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Fotógrafa argentina pierde una mano y parte del brazo en trágico accidente en Brasil; esta es su historia
Los hechos ocurrieron en las aguas de Arraial do Cabo en Brasil, un lugar idílico para miles de turistas.
En Brasil, el país donde reside, la fotógrafa argentina Brenda González, la mujer vivió un impactante accidente el pasado sábado 26 de agosto debido a la fuerza de las olas, que causó que su brazo derecho hubiera quedado enganchado en la hélice de la lancha en la que viajaba.
¿Cómo pasó?
De acuerdo con el relato del diario argentino El Clarín, González subió a una lancha el sábado pasado en las aguas de Arraial do Cabo, una ciudad del estado de Río de Janeiro. La fotógrafa planeaba ese día, como era habitual, tomar fotografías al grupo de turistas que emprendía la aventura en ese momento.
El lugar se reconoce por sus blancas playas llenas de arena blanca y las aguas traslúcidas, que combinan perfectamente con unas idílicas puestas de sol. En el lugar, miles de turistas llegan para vivir en la aventura que ofrece uno de los destinos más hermosos de Brasil.
Ese día las aguas estaban muy tumultosas, no aptas para navegar. Llegando hacia la orilla, una enorme ola rompió a la mitad la lancha en la que viajaban, el fuerte sacudón hizo que todos los pasajeros perdieran el equilibrio, la mujer cayó al agua y, al intentar ayudar a los demás, su brazo derecho quedó enganchado en la hélice.
El impacto de la hélice en el brazo le produjo a la mujer tales heridas que debieron amputarle la mano y la parte inicial del brazo, que corre hasta el codo.
Vida en Brasil
Según El Clarín, la mujer de 31 años dejó hace ocho años su vida en Argentina y buscó su destino en Buzios, a unos 30 kilómetros de Arraial do Cabo.
En Brasil armó su vida con Federico Baldino, otro argentino que había llevado a cabo varios proyectos aprovechando el potencial turístico del lugar, como una agencia de turismo de paseos terrestres con cuatriciclos, boogies y transfers, y una productora de música electrónica con la cual realiza gran cantidad de eventos en la zona.
Ambos son padres de una pequeña llamada Caliza, quien nació hace cinco años en Brasil. En declaraciones al mencionado diario local, Federico Baldino explica como han armado su vida en ambos países: “Nació acá, pero habla las dos lenguas. Es mitad argentina y mitad brasileña, pero ama Argentina”, expresó.
Olas
La causa del accidente, que sucedió exactamente en la segunda parada, en Pontal do Atalaia, habría sido una ola gigante. De acuerdo con los expertos, este fenómeno consiste en peligrosas olas muy grandes, que se terminan de formar bien en la orilla y cuando pasan, dejan todo seco abajo, con la arena al descubierto.
Aunque las consecuencias para González son drásticas, el accidente pudo haber sido mucho más trágico. De acuerdo con el relato de su pareja, las condiciones del lugar ese día permitieron que a su mujer le pudieran salvar la vida y que la pérdida no fuera tan grande: “Nunca hay guardavidas en esa zona, pero el sábado había dos. Le sacaron el brazo de la hélice y justo había una enfermera entre los pasajeros que le hizo un torniquete. Evitó que Brenda se desangrara y se muriera”, afirmó el hombre, mientras acompañaba a su pareja en la clínica en donde aún permanece.