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Holanda suspende vuelos procedentes de Reino Unido para frenar “mutación” del coronavirus
La decisión se tomó horas después de que el Gobierno británico decretó el confinamiento en parte del país para tratar de frenar la propagación de la nueva cepa.
El Gobierno holandés suspendió a partir del domingo todos los vuelos de pasajeros procedentes de Reino Unido hasta el 1 de enero tras hallar en Holanda un caso con una variante más contagiosa de coronavirus que circula en ese país.
La prohibición, que empieza a las 6:00 de la mañana este domingo y se prolongará hasta el 1 de enero, se produce horas después de que el Gobierno británico decretó el confinamiento en parte del país para tratar de frenar la propagación de la nueva cepa.
“Una mutación infecciosa del virus del covid-19 circula en Reino Unido. Se dice que se contagia más fácil y rápidamente y es más difícil detectarla”, asegura el ministerio de Salud holandés en un comunicado.
El organismo público de salud holandés, el RIVM, recomienda por tanto que “se limite el máximo posible la introducción de la cepa de coronavirus procedente de Reino Unido limitando y/o controlando el movimiento de pasajeros” con ese país.
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El Ministerio de Salud agrega que “el estudio de un caso en Holanda a principios de diciembre halló un virus con la variante descrita en Reino Unido”.
Los expertos tratan de averiguar cómo se produjo la infección y si hay otros casos similares.
El gobierno del primer ministro holandés, Mark Rutte, decidió, “cautelarmente”, suspender los vuelos desde Reino Unido, según el comunicado, que añade también se están analizando otras formas de transporte con Reino Unido.
Asimismo, insta a los holandeses a que no viajen a menos que sea estrictamente necesario.
“En los próximos días, junto con otros Estados miembros de la UE (el gobierno) explorará otras medidas para limitar el riesgo de que la nueva cepa del virus se introduzca desde el Reino Unido”, dice el comunicado.
Holanda decretó un confinamiento de cinco semanas hasta mediados de enero, lo que ha llevado al cierre de colegios y comercios no esenciales para frenar el virus.
El primer ministro británico, Boris Johnson, dijo el sábado que los datos preliminares sugieren que el virus que circula en Londres y el sureste de Inglaterra es un 70% más contagioso y anunció la entrada a partir de la medianoche de Londres y del sureste del país en situación de confinamiento total después de rebasar el total de dos millones de contagiados en las últimas horas.
“No podemos seguir con las Navidades tal y como lo teníamos planeado”, ha declarado Johnson en rueda de prensa, donde ha anunciado estas medidas “con mucha tristeza”, al explicar la decisión de alterar los planes previstos para la temporada navideña con esta nueva batería de medidas, que en principio se revisarán a finales de año.
Londres y el sureste del país entran así en el llamado “nivel 4”, uno que cierra efectivamente las zonas afectadas, obliga a los residentes a quedarse en sus domicilios salvo limitadas excepciones, cierra las instalaciones de ocio y servicios no esenciales, e impone el trabajo desde casa salvo circunstancia inapelable, según el primer ministro.
Aunque en principio la duración inicial estipulada es de dos semanas, estas restricciones se revisarán el próximo 30 de diciembre, día en que el Gobierno se pronunciará sobre una posible extensión para salvar, en la medida de lo posible, la última semana navideña.
Asimismo, en lo que al resto del país se refiere, el primer ministro ha reducido significativamente los cinco días navideños en los que tenía previsto flexibilizar las restricciones hasta ahora vigentes, y que ahora se limitará a solo 24 horas.
Sobre la nueva cepa, el principal asesor científico del Gobierno británico, Patrick Vallance, ha querido llamar a la calma al ratificar que no hay pruebas de que la nueva cepa “que es predominante en Londres” sea más letal que la modalidad original, ni altera la respuesta inmunitaria o a las vacunas.
Sin embargo “la transmisión es más rápida”, lo que significa que “hay que limitar todavía más los contactos y reducir su capacidad de propagación”, ha explicado Vallance antes de recordar que la incidencia se ha disparado un 50 por ciento durante las últimas dos semanas en las zonas afectadas por esta nueva restricción.
En lo que al balance se refiere, el país ha registrado 27.052 casos en las últimas horas y otros 534 fallecimientos, que elevan el total de afectados a más de dos millones de contagiados (2.004.219) y 67.065 fallecidos.
Mientras, la ministra principal escocesa, Nicola Sturgeon, ha anunciado la cancelación de la relajación navideña adelantada por las autoridades y ha explicado que estará prohibido salir y entrar de Escocia en “una acción preventiva muy firme”, que ha considerado necesaria para proteger a Escocia de la nueva cepa, considerada un 70 por ciento más contagiosa.
Así, Escocia estará en Nivel 4 de restricciones desde el 21 de diciembre y se limita a ocho personas el número de asistentes a reuniones en Navidad, solo ese día.
Los colegios reabrirán, pero solo para atender a los trabajadores de sectores esenciales. El resto del alumnado tendrá sesiones telemáticas a partir del 11 de enero y desde el 18 se pondrá en marcha una reanudación gradual de las clases presenciales.
Anunciar estos cambios “me ha hecho querer llorar”, ha asegurado Sturgeon, pero eran necesarios para “evitar que las cosas empeoren posiblemente muy rápidamente”.
Con información de AFP y Europa Press