Mundo
Goldman Sachs, primer banco de Wall Street que cierra sus operaciones en Rusia
Las grandes empresas siguen abandonando el país tras la invasión rusa a Ucrania.
El banco de negocios estadounidense Goldman Sachs anunció el jueves 10 de marzo su retiro de Rusia, convirtiéndose así en el primer gran banco de Wall Street en tomar distancia de Moscú tras la invasión de Ucrania.
“Goldman Sachs pone fin a sus actividades en Rusia, conforme a las exigencias reglamentarias y de licencia”, indicó una portavoz en un mensaje transmitido a diferentes medios de comunicación.
“Nos concentramos en acompañar a nuestros clientes del mundo entero en la gestión o el cierre de obligaciones preexistentes en el mercado y la garantía de bienestar de nuestros colaboradores”, añadió. Según su último reporte anual, la exposición de la firma en Rusia alcanzaba en 2021 a 650 millones de dólares. Goldman Sachs no da detalles sobre el número de empleados en el país.
Citigroup, que tenía una exposición total de 9.800 millones de dólares en Rusia a fines de diciembre, indicó por su parte que “evaluaba (sus) operaciones en el país”. Este banco anunció a fines de 2021 que busca ceder sus operaciones minoristas en Rusia.
Ikea, otro grande que se fue de Rusia
El gigante sueco de la venta de muebles Ikea anunció la suspensión de sus actividades en Rusia y Bielorrusia por la invasión rusa de Ucrania, lo que afecta a unos 15.000 empleados, 17 tiendas y tres fábricas de producción.
“La guerra tiene un impacto humano enorme y se traduce también en graves perturbaciones de la cadena de producción y comercio, razones por las cuales las compañías del grupo decidieron suspender de manera temporal las actividades de Ikea en Rusia”, indicó el grupo en un comunicado enviado a la AFP.
Este anuncio tiene impacto sobre todo en Rusia, donde el grupo sueco llegó en el año 2000 y es de las principales empresas occidentales por número de trabajadores. En Bielorrusia, al contrario, no tiene tiendas y solo trabaja con algunos proveedores.
“La devastadora guerra en Ucrania es una tragedia humana. Nuestra más profunda empatía y preocupación está con los millones de personas afectadas”, destaca el grupo Ikea, dividido en varios consorcios.
“Esta decisión tendrá un impacto directo para cerca de 15.000 trabajadores, pero las empresas del grupo aseguran los puestos de trabajo y los ingresos, proporcionando apoyo para ellos y sus familias”, explica la mayor empresa del sector.
El consorcio Ingka, que controla la mayoría de las tiendas de Ikea en el mundo, y tiene en Rusia 12.000 empleados, es el más afectado. Ikea, por su parte, da empleo a unos 2.500 trabajadores, la mayoría en la producción, y tres fábricas en Rusia, orientados sobre todo al mercado local.
Este grupo afirma que su decisión afectará a 47 proveedores en Rusia, y diez en Bielorrusia, y que también cierra la puerta a la importación-exportación desde (o hacia) estos dos países. Ikea había previsto, en un primer momento, mantener abiertas sus tiendas en Rusia, lo que le costó muchas críticas en Suecia.
*Con información de AFP.
Por ser una noticia de interés mundial, todo el contenido sobre el conflicto entre Rusia y Ucrania será de libre acceso para nuestros lectores en todas las plataformas digitales de SEMANA.