“Este logro también es tuyo”: la conmovedora gratitud de la hija de un voceador de periódicos mexicano tras su grado se hace viral

“Por fin”, dice relajada Flor Guadalupe Ginez, llamada cariñosamente Lupita, ahora que tiene en casa el diploma por el que tanto luchó. Como lo dejó ver en Facebook, se acaba de graduar en la Facultad de Comercio Administración y Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, pero su emoción no sería completa si no le reconociera a su padre su participación en este logro.

Carlos Farías es, en efecto, merecedor del reconocimiento de su hija, dado que luchó por la superación de su hija, a pesar de tener algunos obstáculos en su contra.

De origen humilde y reducido a una silla de ruedas ante la falta de una pierna, Farías logró establecerse como voceador de periódicos y así hizo el dinero necesario, no solo para alimentar, darle techo y vestir a su familia, sino además para proveer lo necesario para sus estudios.

Por eso resulta tan significativa la publicación que la nueva profesional hizo en su Facebook, conformada por un par de fotos junto a su padre, con su toga y su birrete de graduanda.

Por supuesto, en el centro de todo, el anhelado diploma entre los dos, como un símbolo más de su lazo imperecedero de padre e hija.

En otra imagen, el señor Farías aparece solo, con el diploma entre las manos

Ambas imágenes se escenifican en lo que a simple vista se podría calificar como una calle más de Nuevo Laredo.

Lo cierto es que esa esquina tiene un lugar importante en la historia de la familia Farías, pues es allí donde Carlos ha trabajado diariamente con sus revistas y periódicos para sostener su hogar.

“Gracias por nunca rendirte y siempre dar todo de ti para que no nos faltara nada. Este logro también es tuyo”, escribió Lupita, palabras que han bastado para que su historia resuene en las redes sociales.

A los pocos minutos, su sentido mensaje ya había obtenido 3.700 ‘me gusta’, además de suscitar una avalancha de mensajes de afecto y admiración ante este ejemplo de superación.

“Qué hermosa foto y qué gran orgullo de tu padre. Ay, ya lloré”. “Qué gran orgullo, muchas felicidades para todos porque es combo”. “El amor de la familia a uno lo impulsa. Claro que sí es logro de tus padres también”. Muchas felicidades, mis amores, todo sacrificio vale la pena. Bien hecho florecita”. Tales fueron algunas de las reacciones a la publicación de Lupita.

El señor Farías también hizo eco de su dicha en Facebook, en la cual dio a conocer algunas imágenes de la ceremonia de graduación de su hija.

Igual que ella, escribió unas sentidas palabras: “Gracias a Dios por darme la oportunidad de ver realizado uno de mis sueños. Siempre creí que lo lograría y hoy por fin su sueño se cumplió”.

En México también se hizo viral en junio pasado otra historia de superación escenificada en otra alma mater, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.

Allí, Felipe Espinosa, un hombre de 86 años, no dejó que la edad fuera un impedimento para alcanzar un viejo anhelo: graduarse como licenciado en Ingeniería en Procesos de Gestión Integral.

En momentos en que las personas de la tercera edad tienden a ser vistas como inútiles o muy mayores para emprender nuevas cosas, lo que el hombre hizo les arrancó lágrimas y comentarios de apoyo a los internautas conmovidos con su caso.

A sabiendas de que se trataba de una historia ejemplar para muchos, la directora del centro educativo, publicó en las redes sociales un video del emocionante momento en que Felipe recibía el diploma que lo acredita como el profesional que siempre quiso ser.

“Don Felipe recibió el título universitario. Con 86 años, ha sido un ejemplo para todos y hoy concluye una etapa más en su educación profesional”, escribió la directora Lilia Cedillo.

En el video se observaba a Felipe vestido especialmente para la ocasión, con vestido entero y corbata, surtiendo los trámites que una empleada de la alma mater le explicaba para tramitar su tarjeta profesional. Todo parece indicar que al nuevo ingeniero le gustaría ejercer como profesor.