Este es el peligroso plan de Nicolás Maduro para quedarse en el poder de Venezuela

El silencio de Gustavo Petro frente al golpe a la democracia que se está viviendo en Venezuela era abrumador. Pero este lunes el Gobierno por primera vez dio un pequeño giro. Y se armó la de Troya. En un comunicado de prensa, la Cancillería esbozó un mensaje crítico: “Colombia expresa su preocupación por los recientes acontecimientos acaecidos en ocasión de la inscripción de algunas candidaturas presidenciales”.

No era lo que millones de venezolanos exiliados por el terror que ha infligido Nicolás Maduro en su país esperaban como solidaridad. Pero esa pequeña mecha alcanzó a prender la ira del Palacio de Miraflores.

“Venezuela ha sido siempre respetuosa de los complejos procesos políticos en Colombia, incluso en momentos de violencia y grandes divisiones. Emitir juicios falsos, aun cuando el canciller Luis Gilberto Murillo contaba con información veraz de primera mano, no solo es un acto de mala fe, sino que busca minar el proceso de normalización de las relaciones diplomáticas, políticas y comerciales, que ha sido promovido por nuestros presidentes”, respondió Yvan Gil, canciller venezolano. Y luego Maduro volvió a atacar: tildó de “terrorista” al partido de María Corina Machado y calificó como “izquierda cobarde” a los Gobiernos de Colombia y Brasil.

El presidente Gustavo Petro en su cuenta de X contestó: “No hay izquierda cobarde, hay la probabilidad de, a través de profundizar la democracia, cambiar el mundo”.Los hechos que se viven en el vecino país alertaron al planeta.

Maduro, fiel a su objetivo de arrasar eliminando a todos los candidatos, no dejó inscribir a Corina Yoris, la aspirante elegida por María Corina Machado para reemplazarla en la contienda. A ella, la dictadura la frenó porque sabía que tendría todas las de perder en caso de que los comicios fueran en total democracia. El veto que tenía como excusa una vieja sanción fue suficiente para bajarla del barco, pese a su abrumadora victoria electoral en las primarias, en las que obtuvo el 93 por ciento de los votos.

El lunes se formalizó también la inscripción, supuestamente por la oposición, de Manuel Rosales, un exrival de Hugo Chávez. “Lo que advertimos durante muchos meses terminó ocurriendo: el régimen escogió a sus candidatos… El régimen se quitó la careta y se puso en evidencia con sus cómplices para cerrar esta vía electoral”, dijo Machado sin mencionar a Rosales.

Entre tanto, el futuro de Venezuela no luce halagador, hace ya 25 años el chavismo llegó al poder, desde entonces, el país vive una crisis humanitaria sin precedentes, reflejada en millones de venezolanos que emigran huyendo de los horrores de la dictadura de Maduro.

El líder del vecino país, después del fallecimiento de Chávez, asumió el gobierno definitivamente en 2012 y se ha aferrado a él de forma autoritaria sin acatar ninguna de las instituciones democráticas, en este proceso electoral ha demostrado que no respeta nada, las elecciones son una pantomima burlesca de la democracia.“Hay un solo destino: la victoria popular, hagan lo que hagan, digan lo que digan, no han podido ni podrán jamás con nosotros”, dijo Maduro en un evento en el cual se le proclamó como candidato para buscar los 18 años en el poder, dejando de lado a su maestro Chávez, quien completó 13.

“Acepto la candidatura presidencial para los comicios del 28 de julio. ¡La acepto, la asumo y con el apoyo del pueblo iremos a una nueva victoria!”, dijo el mandatario, que, aun así, es sumamente impopular, Maduro carga una cruz a las espaldas: si bien logra aferrarse al poder de la manera más autoritaria posible, su popularidad está por los suelos.

Por ejemplo, un sondeo realizado por la firma de opinión pública Delphos revela que el régimen dictatorial cuenta con un respaldo ínfimo, abajo del 10 por ciento. Esto refleja el profundo cansancio que prevalece en el país vecino respecto al Gobierno, el cual ha conducido a su sociedad hacia una debacle. La carrera electoral, si sigue como hasta ahora, solo prolongará esa agonía.

Lorent Saleh

Activista venezolano encarcelado por el régimen

“Maduro va a seguir metiendo gente inocente en calabozos para desarticular a María Corina”.

Gaby Arellano

Dirigente de la oposición

“A la comunidad internacional le pedimos acciones claras. Lo único que le duele a Maduro son las finanzas”.

Miguel Otero

Director del diario El Nacional

“La comunidad internacional debe seguir presionando, denunciando e imponiendo sanciones”.

Iván Duque

Expresidente de Colombia

“La comunidad internacional debe solicitar a la Corte Penal Internacional acelerar el juicio contra Maduro”.

Leopoldo López

Líder de la oposición venezolana

“Maduro es un cagón. Le tiene miedo al pueblo y les tiene miedo a las mujeres”.

Andrés Pastrana

Expresidente de Colombia

“Que el presidente Petro invite a María Corina Machado a Colombia”.

Antonio de Lisio

Profesor universitario en Venezuela

“Al presidente Petro le pedimos que se ponga en los pies de la oposición venezolana”.

Enrique Peñalosa

Exalcalde de Bogotá

“¿Por qué Petro no se pronuncia? Porque planea hacer lo mismo”.

Paola Holguín

Senadora de Colombia

“El manejo de las relaciones con Venezuela raya con complicidad criminal”.