Perú

Fujimori espera decisión sobre indulto 30 años después de dar golpe en Perú

Fujimori, quien gobernó de 1990 a 2000, fue condenado a 25 años de prisión.

5 de abril de 2022
Alberto Fujimori
Alberto Fujimori Fujimori gobernó de 1990 a 2000. | Foto: HO / Poder Judicial Peruano / AFP

Treinta años después de dar un autogolpe en Perú, el octogenario expresidente Alberto Fujimori aguarda un dictamen de la Corte Interamericana de Derechos Humanos para saber si sale o no anticipadamente de prisión.

La noche del domingo 5 de abril de 1992 Perú fue sacudido por la frase “disolver, disolver el Congreso” en boca de Fujimori, quien lanzó un autogolpe de Estado con apoyo militar.

Tras el sorpresivo anuncio de Fujimori, que le permitió asumir poderes absolutos, tanques del ejército salieron a las calles de Lima y rodearon la sede del Congreso, el Palacio de Justicia y otros puntos de la ciudad.

Contingentes militares ocuparon los diarios, canales de televisión y emisoras radiales implantando una censura de prensa. La intervención alcanzó también a las agencias de noticias extranjeras, como la AFP, cuya redacción fue ocupada esa misma noche por un capitán y dos soldados como “medida de seguridad”, según dijeron.

El 17 de marzo pasado, el Tribunal Constitucional peruano le restituyó al exmandatario, de 83 años, un polémico indulto que le había concedido el presidente Pedro Pablo Kuczynski en diciembre de 2017 y, que además fue anulado 10 meses después por la justicia.

Fujimori, quien gobernó de 1990 a 2000, fue condenado a 25 años de prisión por crímenes contra la humanidad tras ser extraditado desde Chile en 2007.

Muere Susana Higuchi, madre de Keiko Fujimori
El presidente peruano Alberto Fujimori y la primera dama Susana Higuchi asisten a la celebración del Día de la Independencia en la década del 1990. (Foto AP / Marcelo Salinas, Archivo) | Foto: AP

La semana pasada, cuando parecía inminente su salida de la cárcel, la Corte Interamericana pidió a Perú que “se abstenga” de liberarlo hasta revisar un recurso de familiares de las víctimas de su gobierno.

“Alberto Fujimori debería salir libre, acatando lo que dice la Corte, está enfermo y anciano. Ha cumplido el 70 % de su condena”, dijo a la AFP el analista político Augusto Álvarez Rodrich.

El aniversario del golpe encuentra a Lima este martes con militares en las calles, por un toque de queda diurno decretado sorpresivamente por el presidente izquierdista Pedro Castillo para contener protestas por las alzas de los precios de combustibles y alimentos.

Derrotó al favorito

Descendiente de japoneses y con una exitosa carrera como docente universitario, se convirtió en 1990 en presidente de Perú al vencer en las urnas a Mario Vargas Llosa.

Aplicó un modelo económico neoliberal que le valió el apoyo de empresarios, clases dirigentes y organismos financieros internacionales. Ello le permitió superar la crisis e hiperinflación a la que había caído Perú, en el primer mandato del socialdemócrata Alan García (1985-1990).

Además, con racionalidad de matemático y contención nipona, aplicó mano dura para desmantelar las guerrillas de Sendero Luminoso y el MRTA.

Conocido como “El Chino”, Fujimori era muy popular. Pero en noviembre de 2000, en medio de una creciente oposición, huyó a Japón, tierra de sus padres, y renunció por fax a la presidencia.

“Corriente importante”

El politólogo Carlos Meléndez añadió a la AFP que “el fujimorismo ha trascendido más de la esperanza de vida regular que tienen los partidos políticos en el Perú, donde los partidos se crean en cada elección y son pocos los que pasan a la historia”.

“El fujimorismo sigue vivo como expresión de una corriente política, pero ha perdido mucho en las dos últimas dos décadas en las que el antifujimorismo ha ido creciendo”, indicó por su lado Álvarez Rodrich.

“Su vigencia a través de Keiko Fujimori, que ha disputado tres balotajes (en 2011, 2016 y 2021), refleja que sigue siendo una corriente importante principalmente porque los partidos políticos no han sabido renovar sus ideas”, agregó.

“En boca de todos”

Hasta hace un tiempo, el partido fujimorista Fuerza Popular dominaba el Congreso, con las 73 bancas ganadas en 2016 (de un total de 130), Sin embargo, en 2021 solo obtuvo 24.

Además, Keiko rompió relaciones con su hermano Kenji, que era el legislador más votado del país, y estuvo un año en prisión preventiva por el escándalo de la constructora brasileña Odebrecht, lo que afectó al partido.

“El fujimorismo va a ir desapareciendo y su futuro está atado a sus herederos, como Keiko o Kenji, a quienes no veo con la fuerza suficiente para llevarlo al poder otra vez”, aseguró Álvarez Rodrich.

Pero Meléndez discrepó de esta opinión: “No se puede decir que está en extinción porque está en el Parlamento, está en boca de todos en política cotidiana”.

“Así desaparezca físicamente, Alberto Fujimori va a continuar siendo importante porque cuenta con recursos organizativos y una ideología que mediante un discurso conservador de mano dura defiende reformas de mercado. Otros partidos no tienen esos recursos”, añadió.

*Con información de AFP.