Exsacerdote acepta haber grabado un trío en pleno altar de una iglesia

La conmoción llegó hasta los residentes de Luisiana (Estados Unidos) cuando un párroco católico, identificado como Travis Clark, reconoció haber grabado porno con dos mujeres en el altar de la iglesia que presidía. Los hechos salieron a la luz pública en 2020, pero no fue sino hasta esta semana cuando se declaró culpable de “obscenidad grave”.

Sumado a la sanción social, la justicia le impuso una sentencia suspendida de tres años de libertad condicional monitoreada, así como una multa de 1.000 dólares (equivalentes a casi 4.900.000 pesos colombianos). En cuanto a sus “acompañantes”, ambas aceptaron cargos por vandalismo y se les impuso esta sentencia de cárcel condicionada, pero solo por dos años.

El actuar se reveló cuando en una noche de septiembre, y en plena pandemia de coronavirus, un transeúnte notó que las luces del templo estaban encendidas. Su intriga le llevó a acercarse a las ventanas de la iglesia católica romana de San Pedro y San Pablo y quedara estupefacto con lo que encontró. El religioso estaba con dos mujeres filmando escenas obscenas.

En el lugar, que estaba ambientado con una iluminación diferente, también se encontraron objetos sexuales y un dispositivo móvil ubicado en un trípode, según informó New York Post. Una vez el ciudadano tomó evidencias, llamó a la Policía que arrestó al ahora exsacerdote, de no más de 40 años.

“Un juego de roles”

Las otras mujeres acusadas indicaron a la Policía que estaban en el templo para participar en “un juego de roles” con el religioso (que había sido ordenado en 2013). Por lo sucedido, Clark terminó siendo expulsado de la congregación y, de acuerdo con el medio estadounidense, ha tenido que indemnizar a la iglesia por casi 40 millones de pesos colombianos.

Respecto al altar blanco de profanación, las autoridades eclesiásticas decidieron quemarlo y el arzobispo de Nueva Orleans, Gregory Aymond, catalogó lo sucedido como un acto “demoníaco”. En su reemplazo, dos meses después de las lo ocurrido, se erigió otra estructura.

Poco después de la filmación, Aymond condenó la conducta de este hombre y expresó su molestia por el uso inapropiado al que fue expuesto el templo. “Ahora es un momento muy difícil para ser católico en la arquidiócesis” de ese estado. “Al menos muchas personas sienten ira, traición y decepción, y yo siento lo mismo que mis hermanos sacerdotes. Lo que sucedió (...) es inaceptable”, puntualizó.

“Es pecaminoso y no puede ser tolerado (...). Su profanación del altar en la iglesia fue demoníaca y estoy furioso por sus acciones. Cuando los detalles quedaron claros retiramos el altar y lo quemamos. Consagraré un nuevo altar”, agregó en aquel momento.

Monja, arrestada por maltrato a niño

A mediados de este mes, una madre superiora italiana fue arrestada, acusada de maltratar a un niño en la institución que estaba bajo su responsabilidad. Sobre otras tres religiosas del mismo internado se abrió una investigación para determinar si también habían agredido a los menores.

La Fiscalía de Nápoles indicó que, en un video, la monja arrestada la emprendió contra un pequeño de cuatro años y su hermano mayor cuando este intervino para defenderlo. Uno de los testigos buscó la manera de grabar lo que ocurrió en el centro que acogía a niños vulnerables o en espera de adopción.

Según medios internacionales, a los niños se les restringía el uso de teléfonos para evitar que grabaran cualquier tipo de prueba. El juez a cargo de este caso encontró suficientes evidencias para tomar medidas sobre el lugar y sus directivas.