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Estados Unidos prepara impresionante plan masivo de seguridad para posesión de Biden
El plan de máxima alerta de seguridad empieza con seis días de antelación, aunque llevan preparándolo por más de un año.
El Servicio Secreto de Estados Unidos y las diferentes agencias de seguridad están preparando un plan masivo para proteger el acto de posesión del electo presidente Joe Biden, quien tomará su nuevo cargo el próximo 20 de enero en Washington.
Según se conoció, la seguridad del Capitolio y de otros edificios federales estará custodiada por cerca de 15.000 soldados de la Guardia Nacional, quienes estarán acompañados por miles de policías y oficiales, además de cercas de acero de dos metros y medio.
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Con el fin de coordinar la operación entre el FBI, la Guardia Nacional y otras agencias federales, para esta ocasión el plan de máxima alerta de seguridad empieza con seis días de antelación, aunque llevan preparándolo por más de un año.
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Esto en medio de amenazas por parte de miembros de grupos extremistas que podrían llegar a Washington en los próximos días. Estas personas han “prometido ejecutar” a varios miembros del Congreso de Estados Unidos.
Así mismo, los servicios de inteligencia esperan que miles de personas simpatizantes del grupo Maga (Make America Great Again) también arriben a la ciudad de aquí al 20 de enero, cuando el presidente Trump deje su cargo.
Varios medios estadounidenses registraron el arresto de Louis Capriotti, un ciudadano de 45 años, quien lanzó amenazas de muerte contra “cualquier legislador demócrata” que ingrese a la Casa Blanca el día de la Inauguración, como se conoce el día de posesión del nuevo presidente del país.
“Si la gente piensa que Joe Biden va a poner su mano sobre la Biblia y entrar en la Casa Blanca el 20 de enero, lamentablemente están equivocados”, dijo Capriotti, en una conversación con un miembro del Congreso citado por distintos portales.
“Rodearemos la Casa Blanca y mataremos a cualquier demócrata que pise el césped”, agregaba en el mensaje.
Varios políticos se han tomado las amenazas muy en serio y han señalado que “son reales”; sin embargo, explicaron que estos actos no detendrán la transferencia de poder.
“No estamos hablando de una célula Isis de 90 personas, estamos hablando principalmente de un grupo de personas que, sí, son muy peligrosos. La gente podría terminar muerta”, dijo el representante Jim Himes.
Por esta razón el Servicio Secreto tomó otras dos decisiones, que incluyen poner detectores de metales en todas las entradas del Capitolio y por las que incluso tendrán que pasar los miembros del Congreso; así mismo, hizo un llamado a todas sus oficinas en el país para que envíen personal a Washington durante toda esta semana.
Por ejemplo, el Distrito de Columbia espera enviar entre 3.000 y 4.000 agentes a custodiar la seguridad en la capital durante estas fechas.
Luego del ataque al Congreso el pasado 6 de enero, las fuerzas de seguridad han tomado medidas más drásticas y han reevaluado toda la organización, por lo que muchas personas no podrán ver el evento o lo harían desde lugares más lejos de lo habitual, ya que se ha asegurado un perímetro mucho más amplio.
Aunque ven con preocupación el hecho de que muchas personas que hicieron parte de los actos violentos y otros partidarios de Trump han migrado a aplicaciones encriptadas como Telegram, en la que están haciendo llamados a ocupar Washington.
Congreso de Estados Unidos inició discusión sobre juicio político
En la mañana de este miércoles, la Cámara de Representantes de los Estados Unidos inició el debate sobre un nuevo juicio político en contra del presidente Donald Trump, por haber alentado los actos violentos contra el Congreso.
Se espera que la medida se apruebe sobre las 3:00 p.m., debido a que los demócratas, quienes han impulsado el juicio, tienen mayoría en esta cámara.
Esto significa la apertura formal (por segunda vez) de un juicio político contra Trump.
A falta de siete días para que se termine el periodo presidencial del republicano, algunas personas han cuestionado todo el proceso; sin embargo, la líder demócrata, Nancy Pelosi, indicó que de prosperar este “impeachment” se podría sancionar a Trump para que no pueda volver a ocupar cargos públicos en el futuro.