Venezuela- Estados Unidos
Estados Unidos le manda un ultimátum a Nicolás Maduro. El régimen entra en pánico con María Corina Machado y busca atajarla
Si el régimen de Nicolás Maduro no deja participar a María Corina Machado en las elecciones, Estados Unidos podría tomar “acciones” contra Venezuela.
Hace una semana, el Gobierno de Joe Biden dio un giro radical frente a Venezuela. Tras años de severas sanciones, la Casa Blanca levantó algunas restricciones en materia de petróleo y gas. La retribución que daba el Gobierno de Maduro, a cambio, era enorme: abrirle la puerta a la democracia en su país, después de años en que los opositores han sufrido todo tipo de vejámenes. Pero no habían pasado ocho días del anuncio del Tío Sam cuando Venezuela ya estaba incumpliendo su palabra.
El arrollador triunfo de María Corina Machado en las elecciones primarias, con más del 92 % de los votos, dejó claro que Maduro no había cambiado para nada. El Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela ordenó suspender “todos los efectos de las distintas fases del proceso electoral conducido por la Comisión Nacional de Primarias, incluyendo los resultados obtenidos en dichos comicios”.
Esta acción representa una traba más del Gobierno de Maduro hacia sus oponentes, a pocos meses de las elecciones presidenciales programadas para 2024. Y tiene un solo objetivo, frenar a María Corina. El tribunal expresó su preocupación acerca de la legalidad de la contienda de la oposición que se llevó a cabo el 22 de octubre.
Este acontecimiento se produjo cinco días después de que la Fiscalía General inició una investigación contra los organizadores de las elecciones primarias por la presunta comisión de delitos que abarcan desde la usurpación de funciones electorales hasta la asociación para delinquir y la legitimación de capitales.
Sin embargo, aún no se ha aclarado si esta suspensión resultará en la anulación definitiva de los resultados electorales. La decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) surgió como respuesta a una petición presentada por el diputado José Brito. Aunque se le señala de mantener intereses inversamente proporcionales al chavismo, Brito solicitó una revisión para determinar si se detectaron “irregularidades” durante los comicios primarios.
Tras el fallo, María Corina le dijo al diario ABC de España: “Me habilitaron los 2,5 millones de votos de las primarias el 22 de octubre, es un hecho y un mandato. Y me voy a inscribir el próximo año”. A su vez, en declaraciones a CNN, dijo: “Voy a derrotar a Nicolás Maduro e iniciar la reconstrucción de Venezuela... En este país, después de estos años de hambre, de dolor y de separación, estamos decididos a hacer lo que haya que hacer y eso es exactamente lo que va a ocurrir. Vamos a ir a un proceso electoral”.
Para muchos expertos era claro que Maduro pondría un palo en la rueda de cualquier posible competidor. “Si bien Estados Unidos ya ha anunciado que se van a flexibilizar o relajar muchas de las sanciones, lo cierto es que en Venezuela hoy no hay condiciones para unas elecciones legítimas… Maduro quiere volver la habilitación de María Corina una concesión. Hay que saber también que unas elecciones con Maduro como candidato no solamente no son legítimas, ni creíbles, sino que adicionalmente las va a utilizar para perpetuarse en el poder”, le dijo el expresidente Iván Duque a SEMANA.
En Estados Unidos hay una alarma encendida. Un portavoz del Departamento de Estado advirtió que “tomarán medidas si Maduro y sus representantes no cumplen con sus compromisos de la hoja de ruta electoral”. También agregó que instan a Nicolás Maduro y a sus representantes “a mantener los compromisos que asumieron en la firma del acuerdo de la hoja de ruta política en Barbados”.
Los comicios primarios fueron un hito importante en el progreso de Venezuela hacia una campaña presidencial libre, justa y competitiva en 2024. De igual manera, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, aseguró que Nicolás Maduro no tiene margen para incumplir el acuerdo alcanzado con la oposición y advirtió que, si lo hiciera, se expondría a la restauración de las sanciones.
“Si el régimen llegara a violar efectivamente el acuerdo que alcanzaron; por supuesto, tomaremos las medidas necesarias… Hemos sido muy claros en este sentido: no se les permitirá llevar a cabo acciones que contradicen los compromisos que han asumido para avanzar hacia elecciones libres y justas, un objetivo compartido con la oposición”, dijo.
Este intercambio tuvo lugar después de una pregunta formulada por el senador republicano Marco Rubio, quien abogó por imponer de nuevo estas sanciones. “El régimen criminal y narcotraficante de Maduro no escatimará en esfuerzos para socavar la aplastante victoria de María Corina Machado en las elecciones primarias de la oposición”, dijo.
Juan Guaidó, por su parte, advirtió: “La dictadura pretende invisibilizar y deshumanizar (propio de dictaduras) a millones de venezolanos que elegimos en unas primarias con muchos obstáculos. Enfrenten a quien elegimos los venezolanos en elecciones competitivas, dejen por un segundo de lado su arma favorita de persecución: la judicialización de la política”.
A su vez, un destacado grupo de miembros del Centro Carter arribó a Venezuela este jueves con el propósito de llevar a cabo reuniones cruciales con funcionarios gubernamentales y representantes de la oposición. Este acontecimiento se enmarca en el contexto de un acuerdo previamente firmado en Barbados, el 17 de octubre, que establece la celebración de elecciones presidenciales en el segundo semestre de 2024, las cuales contarán con la participación de observadores internacionales.
La organización, que fue fundada por el expresidente estadounidense Jimmy Carter, ha anunciado oficialmente la llegada de sus representantes a Caracas en virtud de este acuerdo histórico. La misión de los miembros del Centro Carter en el vecino país reviste una gran importancia. Su agenda incluye reuniones cruciales con diversos sectores, que abarcan desde los miembros del Consejo Nacional Electoral hasta los firmantes del mencionado acuerdo, representantes de partidos políticos, observadores electorales nacionales y numerosos grupos de la sociedad civil.
Estas reuniones se llevarán a cabo con el objetivo primordial de evaluar y debatir la invitación extendida, conforme a las disposiciones del acuerdo, para la implementación de una misión técnica de observación electoral en las elecciones presidenciales, reportó la AFP. Es relevante destacar que el Centro Carter, a pesar de su compromiso con esta iniciativa crucial, aún no ha proporcionado detalles específicos sobre quiénes liderarán la comisión encargada de la misión técnica de observación, ni ha confirmado la duración exacta de su permanencia en Venezuela.
La presencia y las actividades de esta entidad tienen un impacto significativo en el proceso electoral, ya que contribuyen a fortalecer la transparencia y la integridad del mismo, al tiempo que fomentan la confianza en el sistema electoral y la democracia.
Maduro ha hecho poco para cumplir con los compromisos con el Tío Sam. Accedió en la liberación paulatina de cinco presos políticos, un ítem primordial que exigía Washington. Uno de los liberados fue Roland Carreño, quien formó parte del Gobierno interino de Juan Guaidó y estuvo preso tres años.
Estados Unidos sí ha cumplido su palabra. Se abrió el espacio para licencias que permiten operaciones en el sector de petróleo y gas durante seis meses. Además, se han autorizado transacciones con la empresa estatal minera Minerven para combatir el comercio ilegal de oro. También se realizaron ajustes en dos licencias para permitir negociaciones secundarias de ciertos bonos de la petrolera estatal Petróleos de Venezuela. Aun así, pocos tienen esperanza en que Nicolás Maduro honre los compromisos pactados en Barbados.