Gales

Exconvicto violó a dos mujeres cinco días después de salir de la cárcel y ahora fue condenado a cadena perpetua

El hombre obligó a una mujer a ver cómo abusaba de la hija adolescente, y posteriormente, hizo que la menor viera cómo su progenitora era vulnerada.

24 de agosto de 2022
El hombre afirmó a las autoridades que se encontraba bajo los efectos de marihuana sintética al momento del ataque.
El hombre afirmó a las autoridades que se encontraba bajo los efectos de marihuana sintética al momento del ataque. | Foto: Twitter/ @swpolice

Un aberrante caso se conoció esta semana en los tribunales británicos, donde las autoridades judiciales condenaron a cadena perpetua a un hombre de 28 años, identificado como Joshua Carney, luego de que se comprobara que, el pasado mes de marzo, este hombre, quien registra un pasado criminal, había arremetido violentamente contra una madre y su hija en la localidad de Cardiff, Gales, donde, tras amenazarlas de muerte, procedió a violarlas.

Según recogen medios internacionales como New York Post, el hombre, quien hacía solo cinco días había quedado en libertad tras permanecer un buen tiempo en la cárcel, entró violentamente a la residencia de sus víctimas, cuando se encontraba bajo los efectos de las drogas, y obligó a la madre a ver cómo él agredía sexualmente a su hija, una adolescente, para posteriormente obligar a la menor a presenciar un acto igualmente abusivo en contra de la madre.

Según detallan los medios internacionales, el hombre había ingresado por la fuerza a la residencia, tras haber consumido una sustancia conocida como Spice, una especie de marihuana sintética, y correteó a las dos mujeres por el interior de la casa, amenazándolas con un arma cortopunzante para lograr que ellas accedieran a sus deseos aberrantes.

Según detallan medios extranjeros, el hombre, a quien califican como “profundamente sádico”, amenazó a la madre con ‘apuñalarla’ si no dejaba de gritar, momento en el que la adolescente logró huir del lugar para encerrarse en una habitación y desde allí avisar a la Policía sobre lo ocurrido.

Tras la llegada de las autoridades, el agresor señaló que, debido a la ingesta de drogas, no lograba recordar ninguna de las acciones de las que era acusado, siendo detenido.

Por su parte, la madre y víctima acusó que, ante la sevicia expuesta por el hombre, ella decidió acceder a sus requerimientos porque temió que el hombre, quien se encontraba fuera de sí, fuera capaz no solo de herirlas, sino también de asesinarlas, pese a que nunca logró determinar si el hombre realmente se encontraba en posesión de un arma.

En medio del procedimiento policial, el atacante había afirmado a los agentes que no lograba recordar cómo había ingresado a la vivienda, sugiriendo incluso que posiblemente había sido por invitación de las mujeres, sobre quienes se refirió como “zorras”.

En medio del juicio adelantado ante los tribunales del Reino Unido, la madre presentó su testimonio, lamentando no haber podido defender a su hija de 14 años, y advirtiendo que, tras el ataque, tanto ella como la adolescente quedaron con severos traumas, debido a la agresión recibida por cada una de ellas, y el haber tenido que presenciar también la agresión a su familiar.

Durante el juicio, la jueza del caso, una togada identificada como Tracey Lloyd-Clarke, lamentó lo ocurrido, y calificó al agresor como una persona ‘profundamente sádica’, señalando que las acciones cometidas fueron ‘horribles’, e incluso ‘una pesadilla’.

En ese sentido, y debido a los antecedentes criminales que presentaba el hombre, la juez dictaminó la necesidad de que este hombre cumpla una cadena perpetua tras las rejas, precisando además que el individuo no debería ser considerado candidato para una medida de ‘libertad condicional’, en al menos 10 años, según recogen medios locales.

La madre de familia agredida afirmó que tras la violación, siente que dejó de ser una mujer ‘fuerte e independiente’, advirtiendo que ahora se siente insegura y vulnerable.

En ese mismo sentido, la menor agredida confesó que ha sufrido pesadillas y fuertes perturbaciones mentales a consecuencia del ataque recibido.

Así, la joven describió que tras ser violada, comenzó a sentir desconfianza de todos los hombres, advirtiendo que incluso ahora se siente impedida para poder expresar amor a través de un abrazo a su padre. “Siento que ya no puedo hacer eso, me siento asqueada”, recogen medios internacionales como parte del testimonio de la menor.

“He perdido toda confianza en las personas, he perdido toda confianza en los hombres en particular”, precisó la menor violada.