El líder de la oposición rusa, Alexei Navalny, fue encontrado culpable de malversación de fondos públicos y recibió una sentencia suspendida de cinco años. Por lo tanto, el activista, que ha estado detrás de las protestas contra Vladimir Putin y las investigaciones contra la corrupción, no podrá aspirar a la Presidencia en 2018. Después de su juicio, Navalny afirmó que con este veredicto el Kremlin muestra que lo considera demasiado peligroso y por ello no le permiten participar en la carrera electoral. Sin embargo, señaló que apelará la decisión y continuará con su campaña sin importar el resultado del fallo. A esta polémica restricción de derechos políticos se suman las críticas que Putin ha recibido por ratificar una ley que despenaliza parcialmente la violencia doméstica en el país.
