INDUSTRIA
Estudio contradice la postura de Bill Gates sobre el consumo de carne; estos son los detalles de la investigación
En febrero de este año, Bill Gates sugirió que los países ricos solo deberían comer carne sintética.
En febrero de este año, el magnate y filántropo estadounidense Bill Gates instó a las naciones ricas a consumir carne ciento por ciento sintética como alternativa para mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero que impulsan el cambio climático global. Sostiene que debe ser una transición de cara a las próximas décadas.
No obstante, un reciente estudio hecho por el Clear Center de la Universidad de California, en Estados Unidos, dice que producir menor cantidad de carne vacuna no traería mayores efectos en la calidad del aire en el planeta.
Este estudio, que se dio a conocer y fue recordado por la revista Forbes, debido a las declaraciones recientes dadas por el magnate y a las iniciativas anunciadas por Dunkin’ Donuts, McDonald’s y Burger King, que firmaron contratos para vender sus productos con ingredientes alimenticios alternativos a la carne.
La revista destaca además que el dejar a un lado la industria de las carnes para que la reducción de la contaminación sea mínima, traería graves consecuencias, tanto para la industria como para las economías de los países.
Sondeos hechos por el medio a granjeros estadounidenses estipulan que si los productos vegetales llegan a representar un 25 % del mercado de las carnes, esto llevaría a que se redujeran en un 10 % los ingresos de la industria de carne vacuna.
La propuesta de Gates se dio a conocer en su nuevo libro titulado Cómo evitar un desastre climático, que sale a la venta este martes y que plantea una hoja de ruta para reducir las emisiones de gases contaminantes a cero.
Para Gates es posible frenar el calentamiento global en las próximas décadas, pero asegura que para lograrlo se requerirá mucha voluntad política y enormes avances tecnológicos, entre los que se encuentran desarrollar alimentos con un impacto ambiental menor, como “la carne sintética”.
“Creo que todos los países ricos deberían pasar a la carne 100 % sintética”, afirmó Gates en una entrevista en la revista MIT Technology Review.
Una investigación publicada en julio de 2020 por el Global Carbon Project de la Universidad de Stanford señaló que la cría de ganado bovino era una de las principales fuentes emisoras de metano, un gas de efecto invernadero que podría causar un aumento de las temperaturas de hasta 4 grados para fines del siglo.
Gates describió el problema del ganado como “muy difícil” y señaló que incluso los compuestos que reducen las emisiones de metano no eran suficientes.
El empresario de 54 años aseguró que el tema de la producción ganadera era “muy difícil”, al punto que sostuvo que incluso los compuestos que reducen las emisiones de metano no eran suficientes.
Afirmó que ya existían algunas iniciativas para la fabricación de carne sintética a nivel celular como era el caso de la empresa estadounidense Memphis Meats. Resaltó que el problema, en este caso, consistía en que era un proceso muy costoso. No obstante, aseguró que empresas reconocidas como Impossible Meat y Beyond Meat, que basan su proteína en la soja y la papa, tienen una hoja de ruta de calidad y de costos que las hace competitivas.
Con estos ejemplos, Gates quiso demostrar que era posible hacer una transición financieramente rentable y que estas iniciativas servían para abordar este problema de otra manera.
“Uno puede acostumbrarse a la diferencia de sabor. Además, aseguran que harán que sepa aún mejor con el tiempo”, mencionó.
Sin embargo, el filántropo estadounidense es consciente que esta es una alternativa a la que solo le pueden apostar las naciones ricas, por lo que cree los 80 países más pobres del mundo seguirán comiendo carne animal debido a que la carne sintética es demasiado costosa para ellos y no cuentan con el poder adquisitivo que quisieran.
Cada año son emitidas a la atmósfera 51.000 millones de toneladas de gases de efecto invernadero en el mundo y la meta es llegar a cero, según Gates para detener el cambio climático.