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Estados Unidos levanta la designación de Cuba como Estado patrocinador del terrorismo
La isla del Caribe, dominada por el régimen de la familia Castro, saldría de la polémica lista por cuenta de la determinación del gobierno saliente de Joe Biden.
Según un alto funcionario del gobierno de Joe Biden, se espera que Estados Unidos levante el martes la designación estadounidense de Cuba como Estado patrocinador del terrorismo, según confirmaron varios funcionarios estadounidenses familiarizados con el asunto. De igual manera, se reportó que las fuentes citadas no estaban autorizadas a hacer comentarios e insistieron en el anonimato para discutir la medida aún no anunciada públicamente.
Aun así, es probable que la decisión se revierta pronto, la próxima semana, después de que el presidente electo Donald Trump asuma el cargo y el nuevo secretario de Estado designado, Marco Rubio, asuma el cargo de principal diplomático de Estados Unidos, quien ha demostrado ser alguien que constantemente condena a la dictadura de Cuba liderada hoy en día por Miguel Díaz-Canel.
Es de recordar que Marco Rubio, cuya familia huyó de Cuba en la década de 1950, antes de la revolución comunista que llevó a Fidel Castro al poder, ha sido durante mucho tiempo un defensor de las sanciones contra la isla comunista. Rubio comparecerá ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado el miércoles para su audiencia de confirmación y se espera que aborde sus raíces cubanas en su testimonio.
Cuba fue incluida en la lista negra como una de las últimas decisiones políticas tomadas por la administración Trump en 2020, antes de dejar la Casa Blanca para la posesión de Joe Biden, citando el refugio que brinda Cuba a terroristas colombianos y estadounidenses que huyen de la justicia. En el caso de Colombia, siempre se hace énfasis de como la isla ha servido como guarida para líderes de la guerrilla del ELN.
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“Durante décadas, el Gobierno cubano ha alimentado, alojado y proporcionado atención médica a asesinos, fabricantes de bombas y secuestradores, mientras muchos cubanos pasan hambre, no tienen hogar y carecen de medicamentos básicos”, dijo entonces el Departamento de Estado liderado entonces por Mike Pompeo.
En los últimos años, el Gobierno cubano había estado llevando a cabo una campaña activa para ser eliminado de la lista, reclutando a presidentes regionales, como el colombiano Gustavo Petro y el expresidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, para presionar al presidente Joe Biden en su nombre.
Además, varios exmandatarios de izquierda de Latinoamérica y España, así como exdiplomáticos estadounidenses, el expresidente de Estados Unidos Barack Obama y legisladores demócratas que favorecen el compromiso con el Gobierno cubano, pidieron a Biden eliminar a Cuba de la lista para aliviar la situación humanitaria de la población de la isla y tratar de frenar la migración hacia el país norteamericano que ha alcanzado proporciones históricas.
No hubo comentarios inmediatos de Rubio ni de su oficina, pero uno de sus colegas republicanos en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, el senador de Texas Ted Cruz, denunció rápidamente la medida de la administración Biden.
“La decisión de hoy es inaceptable por sus propios méritos”, dijo Cruz en un comunicado. “El terrorismo promovido por el régimen cubano no ha cesado. Trabajaré con el presidente Trump y mis colegas para revertir de inmediato y limitar el daño causado por la decisión”.
El representante republicano por el sur de Florida, Carlos Giménez, tuiteó: “El presidente Biden es un cobarde patético. El 20 de enero habrá un nuevo sheriff en la ciudad y el presidente Trump, junto con el secretario de Estado [Rubio], no solo pondrán a Cuba de nuevo en la lista, sino que pulverizarán al régimen de una vez por todas”, aseguró el congresista.