Hombre que trabajaba instalando cámaras de seguridad espió en unas 10.000 ocasiones a mujeres durante relaciones sexuales

Telésforo Avilés, un exempleado de 35 años de la empresa de seguridad para el hogar y pequeñas oficinas ADT, en Estados Unidos, se encuentra actualmente pagando una pena máxima de cinco años por los delitos de fraude informático y por grabación visual invasiva.

Avilés fue declarado culpable durante el proceso judicial, luego de que él mismo confesara haber espiado a clientes teniendo relaciones sexuales en casi 10.000 ocasiones, durante cinco años y a través de 200 cámaras.

El hombre de 35 años se desempeñaba como técnico en ADT, donde se encarga de la instalación de cámaras de seguridad en hogares. Al momento de la instalación de los dispositivos, Avilés añadía su dirección de correo electrónico a la lista de usuarios autorizados para acceder a las cuentas de la compañía. De esta manera, podía acceder de manera remota al sistema de seguridad, ver las imágenes y hasta desactivar alarmas.

Según se conoció durante el proceso judicial, el hombre le insistía a sus clientes sobre la necesidad de añadirse como usuario para poder probar el funcionamiento de los dispositivos, así podía agregar su cuenta desde el momento inicial en que instalaba las cámaras. En otras ocasiones, les habría agregado sin el consentimiento de los clientes para hacer las supuestas pruebas.

El abuso de Avilés quedó al descubierto cuando uno de los clientes de dio cuenta de lo que estaba sucediendo e inmediatamente alertó a las autoridades competentes.

Según los medios locales, el fiscal federal interino Prerak Shah dijo que “este acusado, encargado de salvaguardar los hogares de los clientes, en cambio se entrometió en sus momentos más íntimos”, y agregó que “nos complace hacerle responsable de esta repugnante traición a la confianza.”

Entre tanto, Matthew J. DeSarn, agente especial del FBI de Dallas, dijo que Avilés “utilizó su puesto de trabajo para violar ilegalmente la privacidad de numerosas personas. El FBI trabaja con nuestros socios encargados de hacer cumplir la ley para investigar a fondo todas las intrusiones cibernéticas y responsabilizar a los delincuentes por sus acciones”.

Según han informado los medios locales, debido a este caso, ADT, la empresa de seguridad, se ha visto afectada por lo menos por dos demandas colectivas; una en nombre de los clientes y la otra originada por los menores y otras personas que viven dentro de las casas.

Sobre el hecho, la empresa de seguridad se pronunció y aseguró que están “agradecidos con el FBI de Dallas y la Oficina del Fiscal de los Estados Unidos por responsabilizar a Telésforo Avilés de un delito federal.”