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Habla la exnovia del estafador de Tinder Simon Leviev, que lo apoyó en sus últimos meses
Cuando este documental se dio a conocer, Konlin no solo apoyó a su novio, sino que continuó con su relación. Hoy dice públicamente que era infeliz.
La última novia del estafador de Tinder, Kate Konlin, modelo de 25 años, habló por primera vez, meses después de que ella la apoyara cuando se dio a conocer el famoso documental de Netflix llamado justamente “El Estafador de Tinder”, en febrero de 2022.
Cuando este documental se dio a conocer, Konlin no solo apoyó a su novio, sino que continuó con su relación. Hoy dice públicamente que era infeliz.
¿Quién es el estafador de Tinder?
Simon Leviev es como se hace llamar hoy Shimon Heyada Hayut, quien se cambió legalmente su nombre después de las demandas, es el protagonista de una sórdida historia real que muestra como un hombre se acercó a varias mujeres alrededor del mundo a través de la aplicación, y las manipuló emocionalmente para que le prestaran dinero, un dinero que nunca regresó.
Kate Konlin, quien es modelo internacional era la pareja de Leviev en ese momento y aparecía con él permanentemente en fotografías demostrando su unión, a pesar las evidencias del documental, y de las demandas penales de las que fue parte Leviev, que demostraban que es un hombre peligroso.
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Control emocional
Hoy la mujer habló y contó que se quedó a su lado porque se encontraba bajo su control emocional. En el momento en que se dieron a conocer como pareja ella insistía en que la información mostrada en el documental era falsa y lo presentaba como un exitoso agente inmobiliario.
Konlin nació en Ucrania en 1997 y comenzó a salir con Leviev en 2020, después de un intercambio de mensajes por Instagram.
Al igual que muchas de las mujeres que hablaron abiertamente en el documental y lo demandaron ante las autoridades, Konlin, que habló con la BBC, describió las etapas iniciales de su romance como “una bomba de amor” y dijo que Leviev estaba obsesionado con ella.
Konlin contó como, poco a poco, una relación que parecía de ensueño, se fue convirtiendo en pesadilla cuando él empezó a criticar su apariencia física.
Al principio Leviev la acompañaba a sus sesiones de fotografía, la esperaba mientras trabajaba, limpiando su casa y a lo largo del día le enviaba cariñosos mensajes de voz.
Cuando iniciaron las discusiones, él comenzó a criticar su aspecto físico, la forma en que ella se vestía, su piel, que a veces tenía brotes de acné e incluso su peso. Ella dice que empezó a perder confianza en sí misma.
Durante los 18 meses que fueron pareja, la modelo cuenta que cada vez veía menos a sus amigos y cuando se encontraba con algunos de ellos, le manifestaban que se veía “gris”, y que ya no era la persona alegre y sociable.
“Ha llamado mentirosas a todas las mujeres que han hablado en su contra. No quiere que cuente mi historia de abuso emocional”, dijo Konlin en su entrevista.
Una estafada más
Konlin había asegurado cuando salió el documental, que su pareja jamás le había pedido dinero, y era una de las razones por las que aseguraba que toda la historia era falsa.
Hoy confiesa que lo que sucedió fue diferente. Al cabo de varios meses de relación Leviev comenzó a pedirle dinero prestado, ella llegó a darle 150.000 dólares.
Konlin cuenta y muestra evidencias con mensajes de audio, de que Leviev le gritaba pidiéndole dinero prestado porque su propio dinero estabainmovilizado “en inversiones”.
En una de las llamadas el hombre le grita a la modelo explicándole que no puede devolverle el dinero porque está invertido: “¡Kate, soy millonario Y eso es un hecho!” dice “En este momento estoy en un problema. ¿Entiendes? Estoy en un problema ¿Entiende eso tu jodido cerebro? Ese cerebro tuyo de pájaro. Estoy en un aprieto, Kate. Yo no te robé. Me lo diste por tu propia voluntad. Me lo prestaste”.
De acuerdo con el documental, que he hecho se convirtió en el más visto de Netflix en 90 países al estrenarse, Simon Leviev estafó por cerca de $10 millones de dólares (cerca de 50.000 millones de pesos) a distintas mujeres que conoció por internet, algunas incluso, con las que solo tuvo una amistad.