindicato de agricultores, el 60 % de las tierras agrícolas españolas están actualmente “asfixiadas” por la falta de precipitaciones.
Medidas empleadas en los colegios de España
El Ministerio de Educación y Formación Profesional ha recordado que las medidas en los colegios ante las altas temperaturas como las que hay estos días en varios puntos del país, así como la adaptación climatológica de los edificios públicos, dependen de las comunidades autónomas, los ayuntamientos y el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (MITMA).
En concreto, fuentes del Ministerio de Educación le explicaron a Europa Press que el Gobierno habilitó, a través de los fondos europeos que gestiona Transportes, dos programas (uno dirigido a comunidades autónomas y otro a ayuntamientos) para la reforma y mejora de la eficiencia energética de edificios públicos, entre los que se incluyen los centros escolares.
De este modo, son los ayuntamientos y las comunidades autónomas los que solicitan al Ministerio de Transportes las partidas que consideren para la adaptación climatológica de sus edificios públicos, por lo que Educación no ha transferido dinero para ello, según precisan las mismas fuentes, que señalan que se optó por esta fórmula porque era “más operativa y más ágil” y, además, había más dinero que el que podía destinar el Departamento que dirige Pilar Alegría.
En cuanto a la aportación económica de 200 millones de euros anunciada por la ministra Alegría el pasado verano para la adaptación climatológica de los colegios, el Gobierno finalmente decidió que esos fondos correspondieran al Ministerio de Transportes, que es el competente en la mejora de la eficiencia energética de los edificios públicos.
Desde Educación prevén que en las próximas semanas el MITMA dé datos del dinero solicitado por comunidades autónomas y ayuntamientos para la reforma y adaptación energética de sus centros escolares.
*Con información de AFP y Europa Press.
